En algunas Unidades Febriles de Urgencia ya hablan de “colapso”; no cede la demanda, tanto de residentes como de no residentes
- 4 minutos de lectura'
“No quiero ni mirar qué hora es”, dice Daniela Campagnoli, de 44 años, con la voz tomada, mientras espera sobre la vereda del Hospital Francisco Santojanni para ser hisopada. Ya pasaron cuatro horas desde que esta vecina del barrio de Liniers llegó a la Unidad Febril de Urgencia (UFU) del centro médico y, sin embargo, todavía tiene una larga fila de pacientes que la antecede. “¿Ves ese hombre con remera rayada, el primero de la fila? Bueno, está parado ahí hace una hora. Esta fila no avanza”, expresa la mujer, que desde hace días tiene tos seca y siente dolor de garganta . Detrás de ella, la fila de personas que esperan para registrarse en el sistema y luego hisoparse se alarga y llega a ocupar, en total, dos cuadras: una sobre el costado del hospital y otra sobre la plaza de enfrente.
Son las 17 y en la primera sección de la fila de la UFU, conformada por personas que llegaron al hospital entre las 12 y las 13, se escuchan gritos y discusiones. Una de las mujeres que espera para ser atendida pierde la paciencia y comienza a exigirles a los guardias de seguridad del predio que le den explicaciones por la tardanza. Estos le contestan que están colapsados, que la cantidad de ciudadanos que se acercaron a testearse durante la tarde de hoy es descomunal y que solo hay dos médicos realizando tests de tipo PCR.
A esto se suma otro factor, que, según destacan miembros del personal de esta UFU a LA NACION, contribuye al engrosamiento de las filas de las unidades febriles de la Ciudad: el desborde de los hospitales y centros de testeo del cornurbano bonaerense. “Vienen a testearse a la Capital porque allá es más complicado. Últimamente, la mitad de los pacientes son de provincia”, comenta uno de los interlocutores.
Este es el caso de Beatriz Tejada, de 57, y Marta Torres, de 51, ambas de La Matanza, que se conocieron en la fila. “Vine hasta la Capital porque me dijeron que acá atendían más rápido y te entregaban en resultado en el día, pero por lo que veo eso no va a pasar. Ya nos anticiparon que el resultado estará en 48 horas”, comenta Torres.
Pese a que ambas mujeres esperaban que la atención en el Hospital Santojanni fuera mejor, las dos afirman que supera en calidad a la de los centros médicos del municipio en el que residen. “Mi hija estuvo tres días para lograr que la hisopen en el Hospital Paroissien, en La Matanza. Un día estuvo desde las 6 hasta las 17 y se fue. Al día siguiente volvió y le dijeron que no tenían más insumos”, detalla Tejada.
De acuerdo con el último parte diario de coronavirus de la Ciudad, el 44% de los hisopados positivos analizados durante ayer pertenecen a personas que no residen en la Capital. En total, ayer se confirmaron en laboratorios porteños 5706 casos positivos, de los cuales 3185 eran residentes y 2521, vecinos de otros distritos.
En la vereda de la calle Lobos que linda con el Hospital Durand, el clima que se vivía unas horas antes era parecido. Primero en la fila esperaba un hombre que prefirió hablar poco porque le faltaba el aire; segundas, Gimena Argañaras, de 40, y Morena, su hija, de 15, que viajaron desde Lanús para atenderse allí. “Ayer, en Lanús no la quisieron hisopar, decían que no tenía suficientes síntomas. Tiene fiebre desde el jueves pasado”, detalló la madre. Y agregó: “Estamos aisladas desde entonces. Soy cosmetóloga, gano según los pacientes que atiendo. Necesito saber cuanto antes si mi hija tiene Covid o no para definir mi semana laboral”.
Unos metros más atrás, María Navarro, 27 años, vecina del barrio de Chacarita, se apoyaba, cabizbaja, sobre la reja del hospital. Hacía casi cinco horas que aguardaba para ser atendida y todavía preveía como mínimo una hora más de fila. “Sabía que esto iba a ser así. Antes de venir, asumí que iba a estar todo el día. Es cansador, pero no queda otra. Quiero tener un diagnóstico”, afirmó la joven, que es docente y desde el viernes tiene dolor de garganta y corporal.
Otras noticias de Salud
- 1
La advertencia de un psicólogo sobre los festejos en Navidad: “No hay que forzar a nadie”
- 2
En la ciudad. Lanzan un programa para que los mayores de 25 terminen el secundario en un año: cómo inscribirse
- 3
Por qué los mayores de 60 años no deberían tomar vitamina D
- 4
¿El mate nos hace más felices? El sorprendente descubrimiento de un estudio científico