La calle Florida brilla como hace décadas

Daniela y Carolina, dos turistas ecuatorianas, miran maravilladas cómo una pareja se mueve al ritmo del 2x4 en plena calle Florida. "Este paseo es fascinante", dice Daniela, de 18 años, mientras agarra con fuerza cinco bolsas repletas de regalos.

Al igual que las jóvenes ecuatorianas, muchos habitués y comerciantes de la tradicional calle porteña piensan que, de a poco, Florida recupera su esplendor de otras épocas.

Algunas cifras avalan esa percepción. La tasa de ocupación comercial de esa arteria peatonal es del 96,7 por ciento, una de las más altas de la ciudad de Buenos Aires, según un relevamiento realizado en julio por el Centro de Estudios para el Desarrollo Económico Metropolitano (Cedem), dependiente de la Secretaría de Producción, Turismo y Desarrollo Sustentable.

La zona centro, en la que está incluida Florida, marcó su récord desde que se hace la medición, en marzo de 2002, con el 95,4% de ocupación. Sólo es superada por al región norte que trepa al 97,2 por ciento.

"En Florida hubo bajas notables hace un año y medio, porque muchos comerciantes se fueron a raíz de la suba del precio de los alquileres", explica a LA NACION el director del Cedem, Pablo Perelman. La consecuencia de este cambio en el mercado inmobiliario fue crear un nuevo target.

"Vinieron aquellos capaces de afrontar los costos y abrieron negocios que apuntan a un público de mayores ingresos", describe Perelman. Los rubros que más crecieron fueron los de indumentaria, principalmente ropa de cuero, según advierte el funcionario.

El alquiler de un local allí ronda los 310 pesos mensuales por metro cuadrado, un 25% más que el año pasado, según estimaciones del Cedem.

Actualmente, Florida alberga 239 locales comerciales; sólo ocho están vacíos. Pero las vacantes serán menos. La cadena chilena Falabella inaugurará dos tiendas sobre la peatonal (separadas por poco más de 100 metros) y el hipermercado Rodó abrirá una sucursal en Florida y Sarmiento a mediados de octubre.

Compras y shows

Mientras se escucha de fondo "La cumparsita", en su versión electrónica, cientos de transeúntes caminan por la peatonal. "Las ventas dependen mucho del turismo", sostiene Eddie Brunacci, encargado de Jazz, un local de música. "Lo que más salen son las colecciones de tango. Es un clásico que todos los extranjeros llevan", cuenta.

Una decena de turistas hace caso al "Don´t touch" de los carteles y examina sólo con la mirada cada unos de los objetos típicos argentinos que se exhiben en El Boyero, en Galerías Pacífico. "Lo que más les llama la atención son las camperas de carpincho, que cuestan 900 pesos y no se consiguen en otro país", relata Laura, una de las vendedoras.

Oficinistas que trabajan en el corazón de la ciudad se entremezclan con visitantes nacionales y extranjeros, que caminan a paso lento, curiosean todos los negocios y dejan unas monedas a los artistas que allí se ganan la vida.

Unas 800.000 personas trajinan a diario por esa arteria, 100.000 más que en 2001, según la Asociación de Amigos de la Calle Florida. "Esta peatonal está volviendo a ser la de antes. La gente viene a pasear", dice con nostalgia Héctor López Moreno, presidente de esa agrupación.

6000 locales

• Según el informe del Centro de Estudios para el Desarrollo Económico Metropolitano (Cedem), la tasa general de ocupación comercial en la ciudad de Buenos Aires es de 94,5 por ciento. Se relevaron 6252 locales en 31 ejes comerciales, de los cuales 345 estaban vacíos. El 25,2% corresponde a "prendas de vestir", el 8%, a "muebles y artículos para el hogar"; el 7,3%, a "calzado, cuero y afines", y el 6,7%, a "restaurantes, bares, cafés".

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