Mapa de radares hacia la costa atlántica: habrá más puestos de control de velocidad
Se acerca la época del año en que muchas familias planean sus vacaciones y también las salidas de fin de semana para pasar las fiestas. Quienes se vuelquen a las rutas, principalmente a aquellas que van a la costa atlántica, estarán más controlados que en años anteriores debido a la instalación de más equipos para medir la velocidad máxima en el camino.
En las principales vías hacia la costa, 30 puntos con radares de velocidad se distribuyen entre la ciudad de Buenos Aires y los centros balnearios. En la ruta 2, hacia Mar del Plata, 23 cámaras de velocidad, fijas y móviles, estarán atentas para detectar infractores; mientras que la ruta 11, que tiene como principal destino a Pinamar, Cariló y Villa Gesell, hay siete. Estos números marcan un incremento de los equipos ya que el año pasado había 15 y cinco, respectivamente.
Cubrir los 415 kilómetros que separan Mar del Plata de Buenos Aires por la ruta 2 demanda unas cuatro horas y media si se respeta la velocidad máxima, de entre 60km/h y 120 km/h, de acuerdo al tramo. El tiempo aumenta si el tránsito es intenso, como ocurre en el comienzo de la temporada, los fines de semana o en los cambios de quincena.
Los primeros controles de velocidad se encuentran en la autopista a La Plata al pasar el peaje de Dock Sud. Después del peaje Hudson, y cuando se ingresa a la autovía 2, una cámara de velocidad máxima 60 km/h sorprende al conductor en pleno ascenso, a pesar de estar señalizada. Para tener en cuenta: el acceso está pocos metros después de las cabinas. Una distracción obliga a seguir hasta La Plata y, luego, retomar. El resto de los radares se encuentran a lo largo de toda la autovía y también en la 11.
Desde la Dirección Provincial de Política y Seguridad Vial informaron a LA NACION que muchas de las cámaras de velocidad fueron relocalizadas porque algunos municipios hacían un uso indebido de esos equipos o no podían justificar la presencia de un control en su jurisdicción. Además se agregaron otros cinemómetros en puntos estratégicos.
En toda la provincia de Buenos Aires se aplica la Ley Provincial de Seguridad Vial 13.927 que establece, entre otras cosas, los valores de las infracciones por exceso de velocidad. Las multas se calculan según el valor de la Unidad Fija (UF), que se establece en las subas de los combustibles, tomando como referencia el costo del litro de nafta de mayor octanaje informado por la sede platense del Automóvil Club Argentino. En marzo, la UF llegó a $28,97 y en octubre alcanzó $44,30.
Según la ley provincial, superar los valores permitidos de velocidad se sanciona con entre 150 y 1000 UF, es decir, entre $6645 a $44.300. Si se paga en tiempo y forma, al recibir la notificación, el costo es la mitad del mínimo, es decir, 75 UF o $3322. De lo contrario, se puede hacer un descargo en la justicia administrativa.
Si el infractor se encuentra a más de 60 kilómetros del lugar de la citación, que puede ser en uno de los siete Juzgados Administrativos de Infracciones de Tránsito provinciales, podrá prorrogar la jurisdicción, es decir, solicitar el traslado del expediente al juzgado que le corresponde por jurisdicción y allí hacer el descargo. Un juez de faltas establecerá el monto de la multa o su eximición.
En total, en toda la provincia de Buenos Aires hay instalados 310 equipos automáticos y semiautomáticos de constatación de infracciones de tránsito. Se dividen en 247 equipos cinemómetros (189 fijos y 58 móviles); 32 equipos de control de luces y 31 equipos de control de semáforos.