Condenan a Conzi a 25 años de cárcel
Los jueces consideraron que el dueño de Dallas tuvo actitudes de "tinte mafioso" y que actuó con desprecio por la vida
"Impulsado por un entorno de poder igual de delirante o violento, de tinte mafioso, conocedor de la impunidad, que impone sus propias reglas, pero que claramente entiende, dirige y acomoda la realidad a su gusto, con pleno conocimiento de la ilegalidad de su conducta y la comprensión de las normas de convivencia y legales violadas a su antojo, considero que Horacio Conzi es imputable y no existió ningún justificante que le permita eludir una condena."
Así, con dureza, el juez Osvaldo Rossi se refirió al rechazar la cuestión de inimputabilidad presentada por la defensa de Horacio Conzi para tratar de evitar una condena por el asesinato de Marcos Schenone, ocurrido el 16 de enero de 2003.
Ayer, el tribunal oral N° 4 de San Isidro, integrado por Rossi, Federico Ecke y Carlos Vales Garbo condenó a Conzi, por unanimidad, a 25 años de prisión por el homicidio de Schenone y dispuso que el dueño del restaurante Dallas indemnice con 656.420 pesos a la familia Schenone por daño moral.
Hace una semana, la fiscal Gabriela Baigún había pedido al tribunal que condenara a Conzi a 36 años de cárcel por el asesinato de Schenone, en concurso real con cuatro intentos de homicidio contra el remisero Rodolfo Fernández, Gustavo Pacheco, Gisella Carabetta y Paula Alonso.
En los fundamentos de la sentencia, los jueces sostuvieron que "Conzi actuó con desprecio hacia la vida humana, debido a que disparó contra el remise en el que viajaban varias personas, sin siquiera conocer a algunas de ellas, a lo que debe sumarse la nimiedad del móvil que lo llevó a actuar como lo hizo. Empleó munición KRD, prohibida, del tipo que perfora chalecos antibalas y vació el cargador del arma; factores, en conjunto, que dejan traslucir que se trata de un individuo portador de una personalidad al extremo peligrosa, que no mostró el mínimo arrepentimiento por la conducta que desplegó".
"Lo agarramos, lo tenemos y está preso. Le ganamos. Me voy en paz porque tengo al asesino de Marcos a pesar de lo que nos han hecho. Está preso como deben estar todos los asesinos", señaló Elsa Schenone, la madre de Marcos, fuera de la sala de audiencias.
La mujer dijo que su familia es "respetuosa de la Justicia y del tiempo fijado por la condena. Son los años que la Justicia dice que le corresponde y los Schenone vamos a acatar".
Sin embargo, dentro de la sala, cuando el secretario Pablo Rolón leyó el monto de la condena impuesta al acusado, los Schenone no hicieron ningún gesto. Estuvieron conformes con ella, pero no con los años de castigo. Como si esperaran que el tribunal hiciera lugar al pedido de 36 años de prisión reclamado por la fiscal Baigún.
Salidas, en 12 años
Según la ley de ejecución penal, la pena impuesta a Conzi le permitiría acceder el beneficio de las salidas transitorias dentro de 12 años.
Cuando el doctor Rolón terminó de leer el fallo, Elsa Schenone se abrazó con su esposo, Eugenio, y con sus hijos María Eugenia, Mariano y Alejandro. Luego, la madre de Marcos se abrazó, entre lágrimas con la fiscal Baigún y con el fiscal Mario Kohan, cuya investigación permitió el esclarecimiento del crimen.
Horacio Conzi no estuvo en la sala. El día anterior presentó una nota ante el tribunal para que lo autorizara a no concurrir a la última audiencia. Y se quedó en la cárcel de Campana.
Tampoco estuvo su hermano Hugo. Hace diez días, cuando el tribunal rechazó la presentación del video con el que pretendía demostrar que se había cambiado el proyectil extraído de un glúteo del remisero Fernández, el otro dueño del restaurante Dallas había dicho que su hermano "ya estaba condenado y que esperaba apelar el fallo ante el tribunal de Casación para poder liberarlo".
En la sentencia, el tribunal destacó la labor de los fiscales Kohan y Baigún. Sobre la fiscal de juicio, el juez Rossi sostuvo que "el minucioso interrogatorio realizado a los peritos psicólogos y psiquiátricos de la Policía Federal posibilitó que rectificaran sus testimonios y quedara demostrado que Conzi comprendía la criminalidad de sus actos cuando baleó el remise en el que viajaba Schenone".
Los jueces también destacaron el rigor científico del psiquiatra Edgardo Piaggio, quien derrumbó los argumentos del perito de parte Mariano Castex, quien intentó demostrar que Conzi no sabía lo que hacía.
Textuales
“Inteligente, pero vago”
“Fernando Pedro Bassi, uno de los amigos de la infancia de Horacio Conzi, dijo que el dueño de Dallas se creía un ser superior que se transformaba en una persona incontrolable. Dijo que era inteligente pero vago”, sostuvo el tribunal en el fallo, al referirse a la personalidad del acusado.
”Cuando se enoja, se enceguece”
“El mismo testigo recordó que, cierto día, Horacio Conzi, al volante de su camioneta, atravesó la barrera baja de un estacionamiento en la zona de Puerto Madero porque tardaban en levantarla. No tiene respeto por la gente; cuando se enoja, se enceguece y exhibe permanentemente su poder económico”, expresaron los magistrados en el fallo.
Sin delirios
“¿Cómo no pudo ver Conzi que lo que hizo cuando persiguió a Marcos Schenone estaba mal? ¿Cómo hizo para ver correctamente y entender lo que hacía para ganarle el juicio a la petrolera Esso? ¿Es posible que quien obtuvo un capital como el que ganó Conzi pueda vivir en una fantasía o en un delirio? Cuando formuló sus últimas palabras, Conzi realizó un sugestivo relato en el que no se refirió sobre sus investigaciones religiosas, ni a las palomas, ni a Galileo Galilei”, dijo el juez Osvaldo Rossi en los fundamentos con los que rechazó el planteo de inimputabilidad.
”Una peregrina idea”
“Hugo Conzi dejó traslucir la angustia que le provocó el encierro de su hermano, a quien evidentemente quiere y protege como si fuera un hijo. Además, instaló la peregrina idea de la supuesta sustitución del proyectil extraído del cuerpo del remisero para incriminar a su hermano”, expresó uno de los jueces.