Lisa Davies, editora del Sydney Morning Herald de Australia: "Es la primera vez en 189 años que escribimos una nota fuera de la redacción"
Graduada en Periodismo en la Universidad de Queensland, Lisa Davies es la editora ejecutiva del Sydney Morning Herald, uno de los diarios más influyentes de Australia.
Comenzó su carrera en la agencia de noticias nacional Australian Associated Press (AAP) y también trabajó para la Press Association del Reino Unido, en Londres, y el periódico The Daily Telegraph, en Sydney. Lisa se incorporó a Fairfax Media -propietaria del SMH- a principios de 2012. Ocupó numerosos roles en la redacción: redactora, editora adjunta, editora de investigaciones y editora de judiciales. En 2016 fue responsable del "Proyecto Elecciones".
Como redactora, Davies también se especializó en temas de seguridad y, en 2013, viajó a Sudáfrica para cubrir el juicio por asesinato contra el atleta Oscar Pistorius. Además, es autora de un libro sobre la inspiradora recuperación de la víctima del ataque en Sydney, Lauren Huxley.
En una entrevista para la serie "Coronavirus y medios" de LA NACION, Davies cuenta cómo se hace periodismo en tiempos de pandemia en Australia -un país que vive 13 horas adelantado respecto de la Argentina- y de qué manera enfrentaron el desafío de poner en marcha la redacción remota.
- ¿Cómo evalúa la gestión del gobierno de Scott Morrison en la lucha contra la pandemia?
- La pandemia de Covid-19 ha sido el mayor desafío para los gobiernos durante muchas décadas, y el gobierno de Morrison actuó rápidamente para cerrar las fronteras y hacer todo lo posible para evitar que el virus se arraigue aquí. También han brindado una gran cantidad de apoyo financiero a personas y empresas.
- ¿Por qué Australia no se ha visto tan afectada en términos de infecciones y muertes por Covid-19? (27.000 infectados y menos de 1000 muertos)
- Tenemos suerte porque somos una isla y tenemos una frontera natural, pero el gobierno también actuó rápidamente para evitar que los viajeros internacionales nos visitaran. Tampoco tenemos una población enorme para los estándares mundiales, alrededor de 26 millones de personas, lo que no es enorme, dado el tamaño geográfico de nuestro país.
- ¿Qué estrategias implementó la redacción del periódico para prevenir posibles infecciones y cómo trabajan los periodistas que cubren historias en la calle?
- Nos movimos rápidamente para que los reporteros y los equipos de producción trabajaran desde casa; de hecho, el 18 de marzo fue la primera vez en 189 años que produjimos un artículo de forma remota. Hemos continuado trabajando a distancia, pero de manera flexible, con cierta capacidad para ingresar a la oficina, desde entonces. Todos los periodistas y fotógrafos son considerados trabajadores esenciales, por lo que se les emitió una carta de certificación para que pudieran continuar trabajando en el campo, siempre que tuvieran el equipo de protección adecuado para que también pudieran trabajar de manera segura.
- ¿Qué contenidos del Sydney Morning Herald relacionados con la pandemia recibieron más respuesta de la audiencia? ¿Podría citar algunos ejemplos?
- Nuestro blog diario en vivo ha sido el artículo más leído del día. Pero otras historias que han estado regularmente entre las más leídas incluyen explicaciones y piezas de datos.
- ¿Qué cuestiones aceleradas por la pandemia llegaron para quedarse en las organizaciones de prensa?
- Creo que pasará mucho tiempo antes de que veamos a todos trabajando en la sala de redacción todos los días, por lo que creo que la pandemia seguirá afectando nuestros acuerdos laborales todos los días.
- ¿A qué atribuye que el estado de Victoria, donde se encuentra Melbourne, se haya visto más afectado que Nueva Gales del Sur, donde se encuentra Sydney?
- El gobierno de Nueva Gales del Sur (donde se encuentra Sydney) actuó más rápidamente e implementó procedimientos de rastreo de contactos más rigurosos que en otros lugares. También pusimos a la policía a cargo de la cuarentena hotelera, donde otros estados subcontrataron ese sistema a empresas de seguridad privadas.
- ¿Qué producciones periodísticas del mundo le impactaron más por su calidad y acercamiento a las noticias?
- Siempre estamos buscando ejemplos de medios internacionales para aprender de sus experiencias, pero creo que en su mayor parte hemos buscado continuar nuestro camino de cubrir la pandemia para nuestros lectores con el tipo de periodismo de calidad que esperan.
- ¿Cómo ve Australia la situación en América Latina, que hoy es el epicentro de la pandemia?
- Es muy preocupante, especialmente la situación en Brasil.
- ¿Cómo espera que la crisis sanitaria afecte a una de las industrias clave de Australia: el turismo? ¿Tiene planes para solucionar este problema?
- El sector del turismo se ha visto gravemente afectado, pero estamos haciendo todo lo posible para promover los viajes locales por nuestra ciudad y nuestro país, y esperamos que la gente pronto pueda comenzar a viajar entre estados. Muchas fronteras estatales permanecen cerradas, pero si hay algo positivo en la pandemia, es de esperar que más australianos exploren nuestro propio país.
- ¿Qué resultados produjo la pandemia en términos de tráfico y suscripciones digitales?
- Hemos recibido un gran aumento de lectores: unos 11 millones de lectores en marzo y 9 millones de lectores en junio (las últimas cifras disponibles). También hemos tenido miles de suscriptores nuevos, con personas interesadas en asegurarse de recibir las mejores noticias, opiniones, análisis y características posibles durante esta pandemia.
- ¿Cómo vive la situación a nivel personal, familiar y profesional?
- ¡A nivel personal, los últimos seis meses me han resultado agotadores! Hacer funcionar una redacción remota por esta noticia de impacto global ha sido un gran desafío. Tampoco hemos podido visitar las redacciones de Canberra o Melbourne, lo que normalmente ocurre con regularidad. También me han separado de mi familia extendida, que está en Queensland (la frontera está cerrada), por lo que ha sido difícil. Normalmente viajo al extranjero un par de veces al año, por lo que ha sido una lástima haber perdido las vacaciones y los viajes de trabajo que había planeado a París y Los Ángeles. Pero estoy sana, al igual que toda mi familia y amigos, por eso cuento mis bendiciones.
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