Coronavirus en la Argentina: desconcierto y ansiedad por volver a abrir entre los comerciantes de la avenida Avellaneda
LA NACIONAlejandro Horvat
Entre el desconcierto y la rebeldía, hoy se levantaron –algunas hasta la mitad– las persianas de varios locales en la avenida Avellaneda, en el barrio de Flores. Si bien, en un principio, estaba prevista la reapertura oficial de los comercios para los primeros días de esta semana, por el momento se postergó, aún no hay una fecha programada. En cuanto al barrio de Once, según la cámara de comerciantes de ese barrio, a partir de mañana reabrirán los locales dentro del sector comprendido por avenida Rivadavia, Boulogne sur Mer, Lavalle y Larrea.
Hoy hubo reuniones entre las cámaras de comerciantes de Once y de la avenida Avellaneda para elaborar y cerrar un protocolo para presentarle al gobierno nacional. Luego se llevo a cabo un encuentro entre el gobierno nacional y el porteño, en donde se definió que mañana abrirán los comercios de Once de acuerdo a la terminación del CUIT de cada comercio, es decir, los números pares abrirán los días pares y los impares, en días impares. LA NACION aún no se confirmó cuándo será la reapertura en la avenida Avellaneda.
"En un momento se comentó que iba a ser hoy, otros dicen el jueves y otros dicen que no tienen idea, que puede ser la otra semana. No sé bien cuándo van a permitir que abramos, pero, como ves, ya muchos se están animando a abrir la persiana. Tenemos en claro que hay que mantener la distancia, etcétera, etcétera. Pero ya es hora de abrir", dice Eduardo Sánchez, que atiende en un local de ropa sobre la avenida Avellaneda, a metros de la esquina con Helguera.
Esta es una de las zonas comerciales más importantes de la Ciudad, en donde casi exclusivamente hay comercios de indumentaria que hace meses no venden al público. Cuando las persianas están sobre el suelo, se ve que la gran mayoría tienen pegados grandes afiches con el sito de venta online o un teléfono de WhatsApp para poder pedir los productos, pero aún así, están en una situación económica compleja.
Mientras que sobre la avenida no tienen permitido abrir los comercios, en las calles que la cortan ya se ven a todos los comerciantes en plena actividad. El contraste entre el humor de unos y otros es notable. "Desde marzo que estoy 'bancando' todo. Le debo a todo el mundo, proveedores, empleados. Mientras que acá a cinco metros pueden abrir y yo no puedo", reniega Juan, de 45 años, que tiene un local sobre Avellaneda.
Por su parte, Martín Silva, de 38, que abrió su comercio sobre Helguera hace ya varias semanas, comenta: "Estoy contento, con el local abierto siento que puedo hacer algo para salir adelante, con el negocio cerrado me moría de angustia. A los comerciantes nos gusta estar acá".
Desde la Agencia Gubernamental de Control (AGC) informaron a LA NACION: "Se está trabajando en el tema para ver cuándo y cómo se van a abrir los locales sobre Avellaneda". Hoy había agentes de la AGC que le pedían a los comerciantes que bajaran sus persianas.
Desde el gobierno porteño son optimistas en cuanto a la evolución de la pandemia. De la mano de la baja de casos y los índices de ocupación de camas y tasa de contagios, ya piensan en nuevas aperturas.
El 3 de agosto en la Ciudad reabrieron los locales en algunas avenidas como Santa Fe, Pueyrredón, Callao, un tramo de Cabildo, Corrientes y Córdoba, entre otras. También reabrió el paseo de compras al aire libre, Distrito Arcos, en Palermo.
Por Alejandro Horvat
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