Dalma a los 24: "Soy la primera Maradona con título universitario"
La marca del discurso de Dalma Nerea Maradona, nacida el 2 de abril de 1987 en Buenos Aires, es proteger a los suyos. La marca de las acciones de la hija mayor de Diego Armando Maradona y Claudia Villafañe es separarse de los suyos. Dalma protege a los Maradona y al mismo tiempo se defiende de los mandatos familiares. Y asegura que ya aprendió a distanciarse cuando hablan de su padre o de ella en los medios: "Me creo con la capacidad de saber de dónde viene lo que se dice. Obviamente sí me molesta cuando dicen cosas que no son reales. Me pasó con un montón de notas, donde aparecieron cosas que yo no había dicho".
Dalma siempre quiso actuar. Se recibió de actriz nacional en el IUNA, pero mucho antes cumplió su sueño: en televisión debutó a los 8 años en el programa Cebollitas. Después participó en el unitario Hospital Público, en la obra de teatro infantil Caperucita y el lobo y, en 2008, en el film La rabia, de Albertina Carri. "Yo habría sido actriz igual si no hubiera sido la hija de Maradona –explica-. Porque si van a hablar de mí, prefiero que en lugar de hablar de mi novio y de con quién salgo, de dónde vengo a adónde voy, hablen de mi laburo". Sobre sus estudios, es enfática: "Soy la primera Maradona con un título universitario. Además, soy la primera que terminó el secundario. Para mí es importantísimo estudiar, formarse."
Dalma vivió en Nápoles y un poco en Sevilla, destinos que su papá futbolista tuvo en su carrera. A los 6 años, cuando la familia estaba en España, esta nenita decidió dejar a sus padres y volver a Buenos Aires con su abuela Pochi (la mamá de su mamá) para seguir en el colegio con sus amigos del jardín de infantes."En Sevilla, cursando primer grado la pasaba muy mal: nadie me hablaba, porque yo no era española. Mi abuela Pochi estaba allá, pero se volvía. Entonces, yo tomé la decisión de volverme con ella".
No oculta la admiración que siente por su padre: "Cree en algo y lo defiende aunque eso lo deje afuera del trabajo que más ama hacer. Eso habla de una persona enorme. Y salta por sobre todos los demás, que después dicen: "sobre Maradona prefiero no hablar". Lo admiro como jugador de fútbol porque es algo que no podés negar: te guste o no te guste fue el mejor del mundo. Pero después es mi papá, no es el Maradona famoso".