Liberan al hombre que golpeó y dejó ciega a su expareja en La Plata
El Tribunal de Casación Penal bonaerense ordenó anoche la liberación de un hombre que en 2011 dejó ciega a golpes a su pareja en La Plata, a pesar de que la condena a ocho años de prisión preveía que realizara un tratamiento contra la violencia de género que nunca cumplió.
El fallo de la sala quinta de Casación Penal provincial, al que accedió la agencia Télam, establece que "se ha decretado la inmediata libertad de Carlos Ariel Goncharuk" y así lo notifica a la Unidad 34 de Melchor Romero, donde se aloja el hombre.
El caso
En 2011 Goncharuk fue condenado a ocho años de prisión por los golpes que dejaron ciega a su exesposa, Susana Gómez, quien antes de ese hecho había denunciado al hombre 13 veces por violencia.
El fallo condenatorio preveía que Goncharuk debía realizar un tratamiento para violencia de género, pero nunca cumplió con ese curso, por lo que semanas atrás el juez de Ejecución Penal platense, José Villafañe, dictó que no sea liberado hasta que cumpla con ese requisito.
El juez de Familia interviniente, Hugo Rondina, resolvió días atrás, ante la eventualidad de que el hombre fuera liberado otorgar "un perímetro en 100 kilómetros de distancia" a la mujer y sus hijos. "El radio que resulta ser más amplio que los 700 metros lineales que se establecen como mínimo para la aplicación de Tobilleras Duales", indicó.
También dispuso se coloque una tobillera electrónica a Goncharuk y se entregue un dispositivo rastreador a la víctima, a quien deberá brindarse custodia.
El fundador del refugio para mujeres víctimas de violencia Casa María Pueblo, Darío Witt, dijo a Télam que "es terrible que nuevamente la justicia pone en riesgo la vida de Susana Gómez, porque al disponer la libertad desoye que el tratamiento de violencia de género era obligatorio y ratifica que a la justicia no le interesa proteger a las víctimas".
"Susana está aterrada, quiere volver al refugio, no puede creer esta resolución judicial que ordena que Goncharuk sea liberado en las próximas horas", sostuvo Witt, quien además comentó que "el propio juez Rondina fue anoche al penal para hacer cumplir lo ordenado".
Conflictos en el pabellón
Goncharuk "generaba conflicto en el pabellón y debían trasladarlo, se negaba a concurrir ya por estar enojado o por cualquier otro motivo", aseveró Villafañe, quien citando a la fiscal relató en su fallo que "cada vez que se intentó incorporarlo a algún tratamiento de rigor, el abordaje se vio truncado por cuestiones estrictamente achacables a él".
El agresor presenta una "postura reivindicativa y agresiva, hostil, beligerante de amenazas, buscando provocar intimidación y conmover a quien lo evalúa", indicaron los peritos que lo asistieron en el penal y subrayaron que "las amenazas podrían repetirse recurrentemente según las circunstancias que se le presenten como desfavorables según su concepción".