La autora del "Payaso Plin Plin" sale a la luz y cuenta cómo surgió la mítica canción infantil
Diana Edit Mónaco conversó con LA NACION acerca de cómo surgió el tema, que tradicionalmente estuvo asociado Francis Ruggieri, muerto recientemente; el primer paso fue una carta de lectores en este diario
Una joven de 18 años entra a la clase de Didáctica de la Música del magisterio donde estudia para ser maestra. Ese día el profesor les pide que escriban una canción para niños menores de tres años, compuesta de versos simples, y que elijan para ponerle una música que ellos conozcan muy bien. Diana elige el “Feliz cumpleaños”.
Así comienza la historia de la verdadera autora de la canción del Payaso Plin Plin, Diana Edit Mónaco, quien luego de la muerte de Francis Ruggieri -que se hizo conocido como el payaso Plin Plin-, escribió una carta de lectores a LA NACION para aclarar el malentendido.
La canción nació en 1974 gracias a esa clase del Instituto Superior de Formación Docente de Tres de Febrero, de El Palomar, y a “la inspiración de un momento de juventud”, según dijo ella misma. En ese entonces Diana ya trabajaba en el Jardín de Infantes "Los Pinitos" de Ciudad Jardín, como maestra de sala maternal.
En la clase siguiente, le mostró la canción a una compañera, a quien le causó mucha gracia. Ambas comenzaron a reír. El profesor les llamó la atención y ese es el primer recuerdo que Diana guarda de la canción.
Luego, fue pasando de mano en mano; Diana y sus compañeras la siguieron cantando una vez que se recibieron de maestras, y vivieron con naturalidad, aunque con algo de sorpresa, el hecho de que a lo largo de los años “El payaso Plin Plin” se convirtiera en uno de los temas más populares del repertorio infantil. Especialmente cuando algunas de ellas, al viajar por el país, comenzaron a escuchar la canción en otras provincias.
“Si hubo alguien sorprendida con todo esto, fui yo”, le contó Diana a LA NACION en una entrevista exclusiva. Ella la describe como “una hermosa casualidad”.
Nunca conoció personalmente a Ruggieri, aunque alguna vez escuchó que en una entrevista se decía el autor de la canción. “No le di la más mínima importancia. Siempre digo que lo importante es la canción”, cuenta Diana, quien asegura sentirse honrada de que el actor haya elegido su canción para crear un personaje y difundirla.
Un periplo de 10 años
La idea de registrarla fue fruto de una casualidad. Cuando estudiaba psicología social conoció a Dolores, la madre de Andrés Ciro Martínez, quien luego se convertiría en el líder de la banda Los Piojos, y actualmente de Ciro y los Persas. La familia Martínez insistió en la importancia de que Diana registrara su canción en la Sociedad Argentina de Autores y Compositores de Música (Sadaic).
“En ese momento ya habían pasado 30 años. Yo no había guardado el manuscrito original, porque nunca me imaginé que tendría semejante difusión. Y lo que más me sorprendió fue que en todos esos años nadie hubiera registrado la canción como propia”, cuenta.
Pero registrarla fue un "periplo" de 10 años. El problema era la música: el Feliz Cumpleaños tenía dueño y era Warner Music. La compañía discográfica tenía los derechos y Sadaic no podía registrar una canción con la misma música.
Un estudio de abogados asesoró a Diana. Intentaron interceder con Warner durante años sin éxito hasta que en un momento vieron que los derechos sobre el feliz cumpleaños caerían y decidieron esperar. Desde Sadaic, donde también venían siguiendo su caso, la llamaron a principios de este año para decirle que eso había sucedido. Entonces pudo registrarla.
Aunque a partir del registro puede cobrar los derechos de autora, ella dice que “no es por eso que lo hizo, sino por hacer honor a la verdad”. Además, dice que la canción ya no está en auge. Se refiere con esto a las grabaciones, porque sabe que, en cambio, en la mayoría de las casas, cada vez que algún pequeño estornuda, se vuelve a cantar su canción.
¿Quién es Plin Plin?
“La historia de la letra tiene que ver con mi infancia. Me gustaban mucho los payasos”, dice. Esa fue la razón por la que lo eligió como personaje. Y luego pensó en qué era lo más destacado de un payaso y así surgió la nariz.
El nombre también tiene su historia. Cuando era pequeña, “tenía una nariz muy chiquita y respingada” y su papá la llamaba “pin pin” o “plin plin”, cuenta Diana.
Así surgió. Del otro lado del teléfono Diana canta su canción, que es de todos: “El payaso Plin Plin, se pinchó la nariz y con un estornudo hizo fuerte ¡achís!” Y su voz suena como una mamá tierna que le canta a sus niños.
Hoy tiene 60 años y está por jubilarse como docente. Luego de aquella creación, Diana se casó, tuvo dos hijos. Después del magisterio estudió psicología social, psicopedagogía y se graduó de Licenciada en Educación. Si bien compuso otras canciones para niños, las hizo para utilizar en su trabajo, y sobre todo se dedicó a la docencia, el trabajo terapéutico y a escribir académicamente. Dirige una consultora educativa, llamada “Espacioniño” y próximamente publicará un libro sobre "cómo inciden los nuevos juegos tecnológicos en el desarrollo de los niños pequeños”.
Ella dice que siguió su vida “por otros caminos” pero su camino parece haber estado vinculado a aquel impulso inicial que le dio origen a la canción: trabajar con los demás y ayudarlos a crecer y desarrollarse.