La Toyota Hilux es un emblema de las pickups medianas en el mercado argentino. La razón es doble: por un lado mantiene el liderazgo del segmento desde hace más de una década con el hito de haber sido hace dos años el vehículo más vendido del país, superando incluso a autos populares. Por otro, se fabrica en Zárate, provincia de Buenos Aires, desde donde sigue expandiendo su presencia exportadora a mercados de todo el mundo.
Equipada con dos motores diésel 1GD 2.8L de 177 CV y 2GD 2.4L de 150 CV, y nuevas transmisiones, manual y automática, de 6 velocidades, la octava generación de la pickup mediana de Toyota, que se ofrece en 17 versiones, una para cada necesidad, con cabina simple o doble, con tracción 4x2 y 4x4, esta última con caja reductora y bloqueo de diferencial trasero para el uso en situaciones extremas.
La Hilux fue la primera entre sus competidores en renovarse por completo, hace poco más de dos años, y por confiabilidad se ubicó entre las preferidas del agro y otros sectores que necesitan camionetas de uso intensivo.
Entre el equipamiento de seguridad, se destaca el control de balanceo de trailer, ABS con asistente al frenado de emergencia, asistente de arranque y descenso en pendientes, y una buena dotación de airbags. En confort, encendido sin llave, salida de aire para plazas traseras o la pantalla de 7 pulgadas con TV digital se ubican entre los ítems que sobresalen.
Los precios van desde los $ 509.100 hasta los $907.700.
Test Drive
Desde hace doce años es la pickup mediana más comercializada de la Argentina. La propuesta mecánica, su robustez y el elogiado servicio de posventa la ubican en un puesto de excelencia.
Cuando Toyota puso la piedra fundamental en la planta de Zárate (Buenos Aires) en 1997, ya sabía que comenzaría a transitar un arduo camino para posicionar a su camioneta entre las mejores del mercado. Pero este liderazgo no se construyó de la noche a la mañana, por eso la marca japonesa trazó su estrategia basándose en una filosofía que jamás traicionó. Se trata de la modalidad Kaizen, que pregona la mejora constante en la producción, doctrina que aplica en todos sus productos a nivel mundial y es respaldada con un servicio de posventa muy sólido, que ofrece accesorios para todas las necesidades.
Sobre estas bases, Hilux fue consolidando su imagen de manera tal que, desde hace doce años ininterrumpidos, es la pickup más vendida en la Argentina. Y lo hace con un producto robusto y moderno, que no para de captar la atención de nuevos usuarios.
Confort para el trabajo
La octava generación de la pickup fabricada en Argentina irrumpió en el mercado hace poco más de un año y medio, dando un golpe de efecto en varios sentidos, uno de ellos, referido a los elementos que hacen más amena la estadía a bordo.
Para ello, las versiones tope de gama incorporaron una moderna pantalla táctil de 7" en la que se puede visualizar la TV digital (inédita en el segmento), además de las funciones de la radio, bluetooth, navegador satelital y la cámara de marcha atrás, entre otras. También hubo una profunda actualización del panel de instrumentos: ahora cuenta con dos cuadrantes analógicos bien visibles y un display digital para seguir las distintas alternativas de la completa computadora de a bordo. Todo se puede manipular desde un volante multifunción con excelente agarre.
Sin dudas, puertas adentro es más confortable que su antecesora. En eso juegan un papel clave las nuevas butacas delanteras, más ergonómicas (con diversos ajustes eléctricos la del conductor), el climatizador digital con salidas de aire para las plazas traseras, mayor cantidad de porta objetos (doble guantera) y la incorporación -también inédita- de un toma 220v ubicado en la consola central. Cabe destacar que las plazas traseras ofrecen gran modularidad y cuentan con anclajes para sillas infantiles del tipo Isofix y Top Tether.
La evolución de la especie
Más allá del renovado aspecto estilístico, el equipo de ingeniería trabajó mucho en otros ítems para mejorar la percepción de esta nueva generación. Motor y chásis, algunos de ellos, además de la optimización del confort de marcha.
De esta manera, debutó el nuevo motor 2.8 con cadena de distribución y turbocompresor de geometría variable, que eroga 177 CV de potencia y entrega 420Nm de torque con caja manual y 450Nm con automática, entre las 1.400 y las 2.600 rpm. Puede estar asociado con una manual de seis velocidades que le proporciona un andar muy progresivo gracias a la suavidad de su selectora, o bien con una automática (también de seis velocidades), cuyo desempeño es el esperado para un producto de calidad.
En cualquiera de las configuraciones, el conjunto mecánico responde de manera muy eficiente, mejorando en un 10 % el rendimiento del motor: se puede recorrer, en promedio, 12 kilómetros por cada litro de combustible y alcanzar una velocidad máxima de 180 km/h. Como nos tiene acostumbrados la camioneta fabricada en Zárate, el sistema de tracción puede ser simple o 4x4, este último, con caja reductora. Aunque ahora se despidió de la selectora manual de la tracción que reemplazó por un sistema de selección electrónica de probada confiabilidad: es heredado del que utiliza desde hace más de diez años la Toyota Land Cruiser. En este sentido, aquellos usuarios que transitan diariamente los complejos caminos de la geografía argentina notarán mucho más sencilla la tarea de optar por la 4x4 alta y la 4x4 baja.
Con una rigidez torsional del chasis un 20 % mayor que la generación anterior, la Hilux mejoró también los ángulos de entrada y salida (31º y 26 º). Este es otro de los aspectos que brindan confiabilidad a los usurarios que sacan provecho en situaciones de uso extremo, aprovechando los 70 centímetros de capacidad de vadeo: cabe destacar que toda la gama cuenta con un chapón protector de las partes bajas del motor.
