Eclipse: el anillo de fuego que deslumbró
La Luna se interpuso entre el Sol y la Tierra durante dos horas y media; a lo largo de un minuto, lo tapó casi por completo; se vio en toda su magnitud en la Patagonia, que recibió un aluvión de turistas
CAMARONES.– A las 10.42, el silencio se apoderó ayer del improvisado auditorio que, congregado en la plaza central de este típico poblado patagónico, observaba el fenómeno con lentes especiales y la mirada fija en el cielo. En medio del clima fresco y ventoso, estallaron aplausos y gritos cuando se vio el “anillo de fuego”, el momento más esperado del eclipse.
Esta ciudad fue uno de los escenarios privilegiados para observar el instante en el que la Luna se interpuso entre el Sol y la Tierra. Chubut fascinó a turistas y científicos y esa misma emoción se sintió en otras partes el país, como Mendoza, Mar del Plata, Córdoba y Santa Fe.
En Camarones, los aficionados esperaron desde muy temprano el fenómeno y tuvieron un minuto de premio, tiempo en que pudo verse el “aro de fuego” con el sol “tapado en más de un 90%. Y después sigue el espectáculo al revés: la luna emergiendo del sol”, graficó el doctor Pedro Saizar, quien explicó el proceso al público.
La actividad comenzó temprano en la plaza Nueva León. Este pueblo, junto con Facundo y Sarmiento, fue el de mayor visibilidad del eclipse anular de sol, que se pudo observar en una franja que cruzó la zona sur de Chubut, desde la frontera con Chile hasta el océano Atlántico, y también alcanzó África. El fenómeno celeste comenzó a las 9.24 en fase parcial y siguió hasta las 12.01.
Este pequeño poblado costero, al que cada año vienen a tener sus crías los pingüinos de Magallanes, vivió ayer una fiesta completamente diferente. Con música de fondo y en un clima de entusiasmo, una carpa de la Secretaría de Ciencia y Tecnología provincial preparó cinco telescopios y el “escenario natural” para garantizar la seguridad de los visitantes: se repartieron más de 700 pares de lentes con filtro especial para observar el fenómeno sin riesgos.
Federico Abbondio, del área de Divulgación Científica de la secretaría, dijo: “La respuesta fue impresionante. Está todo colmado y esto muestra el interés. Es algo muy lindo y demuestra que la gente acompaña iniciativas cuando los científicos nos explican los fenómenos. Esto es un evento social”.
En efecto, Camarones vivió ayer un doble fenómeno: el astronómico, que cautivó la mirada de miles de aficionados que siguieron minuto a minuto la ocultación del sol, y el turístico, por el aluvión de viajeros que no quisieron perderse nada.
Claudia Loyola, intendenta local, dijo a LA NACION: “Tuvimos la totalidad de nuestras plazas ocupadas, tanto en hoteles como campings, y debimos habilitar viviendas de familia para alojar a los visitantes. La gente tuvo excelente predisposición y nosotros abrimos nuestras puertas”.
A Camarones se llega por la ruta 3 y luego por un desvío de 80 kilómetros hacia la costa. En este lugar de paisaje bucólico, mar, piedras rojizas y casas despojadas, se siguió con entusiasmo el eclipse anular de sol. Familias completas compartían los lentes donados por la agrupación Astrónomos Sin Fronteras y los de la Secretaría de Ciencia; fotógrafos aficionados ponían filtros a sus cámaras e intercambiaban opiniones sobre cómo captar el fenómeno astronómico.
En un eclipse anular, la Luna cruza el disco solar por su centro, pero no llega a ocultarlo por completo. Deja un fino anillo de sol por fuera del disco oscuro de la Luna. “¡Ésta es la foto!”, gritó Carlos, un aficionado que durante una hora ajustó los lentes de su cámara para lograr la imagen. Carlos sabe que si quiere otra imagen parecida deberá esperar en Chubut al menos hasta febrero de 2027.
