Coronavirus en Rosario: se manifestaron contra la restricción nocturna de actividades
LA NACION
Cientos de comerciantes de distintos rubros protestaron anoche en Rosario por el decreto del gobernador Omar Perotti, que restringe todas las actividades a partir de las 19:30 y por 14 días, debido al aumento de casos de coronavirus en esa provincia.
Empleados de lugares gastronómicos, gimnasios, salones infantiles, canchas de fútbol, jardines de infantes, comercios, proveedores y taxis, se concentraron desde las 19 en la esquina de Jujuy y Oroño para reclamar contra la medida que establece el cierre de estas actividades en el conglomerado del Gran Rosario, en donde se concentró la mayor cantidad de contagios en Santa Fé de los últimos días.
La manifestación fue convocada por empresarios gastronómicos de los corredores comerciales de Pellegrini y de Pichincha, bajo las consignas "Rosario quiere trabajar", "el virus no tiene horario" y "el trabajo también es salud". Con bombos, aplausos y cacerolas, se volvió a escuchar el emblemático lema surgido en la crisis de diciembre de 2001: "Que se vayan todos".
El presidente de la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica de Rosario (AEHGAR), Carlos Mellano, dijo: "Nos sorprendió la medida porque fue tomada sin consultar a los sectores a los que afecta". Y explicó: "Sacar un decreto así, de un viernes para un sábado, agrava más la situación porque los locales ya tienen hechas las compras de insumos a los proveedores".
Por su parte, el secretario gremial de los gastronómicos de Rosario, Sergio Ricupero, coincidió en que "hay mercadería perecedera, como la cerveza artesanal, que se va a pudrir si no se vende".
El dirigente sostuvo que "todo el sector considera que las medidas del Estado provincial son incomprensibles en un momento de bajas ventas y de crisis".
Por su parte, el empresario gastronómico, Alejandro Pastore, expresó que viven un clima de mucha preocupación en virtud de una medida. Y agregó: "La forma en la que se dio nos deja sin ningún tipo de herramientas".
En esa línea, consideró que "el Gobierno provincial tuvo una clara falta de previsión y sensibilidad para los comerciantes y gastronómicos".
La medida fue anunciada el viernes por la noche por el gobernador santafecino, luego de que se conociera un total de 507 nuevos casos en un día dentro de la provincia de Santa Fe.
La decisión que comenzó a regir el sábado implica que todas las actividades tengan, como horario máximo, habilitado hasta las 19.30, excepto para las farmacias de turno y los take away, que funcionan hasta las 22, y los servicios de delivery, que trabajan hasta las 23.
Con información de la Agencia Télam
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