La reformulación que recibió el esquema de suspensiones se advierte en el andar. Los amortiguadores son más mullidos, mientras que la nueva barra estabilizadora delantera se percibe más robusta: ambos aspectos contribuyen notablemente a disminuir las vibraciones de la carrocería.
Vale mencionar que la gama Hilux ofrece una motorización de menor cilindrada para quienes no precisan de tanta potencia: el diésel 2.4 de 150 CV que se combina exclusivamente con la caja manual de seis marchas.
Si contabilizamos las versiones con cabina simple y la mencionada motorización 2.4, Hilux con sus 17 versiones se erige como la gama más numerosa entre las pickups medianas. En la versión tope de gama (SRX), el equipamiento se nutre de elementos que la ubican a la vanguardia del segmento, fundamentalmente en el apartado de seguridad.
Aquí destacamos como elemento diferencial los siete airbags. También tiene, al igual que el resto de las versiones, las diversas asistencias para la conducción, que incluyen un controlador de estabilidad y balanceo de tráiler, elemento muy ponderado para el trabajo con carga.
A fuerza de ganar clientes, la Hilux es la pick mediana más visible en cualquier campo, industria o minera del suelo argentino. Su liderazgo consecutivo durante los últimos doce años así lo reflejan.
Ficha Técnica
"La clave es seguir trabajando en la mejora continua"
La pickup líder del segmento desde hace más de una década es la Toyota Hilux. Para Diego Prado, director de Asuntos Corporativos de la marca japonesa, eso se debe a "características de producto" y también "al servicio de posventa". Prado señala que la tasa de lealtad de los clientes es del 96%, superior a la de Toyota en Japón y que el éxito está en "la mejora continua de los procesos". Con la planta de Zárate funcionando a su máxima capacidad (una camioneta cada 90 segundos), el directivo sostiene que la Hilux nacional "tiene los mismos estándares de calidad" de los vehículos producidos en Japón o Estados Unidos.
- En los últimos dos años hubo un incremento de ventas de Hilux, con el liderazgo del mercado en 2016. ¿Los sorprendió?
No nos sorprendió. Hilux viene siendo la pickup líder del segmento desde hace 12 años. En 2016 crecimos gracias a la reactivación del sector agropecuario después del cambio de regulaciones, en especial en materia de retenciones. Hoy el 60% de la demanda de pickups Hilux están originadas fundamentalmente por el sector agroindustrial. El año pasado tuvimos la reactivación de sectores como construcción, minería y petróleo. En 2016 por primera vez en la historia del mercado argentino una pickup, la Hilux, fue el vehículo más vendido, incluyendo también a vehículos de pasajeros. En febrero de este año el Toyota Etios fue el modelo más vendido seguido por la Hilux.
- ¿Cuáles son las claves para ser líderes del segmento en los últimos once años?
Tiene que ver con características de producto, como la calidad, fortaleza, robustez y durabilidad del vehículo, que están reconocidas por nuestros clientes. También entendemos que impacta nuestro servicio de posventa. En una industria que tendrá transformaciones muy importantes en los próximos años, donde las empresas dejarán de ser manufactureras para pasar a ofrecer soluciones de movilidad, nuestro servicio de posventa es una ventaja muy grande para encarar ese proceso de transformación.
- Llegarán nuevos jugadores al segmento, ¿cuál es el desafío?
Nosotros damos bienvenida a los competidores. Para una empresa como Toyota, que se basa en métodos de mejora continua –Kaizen, como le decimos-, la llegada de nuevos jugadores al segmento nos insta a seguir optimizando nuestros procesos para tener mejores productos y servicios para nuestros clientes. Creemos que la clave es seguir trabajando en la mejora continua y a través de ello sostener el servicio de posventa. Hoy la tasa de lealtad de nuestros clientes, que seguirán eligiendo Toyota, es del 96%. Es una cifra superior inclusive a la de Japón. Ese será nuestro elemento distintivo frente a la competencia.
- Son un caso de éxito industrial, ¿cómo lo lograron?
Hoy estamos exportando la Hilux a 21 mercados de América Latina. Esto se debe a una estrategia implementada hace muchos años. Cuando planteamos el negocio en la Argentina, en una región con una alta inestabilidad económica y variaciones de tasas de cambio, entendimos no era sustentable si nos concentrábamos sólo en el mercado local. Por lo cual, teníamos que apuntar a diversificar nuestros destinos. La única forma de hacerlo era alcanzar niveles de aceptación globales en nuestro proceso productivo. Nos sentamos con toda la cadena de valor: proveedores, sindicatos, distribuidores y les planteamos el desafío. Nos jugamos la patriada de alcanzar volúmenes de producción y estándares globales. Así salimos, con el apoyo de toda la cadena. Los estándares de Zárate son los mismos que los de cualquier planta de Japón o de los Estados Unidos.
- ¿En qué nivel de producción está la planta de Zárate?
A partir de 2015 comenzamos con los planes de ampliación productiva de la planta para alcanzar las 140 mil unidades anuales. Ese proceso fue gradual y a partir de mayo estaremos alcanzando el nivel máximo de producción, con una velocidad en la línea de 90 segundos. Cada 90 segundos saldrá una nueva Hilux andando de la planta de Zárate.
- ¿Qué novedades planean la gama Hilux?
A finales de 2017 lanzamos la Hilux Limited, un producto que busca un perfil más deportivo y aventurero. Para los próximos meses estamos previendo nuevas actualizaciones de la gama.
LA NACION