"Él quería juntar dinero para hacer su casa", dijo la mamá del migrante que murió ahogado en el Río Bravo junto a su hija de 2 años
El hombre y su hija de 2 años están boca abajo, ahogados, en la orilla del Río Bravo,México. La camisa negra del hombre está subida a la altura de su pecho y la niña está metida dentro de la prenda. El brazo de ella está estirado por detrás del cuello de su padre, y todos creen que se aferró a él hasta el último minuto.
La escena, capturada el lunes en una fotografía por la periodista Julia Le Duc y publicada por el periódico mexicano La Jornada, se convirtió en las últimas horas en un símbolo de los desafíos que enfrentan los migrantes, en su mayoría centroamericanos, que escapan de la violencia y pobreza de sus comunidades con la esperanza de llegar a Estados Unidos y solicitar asilo.
"Cuando la niña se le zafó es cuando él trató de alcanzarla, pero cuando él trato de agarrar a la niña fue cuando se metió más adentro para salvarla... fue cuando ya no pudo salir. Entonces él se la metió en su camisa y me imagino que él dijo: `Hasta aquí llegué', y decidió irse con ella", dijo la madre del hombre muerto, Rosa Ramírez, a The Associated Press.
Según el reportaje de Le Duc en La Jornada, Oscar Alberto Martínez Ramírez, frustrado porque su familia originaria de El Salvador no pudo presentarse ante las autoridades estadounidenses y solicitar asilo, nadó a través del río con Valeria, su hija, el domingo.
Martínez puso a la niña en la orilla estadounidense del río y comenzó a regresar por su esposa, Tania Vanessa Ávalos, pero al ver cómo se alejaba su padre, la nena se lanzó al agua. Martínez regresó y alcanzó a tomar a Valeria, pero ambos fueron arrastrados por la corriente.
La búsqueda de Martínez y su hija se suspendió el domingo por falta de luz, y sus cadáveres fueron descubiertos al día siguiente cerca de Matamoros, México, limítrofe con Brownsville, Texas, a varios metros de donde intentaron cruzar y a solo un kilómetro del puente internacional.
Ramírez dijo que su hijo y su familia salieron de El Salvador el 3 de abril y pasaron unos dos meses en un albergue en Tapachula, cerca de la frontera de México con Guatemala.
Yo les rogué que no se fueran, pero él quería juntar dinero para hacer su casa
Un funcionario de Tamaulipas dijo que la familia llegó a Matamoros la mañana del domingo y se dirigió al consulado de Estados Unidos para intentar obtener una fecha para solicitar asilo. La madre tiene 21 años y el padre tenía 25, añadió.
No es claro qué sucedió con la familia en el consulado, pero horas después tomaron la decisión de cruzar. El funcionario de Tamaulipas dijo que padre e hija partieron de un pequeño parque que colinda con el río. Funcionarios de protección civil llegaron al lugar del incidente a las 7 de la noche del domingo y después se llevaron a la esposa al albergue.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de El Salvador dijo que trabajaba para asistir a la familia, incluida Ávalos, quien estaba en un albergue para migrantes en la frontera después de los ahogamientos. Se prevé que los cuerpos sean llevados el jueves por avión a El Salvador.
Repercusiones
"Muy lamentable que esto pase", dijo el martes el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador en respuesta a una pregunta relacionada con la foto. "Siempre lo hemos condenado, de cómo por mayor rechazo en Estados Unidos hay gente que pierde la vida en el desierto o cruzando el Río Bravo".
Hasta el momento no hubo comentario de la Casa Blanca.
Un símbolo
La fotografía evoca la imagen de 2015 de un niño sirio de 3 años que se ahogó en el mar Mediterráneo cerca de Turquía, aunque falta por ver si tendrá el mismo impacto en atraer la atención internacional a la migración a Estados Unidos.
"Me llamó mucho la atención el brazo de la niña sobre su papá", dijo Le Duc al describir la escena que vio cuando llegó al lugar.
"Este caso en particular me pone, nos puso sensibles, por las circunstancias, por el padre abrazado de su hija en ese último aliento los dos ahogados, cómo se fueron juntos a la muerte".
Con información de AP