Los humedales son lugares mágicos donde el agua y la tierra se mezclan, y crean paisajes llenos de charcos, lagunas y pantanos. Estos ecosistemas, aunque varían de un lugar a otro, tienen algo en común: son espacios mojados llenos de vida. Además de ser el hogar de miles de animales, cumplen funciones superimportantes: ayudan a regular el agua y evitan inundaciones, filtran el agua para mantenerla limpia y capturan carbono, lo que ayuda a frenar el cambio climático.