Investigan si la cubierta ya tenía una reparación
Patricia Bullrich no descartó un desperfecto en el ómnibus
SANTIAGO DEL ESTERO.- "Queremos que se investigue, queremos la verdad, que se hagan los peritajes y se sepa si esto pudo ser evitable", le dijo entre lágrimas la madre de uno de los 42 gendarmes muertos a la vicepresidenta Gabriela Michetti. Ayer, la mandataria recorrió uno de los salones del centro de convenciones Forum de esta ciudad, que había sido reconvertido en una gigantesca sala velatoria.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció ayer que en las próximas horas se conocerá el informe oficial del accidente y reconoció que hay que "analizar todo el estado" de los medios de transporte de las fuerzas federales porque no descartó "una fatiga de algún material" del vehículo.
En medio de un fuerte hermetismo, fuentes de la Fiscalía Penal de Rosario de la Frontera -localidad a 20 kilómetros de donde se produjo el accidente-, que está a cargo de Oscar López Ibarra, indicaron que la causa sería "un reventón de un neumático que se dio justo en un lugar de la ruta desafortunado".
López Ibarra, en declaraciones a LA NACION, dio un dato que puede ser crucial: "Los peritos estudiarán las razones por las que reventó la cubierta derecha del ómnibus, más aún ante la versión de que podría tratarse de un neumático reparado, o «recapado», como se dice comúnmente".
Se esperan los resultados de los peritajes para establecer cuál será la carátula que tendrá el expediente judicial.
El lunes pasado, el vocero de Vialidad Nacional, Ernesto Arriaga consideró: "A 80 metros del puente [del río Balboa] se le reventó el neumático al ómnibus cuando circulaba a 85 kilómetros por hora aproximadamente. La velocidad era normal, la unidad se inclinó hacia la derecha y así embistió el guard-rail, que terminó arrancado. La velocidad bajó a 45 kilómetros por hora y cuando estaba a 10 metros de salir del puente, que tiene una extensión de 50, redujo la velocidad al mínimo. El vehículo se inclinó hacia la derecha, dio una vuelta de campana, cayó al vacío unos ocho metros y sobrevino la tragedia". Y agregó: "Si el reventón ocurría unos metros antes o después, quizá no hubiera pasado nada y sólo hubiera sido un gran susto. Fue todo fruto de la fatalidad, porque la ruta en esa zona está en buenas condiciones".