Cómo enfrentó la Argentina la epidemia de la gripe A
Después de la importante baja de infectados registrada durante las últimas semanas, especialistas consultados por lanacion.com analizaron cómo actuó el sistema de salud durante el brote más intenso de la enfermedad
"En la Argentina ya pasó el pico de gripe A", dijo el ministro de Salud, Juan Manzur hace dos semanas. Luego del importante descenso en la cantidad de infectados, lanacion.com consultó a especialistas para saber cómo enfrentó el país a la pandemia. La demora en la suspensión de clases, la falta de políticas universales y las deficiencias comunicacionales fueron señalados como los principales motivos que incrementaron la cantidad de fallecimientos.
¿Qué se hizo mal frente al virus H1N1? "No se actuó con rapidez. Las decisiones se tomaron tarde, cuando ya había pasado el pico del problema", aseguró Enrique Casanueva, jefe de Infectología Infantil del hospital Austral. Y dijo que el receso escolar anticipado generó un "impacto positivo" en la sociedad, pero que debería haberse implementado antes.
"Cuando se suspendieron las clases, la gente ya se cuidaba más. En julio, por ejemplo, hemos tenido menos consultas en el hospital que en los años anteriores. Evitaban ir para no contagiarse", explicó.
El infectólogo Eduardo López, jefe del Departamento de Medicina del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, también hizo referencia a la tardía toma de decisiones. "Si se hubieran cerrado las escuelas dos semanas antes, se hubiese retrasado el brote y entonces la enfermedad se corría más sobre la primavera, que era algo importante".
Los primeros casos de gripe A en Buenos Aires estuvieron ligados a los escolares. Por ese motivo, los establecimientos educativos Fray Mamerto Esquiú, de Belgrano; la Escuela del Caminante, en Palermo, y los colegios Del Pilar y North Hills, de la localidad bonaerense de Pilar, cerraron sus puertas el 25 de mayo, como medida preventiva, tras detectarse casos de gripe A.
"El chico de edad escolar es el gran diseminador del virus", sostuvo López. Él también resaltó las repercusiones positivas que generó el adelanto de las vacaciones. "Fue un shock para la gente. Desde ahí, se tomaron mayores medidas de prevención, como no asistir a lugar públicos e incrementar la higiene personal. Esa medida generó un efecto dominó".
En la misma línea, Pablo Bonvehí, jefe de Infectología del Cemic, confirmó que el número de contagios sufrió un fuerte descenso luego del adelanto de las vacaciones. En diálogo con lanacion.com criticó: "En junio, cuando se suspendieron las clases en algunos colegios, hubo una propuesta para ingresar en un receso escolar total, pero finalmente no se adoptó". Y admitió que "posiblemente esa medida hubiese generado un impacto positivo".
El frío, un enemigo. A diferencia del hemisferio norte, en nuestro país, el brote de gripe A desembarcó en invierno, el clima más propicio para el contagio. Según los especialistas, las condiciones meteorológicas fueron determinantes para la difusión del virus.
"El clima tiene, sin ninguna duda, una correlación con el contagio. En el hemisferio norte están preocupados, porque saben que cuando llegue el invierno es altamente probable que aumente el número de casos", dijo Bonvehí.
México fue uno de los primeros países que detectó casos de gripe A. El principal escollo que enfrentaron las autoridades fue el desconocimiento del virus H1N1. Sin embargo, en la actualidad, México contabiliza 162 fallecimientos. La Argentina, pese a tener una población siete veces inferior, ya sufrió 465 decesos, según el último comunicado del Ministerio de Salud.En Brasil, la situación es más preocupante: el número de muertos ascendió a 557. "Es muy distinto tener la gripe en verano que tener una enfermedad en invierno", dijo López. Y sostuvo que "a México, la llegada de la primavera lo ayudó bastante".
Falta de políticas uniformes. Sin embargo, la hostilidad del clima atacó a todos los países de América del Sur. Chile fue uno de los primeros países que registraron casos positivos por gripe A. Según los datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), sufrió 112 decesos por el virus H1N1.
"¿Por qué hubo menos muertes en Chile? Porque tiene menos pobreza y porque se tomaron decisiones irreversibles", dijo el médico sanitarista Ernesto Trivisonno. Y explicó que en el país vecino "le dieron Tamiflu a todos los casos sospechosos. Para hacer las cosas bien, primero hay que unificar criterio."
La falta de políticas uniformes para tratar a los pacientes con síntomas de gripe A fue destacada por los especialistas como uno de los principales problemas para el tratamiento de la pandemia en el país. "Inicialmente se medicaban todos los casos, después sólo se trató a los pacientes con algún factor de riesgo y, por último, se volvió a tratar a todos los casos. Esos cambios pueden haber influido en el aumento de casos en nuestro país", explicó Bonvehí.