Cuarta dosis: con excepciones, la mayoría de las provincias empezará a aplicar el refuerzo a dos grupos específicos en dos semanas

Salvo algunas excepciones, la mayoría de las provincias empezarán entre marzo y abril a vacunar con el refuerzo para Covid-19 a la población inmunocomprometida por enfermedades previas o tratamientos que bajan las defensas y los mayores de 50 años que recibieron el esquema inicial de Sinopharm. Será dentro de dos semanas, cuando empiezan a cumplirse los 120 días desde la aplicación de la tercera dosis con la que hubo que complementar las dos primeras para mejorar el nivel de protección.

“Todavía seguimos avanzando en refuerzos, terceras dosis e iniciar y completar esquemas. Cuando se inicie [la aplicación del] refuerzo de los que recibieron [una dosis] adicional, lo comunicaremos en consenso con el resto de los ministros de salud de las provincias”, indicaron esta semana desde el Ministerio de Salud de la Nación ante la consulta.

Hay, por el momento, algo más de tres millones de personas que recibieron una dosis adicional como parte del esquema inicial de dos dosis. “En el contexto de la campaña de vacunación contra SARS-CoV-2, el 27 de octubre de 2021 se definió la vacunación con una dosis adicional contra Covid-19 en inmunocomprometidos vacunados con cualquier plataforma y personas de 50 años o mayores que hayan recibido esquema primario con vacuna inactivada [Sinopharm]”, define la guía técnica nacional de noviembre del año pasado sobre esa dosis extra que hubo que sumar al esquema inicial para reforzar la respuesta frente a un posible contagio.

Una vez completado el esquema de tres dosis en esos dos grupos, se avanzaría con el refuerzo como en el resto de la población. Con la reducción de seis a cuatro meses en intervalo mínimo desde la última dosis del esquema inicial que acordó el Consejo Federal de Salud (Cofesa) en diciembre, el plazo se empezó a cumplir este mes en residentes de provincias como Salta, Mendoza y San Juan, de acuerdo con el relevamiento que viene haciendo LA NACIÓN. En los demás distritos, eso ocurrirá desde marzo en adelante.

Distritos

Desde el Ministerio de Salud salteño explicaron que “ya está habilitada” la vacunación con el refuerzo para estas dos poblaciones en los vacunatorios públicos y no es necesario esperar un turno. “En Salta, es a libre demanda, por orden de llegada, en todos los hospitales, centros de salud y puestos móviles de vacunación”, precisaron.

Lo mismo ocurre en San Juan, como lo confirmó Alejandra Venerando, ministra de Salud provincial, y en Mendoza, donde en la última semana funcionarios del gobierno local debieron salir a explicar la confusión generada al hablar de una cuarta aplicación, como reconocieron desde el Ministerio de Salud a este medio. Al intentar aclararla, LA NACION pudo conocer que en la provincia ya se estaba dando el refuerzo a estos dos grupos específicos.

“¡No se está colocando cuarta dosis!”, tuiteó el lunes, en mayúsculas, Iris Aguilar, jefa del Programa Ampliado de Inmunizaciones provincial, sobre lo que es un cuarto pinchazo, por el momento limitado solo a ciertas poblaciones. “Lo que se está aplicado es el refuerzo a grupos especiales que recibieron la dosis adicional [tercera] por su condición –continuó Aguilar–. Estas personas han empezado a cumplir sus cuatro meses desde la dosis adicional y, por ende, empezaron a recibir el refuerzo.”

En esa línea había respondido la funcionaria a este medio, cuando también afirmó que todas las provincias habían arrancado con ese refuerzo “más o menos al mismo tiempo”.

“La vacunación tiene un esquema primario que incluye las vacunas necesarias para activar el sistema inmune del cuerpo para protegerse contra la enfermedad. Son dos dosis para la mayoría, pero para un grupo particular –inmunodeprimidos–, tres. Este último fue el primero en recibir la tercera dosis en noviembre, al igual que los mayores de 50 años que habían recibido dos dosis de Sinopharm. Luego vinieron los refuerzos [para la población en general] para mantener la potencia de la inmunidad”, dijo hoy Fernán Quirós, ministro de Salud porteño.

Indicó, a la vez, cuándo empezarán en la ciudad a poner al día con el refuerzo a esos dos poblaciones. “A partir de marzo, pasados cuatro meses de completado el esquema primario, y probablemente en abril estaremos dándole esos refuerzos a este grupo en particular”, agregó Quirós.

En la provincia de Buenos Aires, el intervalo de cuatro meses también se empieza a cumplir a principios de marzo y el Ministerio de Salud bonaerense indicó que comunicarán cuando arranque la convocatoria para esos dos grupos.

En Tierra del Fuego, las aplicaciones arrancarían entre el mes que viene y abril, con los primeros que recibieron la tercera dosis del esquema inicial en noviembre, junto con el inicio de “la gran campaña” con la puesta al día de las vacunas de calendario y el refuerzo para Covid a los niños y los adolescentes, según definió Javier Barrios, subsecretario de Gestión de Sistemas Sanitarios del Ministerio de Salud provincial.

Córdoba espera comenzar “a partir de la primera semana de marzo”, respondieron desde la cartera sanitaria local. Diego Cardozo, ministro de Salud provincial, coincidió con su par porteño al enfatizar que al hablar de cuarta dosis en el país se “hace referencia pura y exclusivamente a las personas mayores de 50 años o inmunocomprometidos que tienen un esquema completo de tres dosis [por las dos primeras de Sinopharm]. Esto quiere decir que su dosis de refuerzo sería la cuarta dosis al cumplirse el cuarto mes de la tercera dosis”.

En tanto, para el resto de la población, y como publicó LA NACION, “por el momento, lo que venimos debatiendo en el Cofesa, es que no hay beneficios concluyentes de una cuarta dosis como segundo refuerzo”, enfatizó el funcionario provincial.

A quiénes se considera inmunocomprometidos:

• Pacientes en tratamiento oncológico para tumores sólidos y oncohematológicos
• Receptores de trasplante de órgano sólido que estén en tratamiento inmunosupresor
• Receptores de trasplante de células progenitoras hematopoyéticas en los últimos dos años o en tratamiento inmunosupresor
• Pacientes con inmunodeficiencia primaria moderada o grave
• Personas que viven con VIH independientemente del recuento de CD4 y carga viral
• Pacientes en tratamiento activo con corticosteroides en dosis altas o medicación inmunosupresora y Pacientes con insuficiencia renal crónica en hemodiálisis
• Pacientes con enfermedades autoinmunes y/o tratamientos con inmunosupresores, inmunomoduladores o biológicos

Con la colaboración de Pablo Mannino (Mendoza) y Enrique Merenda (San Juan)

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