El robot Philae envió "señales de vida" desde el cometa y devolvió las esperanzas a los científicos
Tras desprenderse de la nave Rosetta, aterrizó en un acantilado que recibe sólo 1,5 horas de luz solar en lugar de siete; los expertos de la Agencia Espacial Europea intentarán rotar sus paneles para recargar sus baterías
PARIS.- Después de la preocupación por la "vida" del robot Philae, que el martes se posó sobre un cometa luego de viajar con su "madre nodriza", la nave Rosetta durante 10 años por el espacio y recorrer 6500 millones de kilómetros, los científicos de la compleja misión espacial recibieron noticias de su buen funcionamiento.
Los expertos de la Agencia Espacial Europea confirmaron más temprano que si bien el robot Philae logró posarse en la superficie del cometa y funciona bien, el aparato estaría apoyado sobre una "pendiente muy inclinada" y recibía poca luz solar para recargar sus baterías.
"El robot Philae envió una señal que muestra que sigue vivo", anunció esta noche el CNES, la agencia espacial francesa. "La señal se ha restablecido y los datos científicos llegan desde el cometa", según un tuit de la Agencia Espacial Europea (ESA), que temía que el robot se apagara por falta de energía.
"El contacto se ha producido más tarde de lo previsto. Tal vez me haya movido un poco", señaló Philae en su cuenta de Twitter.
Los científicos ordenarán ahora al robot que gire, para que uno de sus mayores paneles solares reciba más luz. Así, sus baterías recargables tendrán más energía, y le darán más tiempo de vida al robot.
"Está previsto que la misión planificada de Philae concluya cuando se agoten las baterías, lo que ocurrirá el sábado", indicó la ESA en su blog.
Mal posicionado
Con el correr de las horas, se develó que el robot, del tamaño de una heladera común, tocó el cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko en tres oportunidades antes de detenerse sobre el mismo. Es decir, que rebotó dos veces, debido a que fallaron los arpones sujetadores que debían activarse en el momento del primer contacto con la superficie del cuerpo helado.
Stephan Ulamec, responsable de la empresa aeroespacial alemana DLR que fabricó el robot, dijo a la prensa en el centro de operaciones de Darmstadt que el primer impacto hizo rebotar a Philae en el espacio para un lento salto de 1 hora y 50 minutos, antes de volver a caer en el cometa a más de un kilómetro de distancia del lugar elegido por los científicos de la ESA.
Tras ese segundo impacto, Philae efectuó un nuevo vuelo de 7 minutos y cayó en el incómodo sitio donde se encuentra actualmente, precisó Ulamec. "Quedamos a la sombra de un acantilado", explicó a la prensa el astrofísico Jean Pierre Bibring.
Agencias AFP y EFE