La cocaína que llegaba a Europa desde el conurbano
En 2004 descubrieron el mayor laboratorio
Seis años atrás, a fines de noviembre de 2004, un operativo de la Policía Federal confirmó lo que muchos no querían decir en voz alta: que la Argentina había dejado de ser un país de tránsito para convertirse en un nuevo productor de estupefacientes.
Detectives del Departamento Tráfico Ilícito, al mando del por entonces comisario inspector Francisco Coppola, descubrieron en el oeste del conurbano bonaerense el mayor laboratorio de cocaína instalado en el país, capaz de refinar y producir más de 300 kilogramos de esa droga por mes.
El laboratorio, según la investigación de la Policía Federal y del juez federal de Morón Jorge Rodríguez, estuvo a cargo de un experto en la materia: el ciudadano colombiano Alejandro Carvajal Montes de Oca, conocido por su alias de “Ingeniero”
Carvajal Montes de Oca está prófugo desde esa fecha. Es uno de los delincuentes más buscados por Interpol. Se sospecha que ya había instalado laboratorios en Bolivia y Colombia.
Ese mismo año, según estadísticas publicadas por el Observatorio Argentino de Drogas, organismo dependiente de la Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (Sedronar), se descubrieron otras 19 “cocinas”.
Dos años después, siempre según estadísticas oficiales, se desmantelaron dos cocinas de cocaína. El misterio persiste: los narcotraficantes se fueron a producir droga a otro país o las fuerzas de seguridad no pudieron descubrir los laboratorios instalados.
En julio de 2008, la Delegación Departamental de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de Zárate-Campana hizo otro descubrimiento inédito en el país: el primer laboratorio de droga sintética instalado en la Argentina. Fue el puntapié inicial de lo que se conoció como “ruta de la efedrina” y la llegada de narcotraficantes mexicanos para producir estupefacientes.
En abril pasado, detectives al mando del comisario inspector Marcelo Di Pasqua descubrieron en Olivos otra cocina de droga sintética.