Los restos de Juana Gorriti, a Salta
El Poder Ejecutivo promulgó una ley que dispone el traslado; habrá homenajes.
SALTA.- Los restos de Juana Manuela Gorriti, la primera novelista argentina, periodista y heroína de gestas en Bolivia y Perú, serán trasladados desde el cementerio de la Recoleta hasta el Panteón de las Glorias del Norte, en la Catedral Basílica de su provincia natal.
Así lo dispone la ley 25.047, recién promulgada por el Poder Ejecutivo tras ser aprobada en el Congreso. El traslado se concretará en los próximos meses. En los considerandos de la norma se señala el objetivo de "rendir merecido homenaje a una de las mujeres más destacadas de nuestra literatura y de nuestra historia".
La diputada nacional Fani Ceballos de Marín (Renovador-Salta), autora del proyecto que devolverá los restos de Gorriti a Salta, dice que no se puede hablar de "repatriación en su misma patria".
Comentó, por otra parte, que propondrá al Congreso la reedición de toda la obra de la escritora salteña y que cuenta con el apoyo del gobernador Juan Carlos Romero en la idea de realizar una serie de homenajes a la figura de Gorriti.
En el Panteón de las Glorias del Norte, Juana Manuela será la segunda mujer, pero la primera vinculada con el mundo de la cultura. El resto de los personajes allí inhumados se relaciona con la guerra y la política.
El Panteón se encuentra en un altar de la Catedral Basílica, al oeste de la nave principal. Una urna de mármol que se destaca en el conjunto contiene los restos del general Martín Miguel de Güemes.
El arzobispo de Salta, monseñor Moisés Julio Blanchoud, ya dio la autorización correspondiente.
Historia de una heroína
Juana Manuela Gorriti nació en junio de 1816, en una finca de Orcones, en el sureño departamento de Rosario de la Frontera. Provenía de una familia patricia y acomodada. Sus padres fueron el general y doctor José Ignacio Gorriti, congresal y gobernador por Salta, entre otros méritos, y doña Feliciana Zuviría.
A los 15 años debió huir con los suyos al Alto Perú para escapar de la persecución de los federales. Todos los bienes de su familia fueron confiscados. En tierra altoperuana se enamoró y se casó con Manuel Isidoro Belzú, de cuya unión nacieron dos hijos. Belzú llegó a presidente de la República tras una azarosa campaña.
Cuando accedió al poder su esposo, Juana Manuela lo abandonó. Impulsada por una irresistible vocación literaria, partió hacia Lima, donde luego se harían famosas sus Veladas Literarias, volcadas años después en un libro.
En 1845, la prensa limeña comenzó a publicar sus trabajos y la primera novela, "La quena". Siguieron luego "El guante negro", "La hija del mazorquero", "Un drama en el Adriático", "El lecho nupcial", "La duquesa de Alba", "Sueños y realidades", "Vida militar y política del general don Dionisio Puch", "Panorama de la vida", "Peregrinación a la tierra natal" y "Lo íntimo", entre otros muchos títulos a los que se deben sumar trabajos sobre la historia de los próceres, como el que realizó sobre Martín Miguel de Güemes.
En el siglo pasado, los cuentos y novelas de Juana Manuela se reprodujeron también en Chile, Colombia, Ecuador, la Argentina, España y Francia.
Gorriti volvió luego a La Paz, donde protagonizó una epopeya tras el asesinato de su esposo. En 1866 se sumó a las damas que lucharon en el puerto de El Callao contra el sitio español, lo que la hizo acreedora a una condecoración.
Más tarde retornó a su patria y obtuvo una pensión gubernamental, según datos de "Efemérides nacionales y de la provincia de Salta", de los profesores María Teresa Cadena de Hessling, Braulio Sandoval y Omar Quiroga. Falleció el 6 de noviembre de 1892, a los 76 años.
Otros recuerdos
En esta ciudad, la profesora de Letras Alicia Martorel recopiló toda la obra de la novelista y heroína salteña y está concluyendo la publicación de las "Obras completas de Juana Manuela Gorriti", de seis tomos, de los que cinco ya están editados y el último se encuentra en preparación.
Además, desde este año, Salta tiene un recordatorio particular de Gorriti con la apertura de "Juanamanuela", un complejo de café, auditorio y librería (están sus obras completas, además de otras sobre la escritora) y auditorio.
En ese ámbito, cuyo salón principal y su fachada datan del siglo XVIII, días pasados se presentó el libro de Analía Efrón sobre Gorriti, como homenaje. Un retrato de la novelista adorna las gruesas paredes de la casona, visitada por protagonistas de la política, las ciencias y las artes.