Coronavirus en la Argentina: La Pampa se suma a las provincias que usan ivermectina con consentimiento del paciente
CÓRDOBA.- Desde este jueves La Pampa se sumará a las provincias que ya tienen incluida en su política oficial de salud el uso de la ivermectina, una droga antiparasitaria autorizada para uso médico, para el tratamiento del Covid-19. Su aplicación en profilaxis o en pacientes positivos de coronavirus no está aprobada por la Anmat, por lo que su utilización es compasiva, requiere del consentimiento firmado del paciente.
En Corrientes, Salta, Tucumán y Misiones ya se emplea y en el resto de las provincias, según coinciden fuentes de colegios farmaceúticos, crece la demanda desde hace varios meses contra prestación de recetas que no indican coronavirus.
El ministro de Salud pampeano, Rubén Kohan, que hace unos meses había rechazado el uso de la ivermectina, anunció que compraron 1500 tratamientos en casos de detección precoz de pacientes con coronavirus. Insistió, como todos los médicos, en que no es aconsejable la automedicación preventiva y aclaró que el fármaco que utilizarán no es el mismo que se elabora para uso en animales, y que solo se aplicará por prescripción de los médicos del sistema de salud a personas contagiadas y con detección precoz de la presencia del virus.
Explicó que la Provincia buscaba estrategias de tratamiento para llegar con "el menor grado de daño" al momento de alcanzar un mayor número de ciudadanos vacunados; utilizaron el ibuprofeno inhalado (tampoco autorizado por Anmat pero en aplicación en una decena de distritos con la modalidad de uso compasivo) y ahora elaboraron los protocolos para la ivermectina.
"No somos ingenuos, sabemos que muchas personas ya lo están usando, no sabemos de qué manera, pero recurriendo a moléculas impuras. La Anmat ha manifestado que la ivermectina para uso veterinario es una molécula completamente diferente a la empleada en humanos, por eso es importante desalentar su consumo", advirtió.
Kohan indicó que entregarán la documentación a la Anmat y que la emplearán por la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS): "Sabemos que daño no hace, como pasó cuando comenzamos con el ibuprofreno. La tendencia es muy fuerte a que genera beneficios, aunque no hay estudios controlados todavía que cierren esta investigación, con un número suficiente. A mí me preocupaba la seguridad, pero ya hay una enorme cantidad de publicaciones que muestran que a las dosis que planteamos no hay toxicidad y los efectos colaterales son mínimos".
Tanto la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (Sati) como la Sociedad Argentina de Infectología (Sadi) no recomiendan su uso. A fines de octubre emitieron un comunicado indicando: "Hasta el momento la evidencia científica no ha reportado datos claros de eficacia clínica. Los recientes resultados preliminares (sin publicación ni revisión de pares) de un estudio realizado en Argentina evidenció que la administración de ivermectina al triple de dosis habitual en 45 pacientes habría producido mayor eliminación del virus en secreciones respiratorias, pero sin correlación con mejoría clínica. Sin embargo, se necesitan más estudios con mayor número de individuos para determinar este parámetro y otros asociados a eficacia clínica y seguridad".
La referencia es al trabajo del médico Alejandro Krolewiecki del Instituto de Investigaciones de Enfermedades Tropicales de la Sede regional Orán de la Universidad Nacional de Salta (UNSa) que realizó un estudio sobre 45 pacientes para comprobar su eficacia contra el Covid-19. Ese estudio preliminar fue publicado en la revista científica The Lancet. La droga se le dio a los 45 pacientes de entre 18 y 69 años contagiados por SARS-CoV-2 leve o moderado y dentro de los cinco días posteriores al inicio de los síntomas y la conclusión es que el medicamento disminuyó la carga viral de los infectados al quinto día de su aplicación.
En el país hay varios ensayos médicos con la droga; otro es el que Héctor Carvallo realizó junto al infectólogo Roberto Hirsch del Hospital Muñiz; usaron la droga entre el 1° de junio y el 10 de agosto pasado en una estrategia preventiva con personal médico y auxiliares de la salud (1195 en total) repartidos en cuatro centros asistenciales de Ezeiza, Caseros y Cañuelas. Del ese global, 788 recibieron ivermertina y carragenina; entre quienes no la usaron, hubo 237 contagios (58%). En el otro grupo, ninguno.
Corrientes distribuye de manera gratuita la ivermectina (se fabrica en la Planta de Medicamentos provincial; como la patente está vencida no se debe pagar para producirla) entre los miembros de los equipos de salud que acepten voluntariamente usarla como profilaxis.
Julio Vallejos, director del Instituto de Cardiología correntino, fue el impulsor de la estrategia; en conjunto con el Comité de Crisis de Covid-19 del Ministerio de Salud provincial presentó el diseño a principios de julio. Tienen en marcha un ensayo clínico controlado con placebo para tratamientos de pacientes con coronavirus, llamado Ivercor; cuenta con la aprobación del Comité de Ética de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional del Noreste.