Descendió el analfabetismo en el mundo
Sin embargo, aún hay 875 millones de personas que no saben leer ni escribir; el 63,7% son mujeres.
La lucha contra el analfabetismo avanzó en las últimas décadas, aunque todavía permanecen 875 millones de personas que no saben leer ni escribir.
Así lo indica un informe difundido ayer por la Unesco en la cumbre mundial sobre educación que se desarrolla en Dakar. El índice es del 14,5% y representa un claro avance respecto de las últimas décadas. Según informó un despacho de la agencia AFP, hace 50 años, la mitad de los países contaban con más del 50% de analfabetos. Hoy sólo registra ese índice el 25% de las naciones.
A pesar de lo auspicioso de estas cifras, el objetivo fijado en 1990 de erradicar el analfabetismo no ha sido alcanzado, y 110 millones de niños siguen sin ser escolarizados, según el informe de la Unesco.
En América del Sur y el Caribe, la tasa de analfabetismo cayó del 42 al 12 por ciento. La directora del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Carol Bellamy, sostuvo que en América latina las cifras se redujeron casi a la mitad en ocho años. De 11,4 millones de niños analfabetos que había en 1990, los índices cayeron a 4,8 millones en 1998.
Aunque más del 95% de los niños latinoamericanos y caribeños van a la escuela primaria, la tasa de deserción es alta. Las excepciones más lamentables son Haití y Bolivia, con un 30% de analfabetismo.
En Africa, el analfabetismo pasó del 84 al 39 por ciento; en Asia, del 63 al 25 por ciento y en el resto del mundo, del 7 al 1 por ciento.
La Unesco señala que sigue habiendo 875 millones de analfabetos en el mundo, de los cuales el 63,7% son mujeres, y que se han registrado progresos notables en materia de escolarización.
Sobre 206 millones de chicos escolarizados en la escuela primaria en 1950, la cifra trepó a 668 millones en 1997. El dato se multiplicó por cuatro en Africa y por tres en Asia.
En el nivel secundario, de 40 millones de escolarizados se pasó a 398 millones. En el nivel superior, la progresión fue de 6,5 millones a 88,2 millones.
En la Argentina
En diálogo con La Nación , el director del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (IPE), de la Unesco, Juan Carlos Tedesco, señaló que frente al problema del analfabetismo puro, "la Argentina ha superado los índices críticos. El cuatro o el cinco por ciento que queda es de edad avanzada y de difícil solución".
Y agregó que el problema de nuestro país es "el analfabetismo funcional. Para modificarlo hacen falta técnicas de lectoescritura y un manejo eficaz".
Sobre el informe de la Unesco dijo que el descenso en los índices ha sido "muy fuerte en algunos países africanos y asiáticos" y que el analfabetismo registra cifras muy duras en México, Brasil y los países con población indígena". Y comentó que "el 50% del analfabetismo de América latina está en Brasil, y los dos tercios del otro 50% son indígenas".
Expresó luego que la problemática es más compleja cuando se habla de alfabetizar a los indígenas porque "eso significa castellanizar. Se trata de enseñar una segunda lengua, aunque últimamente algunos países enseñan a los aborígenes a leer y escribir en su propia lengua".
"Para alfabetizar en estas condiciones hace falta voluntad política, recursos económicos y respuestas técnicas", sostuvo Tedesco.
Según precisó, la caída en los índices de analfabetismo en el nivel mundial responde a varias razones, entre las que mencionó la expansión de la escolaridad, los efectos de las campañas de alfabetización de adultos y la cooperación internacional.
No obstante las alentadoras cifras informadas por la Unesco, Tedesco afirmó que "se debería ir más rápido. Es necesario hacerse cargo de que una sociedad como la actual exige mucho más que ser alfabeto".
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