Coronavirus en Mendoza. Después del brote en una fiesta clandestina, empiezan a controlar a los camioneros
MENDOZA.- La provincia se sorprendió esta semana con nuevos contagios de coronavirus, que hicieron encender las alertas oficiales: la mira está puesta en el transporte de carga, luego de un polémico caso vinculado a un camionero, que participó de un festejo en plena cuarentena. De hecho, el Gobierno provincial aseguró que extremará los controles sanitarios de los choferes, los cuales empiezan a tomar forma, lentamente, en algunos sitios puntuales, como la alta montaña.
De todas maneras, en otro sector clave como el límite con San Luis, en el Arco de Desaguadero, la vigilancia aún es endeble, teniendo en cuenta que por tierra cuyana transitan más de 1000 camiones por día. De hecho, este es el acceso principal a Mendoza, sobre todo de quienes provienen de zonas con alta circulación del virus, como Buenos Aires.
En un recorrido que realizó LA NACION a principios de esta semana, en medio de la controversia por la posible transmisión masiva de Covid-19 por una fiesta clandestina vinculada al transportista, que ya reporta 10 contagios de coronavirus, pudo observar la escasez de inspecciones sanitarias. Es más, solo se evidenció presencia policial para tomar nota del chofer que circula por la zona y busca ingresar a tierra cuyana. Así, en una planilla, mientras el conductor baja la ventanilla del rodado solo le toman datos personales para tener registro de su paso.
En tanto, no se registró personal de Salud realizando los testeos rápidos, controles de temperatura y demás acciones de monitoreo, anunciadas por las autoridades. Solo el fin de semana, cuando tomaron estado público los nuevos infectados se anunció un operativo especial de vigilancia epidemiológica, demostrando el inicio de las medidas. Pero, en la práctica, lo que se observó en la visita que hizo este diario es la presencia de la fuerza de seguridad, aunque desde el Ejecutivo local aseguran que comenzaron a operar en las últimas horas.
"Lo que podemos decir es que hay un control permanente de personal policial. Es más, se ha reforzado personal en la Comisaría 51 del Arco Desaguadero, ante la exigencia propia que demanda la pandemia", explicó a LA NACION una alta fuente del Ministerio de Seguridad, que confirmó a su vez que fueron notificados desde Salud de la asignación de una bioquímica y dos enfermeros para realizar los testeos, por lo que afirman que están comenzando a prestar funciones.
En tanto, según fuentes de Gendarmería Nacional, el Paso Cristo Redentor, en la región oeste, se encuentra habilitado desde las 9 a las 21 por lo que, momentáneamente, no hay concentración de camiones en los sitios clave de espera, como los playones de Uspallata, de Luján de Cuyo y del Puerto Seco, en las inmediaciones del Mercado Cooperativo de Godoy Cruz.
Asimismo, en la zona este, están disponibles los espacios en la estación de servicios Eloy Guerrero, en San Martín, y en La Dormida, en la comuna de San Rosa. También, en caso de un eventual colapso de vehículos se dispondrá del Autódromo de San Martín, bajo controles policiales, según indicaron a este diario efectivos de la zona.
Por su parte desde la Asociación de Propietarios de Camiones de Mendoza (Aprotam) no dejan de reclamar que se aceleren los controles para evitar cualquier tipo de contagio, al tiempo que reclaman agilidad en los trámites para acabar con las largas filas que se forman en las fronteras. "Hacen faltas testeos, orden y control", es el pedido sostenido y recurrente de los empresarios del sector, en diálogo con este diario.
Desde el Gobierno mendocino afirman que las inspecciones arrancaron y se están aceitando, cumpliendo con el decreto 674/20 firmado el sábado por el gobernador Rodolfo Suarez. Así, prometen extremar las medidas en el Control Integrador Cristo Redentor en Uspallata como en el Arco Desaguadero.
"Se tomará la temperatura, será obligatorio el llenado de una declaración jurada y a los camioneros con residencia en la provincia se les realizarán testeos rápidos cada 15 días", indicaron en Salud, y confirmaron que en los pasos de ingreso a la provincia se dispone de un equipo médico que tomará la muestra y la temperatura corporal y hará un control clínico. Asimismo, se realizarán llamadas telefónicas cada tres días.
"A todos los que ingresen se les va a hacer llenar una declaración jurada, que es muy importante para nosotros, ya que cada dos o tres días vamos a realizar llamadas y consultar los estados de salud. Otro procedimiento importante es captar a la personas rápidamente en caso que tenga síntomas. En ese caso, se activa protocolo COVID-19 y se los internan en hospitales de Gran Mendoza", indicó Mariana Álvarez, subsecretaria de planificación y cobertura sanitarias de Mendoa, al tiempo que aseguró que se trabaja en la conformación de equipos para cubrir los ingresos Norte y Sur, que "en breve serán activados".
Medidas de control
- Los testeos rápidos cada 15 días y la vigilancia por monitoreo satelital son las principales medidas decretadas por el gobernador, en medio de los cuestionamientos por la escasez de controles al transporte. Así, ahora, durante su estadía en Mendoza, los choferes locales deberán guardar estricta cuarentena en sus domicilios, tienen restringida su circulación y los encuentros familiares, por fuera de su círculo íntimo. Incluso, los conductores podrán solicitar alojarse en un hotel, entre cada viaje, para resguardar a sus familiares.
- Los choferes que residen en otras provincias deberán ingresar a Mendoza directamente al lugar de descarga y emprender el regreso de inmediato. "De no ser posible, la permanencia en la provincia la harán en un hotel destinado a tal fin, hasta su regreso a origen. Todo hasta un máximo de 48 horas", indica el decreto. En tanto, los choferes de transporte internacional solo podrán detenerse en el lugar designado para realizar trámites de aduana y en los sitios determinados por la provincia. "En caso de que el trámite dure más de un día deberán permanecer en el predio, o a su elección en un hotel designado a tal fin, sin poder salir", indica la normativa.
- Las compañías de transporte y sus derivados deberán ajustarse y contar con estrictos protocolos en el lugar de descarga, revisado y aprobado por la autoridad sanitaria local, agrega el decreto. En cuanto al control de las unidades se realizará el seguimiento satelital de los camiones a través de una aplicación que tendrán que bajar los choferes a sus celulares, o con la entrega de un dispositivo que deberán tener mientras dure su estadía en la provincia. "Esto se realizará en todos los ingresos a Mendoza y permitirá monitorear que no se desvíen de su camino, ni se detengan en lugares no permitidos", indicaron desde el Gobierno local.