La costa se entusiasma: intenso movimiento de recambio turístico en el inicio de la segunda quincena
Crecen las expectativas en Mar del Plata y Pinamar
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LA NACIONDarío Palavecino
MAR DEL PLATA.– Iban y venían, siempre con valijas. Se veían en la zona de Playa Grande, en caminata por la calle en busca de un taxi libre. Apilándolas en los autos, indicador de últimos minutos por esta ciudad. Ni hablar por la estación ferroautomotora, donde estaban quienes las cargaban porque se iban y los que, más sonrientes, las retiraban de los ómnibus porque por fin llegaban aquí, con casi 30 grados de temperatura y a metros de las playas elegidas para sus vacaciones.
Este fin de semana y el cambio de quincena jugaron a favor de este notorio recambio turístico que se vivió aquí y en los todos los destinos de veraneo de la costa atlántica, que vienen de un arranque de año muy bueno y empiezan a respirar el comienzo de un final de mes con perspectivas de resultados aún superiores.
El lobby de un hotel en cercanías de la vieja terminal estaba hoy, a media mañana y superado el horario de desayuno, desbordado de huéspedes en los sillones y equipaje en abundancia, a la espera del okay para subir al ómnibus que los esperaba en la puerta. “Nos volvemos a Castelar tristes por el regreso obligado, pero contentos porque vivimos días espectaculares”, contó Brian Almada, que se preparaba para partir con su esposa, Gisella, y sus hijos Ástor y Micaela. “Volvemos para carnaval”, prometió.
Ese cruce de viajeros que era bien evidente en los andenes de las estaciones de trenes y ómnibus también se vivió en las rutas 2 y 11, donde el tránsito era muy intenso, aunque todavía por debajo del ritmo que había tenido ayer. Siempre con más arribos que salidas, lo que aporta la hipótesis de una segunda quincena que superará todo lo muy positivo que dejaron las dos primeras semanas del año.
Según Autopistas de Buenos Aires (Aubasa), en sentido a Mar del Plata, hasta el mediodía y en el lapso de 12 horas, habían pasado por el peaje de Samborombón 17.181 automóviles, casi el doble de los que cruzaron por allí rumbo a la Capital. Por la ruta 11 el movimiento era más parejo: 9940 contra 7562 vehículos.
Esa dinámica reflejó un 10% menos de la que se vio ayer en esas mismas vías de comunicación en similar horario, pero aun así se generaron algunas demoras por congestionamientos. En particular en la primera mitad del recorrido, previo al desvío para llegar a la costa por la ruta 63 y luego la interbalnearia.
La repercusión directa de esas cifras se percibía en inmobiliarias y hoteles, que estaban a puro check out y check in, en despedida de los que estuvieron y a pura bienvenida con los que empezaban a arribar, siempre en busca de descanso y diversión.
Desde la conducción local de la Unión de Trabajadores Hoteleros, Gastronómicos y Afines (Uthgra) anticipan un arranque de segunda quincena con ocupación cercana al 90% de las plazas disponibles y buenas posibilidades de arrimar a la ocupación plena, en particular durante los próximos fines de semana.
Estos últimos 15 días del mes son los que, además de la propuesta original que se extiende durante gran parte de la temporada, suman atracciones puntuales. Por ejemplo, es el período con más recitales y presentaciones de DJ, lo que siempre acerca un público muy específico y en relación a la fecha de presentación de su artista o espectáculo favorito.
En Pinamar
El comienzo de la segunda quincena de enero se hizo sentir este fin de semana también en Pinamar. Durante la mañana y en horas del mediodía de hoy, largas filas de autos esperaron con paciencia su turno para entrar a la ciudad balnearia y la terminal de ómnibus se convirtió en un verdadero hormiguero. El movimiento frenético de personas, remises y vehículos particulares marcó la inauguración de las últimas dos semanas de enero, en las que el distrito anticipa una ocupación prácticamente total.
Como suele suceder, el mayor desplazamiento se registró ayer, con importantes demoras en el ingreso a Pinamar y en la Avenida Bunge, su arteria principal. “El micro ya salió demorado y tardó todavía más en llegar”, se quejaba una señora en la terminal. Mientras tanto, una familia se apresuraba a subir al auto que los pasaba a buscar. Detrás, una cola de al menos cinco vehículos que no tardaban en apurar a los recién llegados a fuerza de bocinazos.
Hoy, en el segundo día de recambio, en comparación, el tránsito fue mucho más fluido en los distintos puntos que ayer. Esto se vio reflejado en las cifras publicadas por Aubasa, anteriormente mencionadas.
Las autoridades municipales esperan que el excepcional movimiento turístico registrado en todo Pinamar durante de la primera quincena se repita durante la segunda, cuyas reservas en materia extrahotelera ya superan el 97%.
Con la colaboración de Tomás Bove (enviado especial a Pinamar)
Por Darío Palavecino
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