Macri analiza llamar a un plebiscito sobre la urbanización de villas
Los vecinos decidirían cómo financiarla
El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, evalúa convocar a un plebiscito para que los vecinos decidan el destino de las villas. Piensa en dos alternativas para consultar a los ciudadanos sobre cómo financiar las tareas de urbanización: si aprueban un aumento de impuestos o si justifican la postergación de otras obras para la ciudad.
Así lo reveló en una entrevista con La Nacion, luego de considerar que la intervención en los asentamientos ilegales constituye un asunto de “complejidad extrema” y que “el presupuesto asignado no cubre ni siquiera el crecimiento del fenómeno”. El líder de Pro confirmó, de todos modos, su voluntad de erradicar las villas 31 y 31 bis, en la zona de Retiro, empezando por la segunda, aunque admitió la dificultad para hacerlo “porque ambas están situadas en tierras nacionales”.
A la hora de efectuar un balance de sus primeros seis meses de gestión, que se cumplen pasado mañana, el jefe de gobierno reconoció problemas para avanzar en ciertas áreas. “Reconstruir una ciudad lleva tiempo, no se puede cambiar de un día para otro. Lo que hay que evaluar es la tendencia. Y nosotros todos los días estamos un poco mejor. Hay un cambio cultural hacia el respeto: el respeto de las leyes, el respeto del espacio público, el respeto entre la gente", dijo Macri.
Además, destacó los logros en materia de bacheo, reparación de veredas e incluso arreglo de escuelas, uno de los puntos más cuestionados por la oposición y por alumnos y padres, que se manifestaron días atrás por la falta de gas en algunos colegios. "Ya realizamos 1200 intervenciones de mantenimiento edilicio en las escuelas y resolvimos los problemas de gas en el 75% de los establecimientos. Nunca en la historia pasó algo igual", aclaró.
Y prometió que, cuando su administración se acerque al año en el poder, los resultados serán mucho más visibles.
-Usted siempre hizo hincapié en que hay que hablar de los problemas concretos de la gente. Hay vecinos que no perciben mejoras en este sentido y que están decepcionados.
-Siempre hay minorías excesivamente optimistas o gente que siente frustración. Pero la gente razonable sabe que el cambio lleva tiempo. Hay áreas que van más lentas. No hay ninguna estructura de personal que acompañe las decisiones de los funcionarios.
-Sobre todo en materia de basura se oyen quejas.
-Los invito a recorrer el centro a las 6 de la mañana, antes de que ingrese la gente que viene a trabajar. Está limpio. También necesitamos la colaboración de los ciudadanos, para no ensuciar lo que se limpia. Estamos bien dentro de lo que permite la licitación vigente; habrá más cambios en los pliegos de la próxima licitación, en enero de 2009.
"Tenemos un alto nivel de reconocimiento popular por el bacheo y la reparación de veredas. Hay barrios completos arreglados."
-¿Y el resto de la ciudad?
-Ya están empezando a trabajar los adjudicatarios de las nuevas licitaciones para mantenimiento de la vía pública. Hacia fines de año, el cambio va a ser grande.
-¿Fue un error político anunciar que iban a arreglar las escuelas durante el verano?
-Nunca dijimos eso. Dijimos que en 4, 5, 6 semanas íbamos a poder adjudicar las obras. Ya realizamos 1200 intervenciones de mantenimiento edilicio en las escuelas y resolvimos los problemas de gas en el 75% de los establecimientos. Además, lanzaremos una licitación de arreglo con mantenimiento incluido por una determinada cantidad de años, porque lo que faltó en todos los últimos años fue mantenimiento. Será por $ 25 millones para un paquete de 20 escuelas por vez. A fines de año, vamos a tener 500 escuelas en reparación.
-Las villas son otro tema delicado para los vecinos. ¿Se ha hecho algo en esta área?