A pocos metros de los fotógrafos estaban sentados dos profesores de una secundaria de Trelew. “Es una experiencia única. No podíamos dejarla pasar. Salimos a primera hora de Trelew y nos volvemos hoy mismo. Creemos que vale la pena por lo espaciado de los tiempos en los que este fenómeno es tan visible acá en Chubut”, explicó el docente Lucas Sosa, de 31 años. Para evitar riesgos en sus ojos, se trajo una máscara de soldador en lugar de los tradicionales lentes.
Turismo científico
Con el eclipse, Chubut fascinó al país y a gran parte del mundo. Además de miles de visitantes, se congregaron 150 investigadores y científicos nacionales e internacionales.
Según estimó el gobierno de Chubut, más de 1000 personas siguieron el eclipse en Facundo y también en Sarmiento, y más de 1500 lo hicieron desde Camarones, convirtiéndose en público privilegiado de este fenómeno astronómico.
La fiesta vivida en las localidades chubutenses fue reflejada para toda la provincia, el país y el mundo por Canal 7 de Rawson. Transmitió en vivo el fenómeno cuando la luna ocultó en un 97% el sol, y las imágenes se pudieron ver también por la página web www.c7chubut.com.ar.
El canal de la provincia montó dos unidades satelitales, una en Facundo y otra en Camarones, para poder llevar en directo, entre las 10 y las 11.30 de ayer, las imágenes de cuando la luna ocultó parcialmente el sol.
La secretaria de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Chubut, Noelia Corvalán Carro, agradeció “la activa participación de los investigadores que acompañaron la observación y a los municipios de Sarmiento, Facundo y Camarones, que tanto trabajaron para que se viviera como una verdadera fiesta”.
“Todas estas acciones están encuadradas dentro del área de turismo científico que promueve y desarrolla este organismo provincial”, dijo la funcionaria, y destacó también “el enorme trabajo de la Fundación Amigos de la Astronomía de la ciudad de Trelew y de la Fundación Plaza del Cielo de Esquel.
El subsecretario de Ciencia, Sebastián Polacco, resaltó: “Estos acontecimientos ayudan a las economías locales y desde la secretaría buscamos impulsar actividades nuevas y potenciar las tradicionales desde la perspectiva de la innovación productiva”.
Cómo se vivió el espectáculo astral en otros puntos del país
Los observatorios fueron protagonistas de la jornada
Córdoba
- Las nubes se abrieron en dos ocasiones y permitieron observar el eclipse.
- El fenómeno impulsó a muchos a visitar el Observatorio Astronómico de la Universidad Nacional y a buscar buena posición en parques, plazas y terrazas.
- El Observatorio dispuso seis telescopios y centenares de anteojos de láminas especiales que se repartieron entre los más chicos.
Santa Fe
- El punto de encuentro fue el Centro Observadores del Espacio (Code), en la avenida Costanera, que dispuso tres telescopios para atender la demanda.
- A partir de las 9.30, centenares de vecinos se apersonaron al lugar, a pesar de los 42°,7° de sensación térmica. Familias enteras se levantaron temprano y llegaron con gran entusiasmo al lugar, como Máximo Moyano y su mamá, Adriana.
Mendoza
- La mayoría de los mendocinos se sumó al inusual evento astronómico desde sus casas, ataviados con anteojos de sol, radiografías o simplemente una hoja de papel.
- Algunos se acercaron hasta la Plaza Independencia, en pleno microcentro, para disfrutar del eclipse con equipos especiales que dispuso la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza. También recibieron información sobre los alcances del eclipse solar.
Mar del Plata
- Con una jornada calurosa, gris y pesada, poco se observaba aquello tan excepcional que ocurría detrás de enormes nubarrones. Pero aun así se hizo el intento, con radiografías y telescopios.
- La mañana de inquietud astronómica coincidió con una bajamar también excepcional. Las playas quedaron tan anchas como pocas veces. Circulaban hipótesis sobre la directa relación entre lo que pasaba en tierra y el eclipse.