Magui Aicega: “El deporte ayuda a los chicos porque les plantea objetivos"
Si algo tiene la ex capitana de Las Leonas y actual entrenadora de inferiores es garra. En la playa, su rutina incluye trabajo, familia y seis perros
Aunque el día está nublado y un poco fresco, Magui Aicega llega a la radio de ESPN (donde todas las tardes de enero condujo BB Va de 10 junto a Bebe Contempomi), caminando por la playa. Lleva un short de jean y el traje de baño rosa debajo de la remera, que deja entrever un digno bronceado de verano. La ex capitana de Las Leonas, nutricionista y mamá de Rocco, Indiana y el pequeño Luca, se instala cada enero, desde hace siete años, junto a su familia en Pinamar. Relajada, en el balneario Terrazas del Alba charló acerca de su rol de jugadora y entrenadora de inferiores en el Belgrano Athletic (el club del que surgió como una de las mejores jugadoras de hockey del país), su trabajo en la radio, su amor por los perros y la rutina de vacaciones en esta ciudad. Además, adelantó sus proyectos para 2016.
—¿Estas fueron vacaciones o trabajo?
—Vacaciones con algo de trabajo. Pero igual lo paso bien. Mis hijos se criaron acá y la verdad es que hacer radio es un placer.
—¿Qué te atrae de este rol de conductora?
—Creo que cualquiera que trabaja en radio sabe que es un medio que te permite ser vos.
No tenés que caretear nada. Hacés contacto con determinados oyentes y ya es como si fueran parte del equipo. Entrás en la vida de mucha gente y ellos entran en la tuya. A mí también me pasa cuando estoy del otro lado, escuchando, que me siento parte de algún programa y si hablan de un tema, opino. Es como si fuera un grupo de amigos charlando sobre algo. Se genera tanta energía con los oyentes que no lo podés creer.
—¿Y cuando bajás a la playa te cruzás con gente que escucha el programa?
—Sí, muchas veces tratás un tema y las personas se te acercan para comentar algo. Obviamente, más allá de ser vos misma cuando conducís, hay momentos en los que exagerás un personaje para meterle pimienta a la situación y que el oyente se prenda en determinados debates. Pero siempre lo que potenciás es lo que realmente pensás; digamos que aportás algo extra para que se den diferentes puntos de vista. Cuando hablás con un amigo no querés generar un debate. Acá sí, y está buenísimo.
—¿Qué lugar ocupan la radio y el hockey en tu vida?
—La radio es un trabajo y el hockey mi cable a tierra. Yo sigo jugando en mi club. La radio es un trabajo que disfruto. Y el hockey me despeja, jugué desde siempre y lo amo. Sí puede suceder que en algún momento no pueda jugar más por las obligaciones, entre el trabajo y la familia. Pero siempre, de alguna u otra manera, voy a estar ligada, entrenando o yendo los sábados a los partidos. Pero no es que con la radio reemplace al hockey.
—¿Tus hijos juegan?
—Rocco, el de 6, juega al rugby y obviamente al fútbol. Indiana tiene 4, pero como viene siempre conmigo ya tiene su palito, y le pega muy bien, de verdad. Sin que le enseñe. Yo solamente le mostré cómo agarrarlo, nada más. Es tan chiquita que absorbe todo. Yo entreno a la 7ma y a la 8va del Belgrano Athletic, con nenas que van de los 11 a los 14 años. Y son como esponjas: vos les decís algo y lo hacen. A Indiana le digo: "hacé un dribling", le muestro ¡y listo! Ya sabe cómo tiene que mover el palito, de un lado, del otro...
—¿Te gustaría que siguieran tus pasos?
—Me encantaría que hagan deporte, porque yo me crié jugando al hockey. Pero obviamente, una siempre piensa "que hagan lo que les guste". Los llevo para ese lado porque tanto mi marido (Mariano Lorenzetti, ex jugador de Hindú Club y actual Director General de Promoción y Desarrollo del Municipio de Tigre) como yo nos criamos en un ambiente deportivo, jugando en equipo, y de ahí salieron nuestras mayores amistades, un lindo grupo con el que compartís valores, objetivos. Muchas veces surge la pregunta de por qué el deporte sirve para sacar a los chiquitos de la calle, y justamente es porque les plantea objetivos. Esos chiquitos por ahí no tienen un objetivo en la vida y vos, como deportista, tratás de que encuentren el suyo, para motivarlos. Claro que tiene que haber alguien que te enseñe esos valores que después se pueden aplicar en la vida.
—Sos amante declarada de los perros. ¿Los traés a la playa?
—Tengo seis perros: cinco callejeros que adopté y un labrador. No los traigo, los dejo en casa porque la verdad es que me da pena no poder traerlos a todos. Traería al labrador, que es el más viejito, el hijo de la que fue mi perra preferida. Después de su muerte, me dije: "no quiero volver a encariñarme tanto con un perro". A ella la traía acá, a la playa, era espectacular. Se metía al mar, corría, yo le decía "andá a la carpa" y ella iba y se quedaba. Era la mejor. La gente no lo podía creer. Y no es que la amaestré ni nada. Era increíble... Yo levanto muchos perros de la calle para darlos en adopción. Mi marido me dice: "está todo bien, pero dalos en adopción".
—¿Cuál es tu rutina acá, en Pinamar? ¿Estás haciendo deporte?
—Entreno, porque la pretemporada la empezamos en febrero. Voy a la mañana, tengo un plan, a veces hago fondo, a veces hago alguna pasada, otras un intermitente. Como tengo el bebé de dos meses, me levanto muy temprano (a las seis ya estoy arriba), salgo a correr tempranito y después venimos con toda la familia a la playa. Los chicos se quedan hasta las ocho de la noche. Al mediodía, como está mi mamá con nosotros, la llevo a ella y al bebé y los dejo en casa. Hago el programa y después levanto al resto de la familia.
—Durante el verano, ¿cómo te alimentás?
—Yo soy vegetariana, pero no de cosas raras. Sólo no como carnes, como mucha fruta, verduras, arroz integral. Acá, en el balneario, hacen un sándwich vegetariano que está buenísimo. Como en esta época hay más variedad de frutas y verduras, aprovecho y como tartas, que me encantan.
—¿Cocinás vos?
—No… (risas), me las hacen acá o en casa. A veces cocino alguna tarta yo, pero en general las hace mamá, y le salen muy ricas.
—¿Vivirías en Pinamar?
—Me encantaría, pero la verdad es que tengo todas las actividades en Buenos Aires.
—¿Y cuál es tu rincón favorito cuando venís?
—Me gusta toda la ciudad, no tengo un lugar preferido. Y me encanta también venir en invierno. Me relaja estar cerca del mar, la playa… Me da paz y tranquilidad.
—¿Ya tenés planeado tu 2016?
—Además de continuar con la radio, voy a seguir entrenando a las divisiones inferiores del club. Después tengo algún que otro proyecto dando vueltas que voy a redondear en febrero. Todo siempre muy relacionado con el deporte, claro.