Llegó a Trelew de la mano del empresario Carlos Spadone
Arribo: su gestión al frente del diario Jornada dejó una secuela de juicios; se lo hace responsable de un desorden financiero.
El semanario El Informador Chubutense vio la luz en el segundo semestre del año último. Ricardo Gangeme, el periodista asesinado ayer en Trelew, lo fundó con una impronta amarillista que sacudió la piel colectiva de la bucólica ciudad de 80.000 habitantes.
Son poco claras las circunstancias en que Gangeme abandonó Jornada de Chubut, el decano de la prensa patagónica, fundado por Luis Feldman, para crear su propio medio.
Los herederos de Feldman vendieron el diario al empresario Carlos Spadone en 1992, por razones económicas. Precisamente, el editor asesinado desembarcó en Trelew de la mano de Spadone, para ejercer como director de Jornada. Su primer objetivo fue remontar una tirada que, según datos recogidos por La Nación , rondaba las mil copias.
Pero a la par que intentaba aumentar la circulación, Gangeme cambió el perfil del medio. Varias fuentes aseguran que el periódico se volvió sensacionalista y comenzó a introducirse en la vida privada de algunas personas, asunto que enardeció a más de uno.
Por tal motivo, Jornada vio caer una lluvia de querellas y otros juicios. Ayer, no fue posible confirmar la cantidad de pleitos en marcha.
"Ese tema fue bastante fuerte", dijo una fuente inobjetable de Jornada, tras admitir que, durante la gestión de Gangeme, el diario "se metió en la vida de varios particulares".
Algunos consultados dicen que Gangeme se fue de Jornada en medio de un serio desorden financiero. Cerca de 200.000 dólares en rojo y dos meses de sueldos atrasados, afirman unas fuentes. Pero Spadone lo niega. Ayer, al hablar con La Nación , defendió a Gangeme: "Fue un excelente periodista, pero un mal empresario. En 30 años de vida profesional siempre tuvo desorden financiero. Mi hermano y yo siempre lo ayudamos, inclusive en aquel negocio desastroso que hizo cuando trajo al mono King Kong".
Spadone defiende, además, el impulso que Gangeme le dio a Jornada. "Hizo subir la venta de mil a 6800 ejemplares". Hoy, el periódico vende unos 6500, según dijo el empresario.
El sueño del medio propio
La energía que puso en Jornada no le alcanzó al editor fallecido para obtener buena circulación con su propio semanario. "Se ocupaba de denuncias por corrupción y otros temas similares. Pero no brindaba información general", dijeron algunos informantes.
Hay versiones no confirmadas que ubican la circulación de El Informador entre 200 y 400 ejemplares. Y agregan que últimamente vendía unos 1200.
Algo ocurrió para que Gangeme se fuera de Jornada. Pese a la negativa de Spadone, hay fuentes que subrayan un entredicho nacido a la sombra del desmanejo financiero del periodista asesinado. Tras una auditoría ordenada por Spadone en el periódico, Gangeme se fue.
Su sucesor, Osvaldo Castro Ruiz, le suministró a Jornada un nuevo perfil. "Fue un director que meditó más la noticia", dijo Spadone. En Jornada afirmaron que, con Castro Ruiz, el diario "dejó de meterse en la vida privada de la gente".
Otros consultados sostienen que la desvinculación contractual dejó a Gangeme en malos términos con Héctor Fernandes, socio de Spadone en un negocio inmobiliario y en dos campos en la Patagonia. Fernandes, sospechoso por el crimen de Gangeme, habría sido el consejero de Spadone para disolver la relación profesional.
Fernandes es proveedor de programación de Canal 3 Producciones, uno de los sistemas de televisión por cable de Trelew y de otras ciudades patagónicas, cuyo dueño es Supercanal Holdings, la megaempresa de la familia Vila, de Mendoza. Además, suministra programación informativa a Atelco, la otra compañía de TV paga de la región.
En el negocio del cable Spadone no es socio de Fernandes, según expresaron ambos a La Nación .
Un par de consultados coincidió en afirmar que, pese al incremento en las ventas, Jornada salió desprestigiado de la gestión de Gangeme: "El inventó una columna que tituló El fantasmita , donde revelaba presuntos hechos de corrupción. Pero también hacía insinuaciones directas a personas. Por ejemplo, el diputado Fulano sale con la secretaria Zutana. Eso fue creando en esta pequeña ciudad un clima terrible".
El competidor de Jornada es Diario El Chubut, perteneciente al senador radical José María Sáez. Es el periódico de mayor penetración. Su circulación se ubica cerca de los 7000 ejemplares y su perfil, en las antípodas de la impronta de Gangeme.
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