La iniciativa popular superó el millón de firmas en todo el país
Está representado más del doble de los distritos exigidos por ley
Hace exactamente dos meses, un grupo de organizaciones no gubernamentales junto con LA NACION lanzaron una campaña tendiente a conseguir 400.000 firmas que representaran el 1,5 por ciento de por lo menos diez distritos para presentar en el Congreso una iniciativa popular que obligue a los legisladores a tratar un proyecto que garantice la alimentación de 2.300.000 chicos y embarazadas en condiciones de extrema pobreza.
Hoy, con 1.016.740 adhesiones en 14 distritos, el objetivo está más que logrado y, curiosamente, se alcanzó esas cifras el día en que en el Congreso se realizó una jornada (sobre la que se informa por separado) tendiente a compatibilizar un proyecto único sobre el tema. Ese proyecto incluye las numerosas presentaciones realizadas por los diputados y las de la campaña El hambre más urgente, motor de la iniciativa popular redactada por Horacio Rodríguez Larreta (h.) y avalada por Poder Ciudadano, la Red Solidaria, LA NACION y por el periodista Luis Majul.
"Ya sobrepasamos el millón, pero vamos a seguir recibiendo firmas porque cuantas más presentemos, más fuerza tendrá el proyecto a la hora de ser debatido en el Congreso", aseguró Carlos March, director ejecutivo de Poder Ciudadano.
"La iniciativa no es patrimonio de alguien en particular, es de todos. Le pertenece a cada persona que se comprometió con el proyecto y que se movilizó en todo el país para que esto fuera posible", acotó María Batch, coordinadora de Poder Ciudadano y alma mater del engorroso trabajo de recibir las planillas, auscultarlas, validarlas y presentarla ante la Justicia Electoral.
Poder Ciudadano y el grupo Sophia capacitaron a 250 voluntarios, en su mayoría, autoconvocados. Unas 120 personas recolectaron firmas en la ciudad de Buenos Aires. Muchos colaboraron desde sus quioscos, librerías, locutorios o farmacias. En cada puesto de diarios, los canillitas fueron un nexo importantísimo entre los adherentes y los organizadores, a quienes hicieron llegar cientos de planillas. Y la Justicia Electoral actuó con una celeridad encomiable, a la que aportaron todos los juzgados del país. A todos ellos, mil gracias y a seguir firmando, que el hambre necesita una solución.