-El tema es de una complejidad extrema. Hay 350.000 personas viviendo en situación irregular, en villas e inmuebles usurpados. El presupuesto asignado por la Legislatura no cubre siquiera el crecimiento del fenómeno.
-¿La Legislatura aprobó el presupuesto que mandaron ustedes?
-Asignamos lo que quedaba. Porque hay otras prioridades para los porteños. Creo que hay que abrir el debate sobre esta cuestión: ¿la ciudad puede hacerse cargo de la urbanización? ¿Qué quieren los vecinos que se haga con su dinero? La gente tiene que saber que intervenir en las villas tiene un costo. El costo sería aumentar impuestos o no hacer otras obras.
-¿Cómo piensa consultar la opinión de los vecinos?
-Un plebiscito serviría.
-¿Y qué va a preguntar: si aceptan un aumento de impuestos para urbanizar las villas?
-Todavía lo tengo que pensar un poco más. Es algo en estudio.
-Usted en la campaña hablaba de solucionar el problema de las villas y de no aumentar impuestos.
-Insisto: es la sociedad la que debe decidir. Si entregamos cien viviendas, hay otras 300 familias que se instalan en la villa. Y hay jueces que avalan que a esas familias también se les dé casa. Entonces, antes que nada, hay que detener el crecimiento, que no para.
-¿Por qué cambiaron de posición respecto de la villa 31? En la campaña hablaron de erradicarla y luego, de urbanizarla.
-No cambiamos. Creemos que ese asentamiento no se puede urbanizar, por el peligro de su ubicación [junto a las parrillas ferroviaras] y porque se trata de un lugar insalubre. Pero es un proceso que hay que realizar de a poco, mediante el diálogo con la gente, y con el compromiso de darles vivienda en otro lugar. Ellos deben tener confianza en la palabra de este gobierno.
-Además, está el gobierno nacional de por medio.
-Intentaremos un acuerdo. Yo puedo mandar a los inspectores a verificar construcciones peligrosas en altura, que aparecen todos los días, pero no tengo poder de policía para ordenar el desalojo.
-Volviendo al balance, la oposición cuestiona que hay bajos niveles de ejecución presupuestaria...
-Siempre el primer trimestre devengado de un año corresponde al último del año anterior. Certificamos y pagamos lo hecho en el último trimestre de 2007. Además, hace 60 días que la Legislatura no nos aprueba la emisión de un bono para financiar un plan de inversión por 1600 millones de pesos. De cualquier manera, por las condiciones actuales del país, el Banco Ciudad nos dice que no podría colocar el bono.
-¿Qué le contesta a la oposición, que propone que primero gaste las partidas subejecutadas antes de endeudarse?
-Que no se preocupe. A fines de año vamos a tener altos niveles de ejecución presupuestaria en todos los ministerios. Igualmente, no alcanza. La ciudad necesitaría una inversión total en infraestructura de US$ 14.000 millones. El promedio histórico viene siendo de US$ 250 millones por año. Nuestro gran récord será invertir US$ 1000 millones.
-Admite que hay áreas que van más lentas. ¿Esto lo adjudica a la burocracia o sus funcionarios?
-En realidad, a la falta de burocracia, porque el Estado está desarmado.
-¿Los funcionarios han cumplido las metas de los compromisos de gestión?
-Firmaron compromisos a dos años. Cumplieron metas parciales.
-¿Está pensando algún cambio en el gabinete?
-No.
-¿Qué análisis hace de la renuncia de varios funcionarios?
-No entiendo por qué se sorprenden tanto. Lo evalúan con la lógica de los gobiernos armados con punteros que cobran por los votos conseguidos, no por su desempeño; entonces, nunca hay recambio.
-A menudo trascienden muchas disputas internas en el gobierno. ¿No le preocupan?
-Eso tiene que ver con la parte frívola de la política. Hay gente que rodea a líderes del espacio a la que le gusta fomentar esto, porque tienen la lógica de la vieja política.