Hallan el esqueleto del primate más antiguo
Un equipo de científicos chinos descubrió el fósil del mamífero que vivió hace unos 55 millones de años; pesaba unos 30 gramos
LONDRES, 5 jun (EFE).- Un equipo de científicos chinos descubrió el fósil del esqueleto del primate más antiguo conocido, cuyo hallazgo ayudará a reconstruir las primeras etapas de la evolución de estos mamíferos, informó la revista especializada Nature.
El esqueleto pertenece al mamífero que vivió en el período más temprano del Eoceno de China, hace 55 millones de años, y actualmente es el fósil con más años de antigüedad recuperado del suborden de los haplorrinos, el amplio orden de primates en el que se incluyen los humanos, los simios y los monos.
El cuerpo de la criatura no excede los 71 milímetros de largo ni los 30 gramos de peso, y sería un mamífero tan pequeño como el actual lemur ratón pigmeo.
Esta investigación estuvo a cargo del científico Xijun Ni, de la Academia China de Ciencias, que tras diez años de estudios aporta importantes avances para la paleobiología (disciplina que estudia los organismos del pasado) y la evolución del ser humano.
El primate fue descubierto hace una década en el lecho de un antiguo lago de la provincia china de Hubei, y recibió el nombre de "Archicebus achilles", cuya traducción aproximada sería la de "antiguo mono" y haría también una referencia a su característico hueso del talón.
Según los investigadores, la criatura podría ser el pariente más primitivo conocido de los tarsius, el único género sin extinguir de los primates tarsiformes, del suborden de los haplorrinos.
Una destacada aportación del hallazgo es la evidencia de que el periodo de tiempo que separa al linaje de los tarsiformes del de los simios (de los que proceden los humanos) es anterior a lo que siempre se había pensado.
"Nuestro descubrimiento ofrece la imagen más completa de los primeros primates. En el estudio de la evolución, supone un punto de inflexión muy importante dentro de la rama que conduce a los seres humanos actuales", explicó Xijun.
El fósil estaba encerrado en una roca partida en dos y se necesitaron años de trabajo minucioso y el empleo de escáneres 3D para lograr una imagen completa y detallada del espécimen.
Pequeño como un lemur
Se trata de un primate tan extraño como minúsculo, más pequeño que el lémur ratón de Berthe (Microcebus berthae), un lémur pigmeo de Madagascar que, con sus 9 centímetros, es el primate viviente más pequeño del mundo.
Su esqueleto muestra que estaba particularmente bien adaptado a vivir en los árboles. Con sus largas extremidades y cola y sus dedos delgados "debe haber sido un excelente saltador arborícola, activo durante el día y alimentándose esencialmente de insectos", estima Xijun Ni.
El ancestro de todos los primates fue bautizado Archicebus achilles. "Archicebus" significa "primer mono con cola larga" y "achilles" es una referencia al mítico guerrero griego Aquiles y a la anatomía particular de su tobillo. Para realizar la investigación, el equipo de Xijun llevó a cabo un detallado análisis del esqueleto mediante el uso de la microtomografía de rayos X con luz sincrotrón, normalmente usado en el estudio de fósiles.
De este examen morfológico destaca especialmente la mezcla de rasgos físicos que el primate encontrado comparte tanto con los tarsiformes como con los simios y que supone una "combinación única e inesperada" para los investigadores.
Entre la combinación de características que presenta, los científicos han destacado la proporción de los huesos de sus pies, con más semejanzas a la de los simios, mientras que tanto su cráneo como su dentadura recuerdan a la taxonomía de los tarsiformes.
Algunos de estos rasgos de su fisiología sugieren ciertos patrones de su comportamiento como una dieta principalmente insectívora por sus afilados premolares, así como su asociación a un "saltador frecuente" gracias a sus largas extremidades inferiores.
Ojos enormes
Por la enorme cavidad ósea de sus ojos los investigadores también han deducido que el "Archicebus achilles" tenía una buena visión para la caza, y que su actividad respondía más a un patrón diurno que nocturno, según la investigación.
Por todo ello, la existencia de este primate potencia también la hipótesis de que los primeros primates eran probablemente diurnos, arbóreos y principalmente insectívoros.
Un descubrimiento que podría ser aplicado a otras áreas de la evolución pues "las próximas investigaciones se beneficiarán de nuestro hallazgo, como por ejemplo los estudios sobre filogenética molecular", explicó Xijun.
Para el equipo de este experto, este es uno de los "mayores proyectos de paleontología" en los que se han visto involucrados, y no dudan en continuar sus estudios sobre "el origen y la evolución temprana de los primates".
Agencias EFE y AFP