Profundo dolor en el sepelio de Andrés Blaquier, el empresario asesinado en la Panamericana
La ceremonia fúnebre se llevó a cabo en el cementerio Jardín de Paz; participaron familiares y amigos
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El sepelio de Andrés Blaquier, el empresario que fue asesinado el sábado mientras conducía su moto BMW, se realizó este lunes por la tarde en el cementerio Jardín de Paz, ubicado a 32 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires, en la colectora de la Panamericana camino a Pilar.
Estuvo presente Magdalena de Elordy, la viuda de Blaquier, que viajaba en la moto con el empresario en el momento del asalto y que producto del robo sufrió una lesión en su pierna izquierda que la obliga a moverse en sillas de ruedas. Ella y sus hijos recibieron abrazos y condolencias de familiares, amigos y seres queridos que participaron de la ceremonia.
Casi 200 personas se acercaron al velatorio del empresario, que era padre de tres hijos. En su nombre se realizó una misa en la que se entonó “Hosanna en las alturas”.
Juan José Blaquier, tío de Andrés, habló del dolor que significó la pérdida de su sobrino. “Estoy desolado. Este país se está desmoronando y nadie hace nada”, alcanzó a decir, alejado del grupo central de personas que comenzaba su marcha hacia el sepelio donde fue enterrado Blaquier.
Al concluir la misa, un aplauso de más de treinta segundos quebró el silencio y emocionó a los asistentes hasta las lágrimas.
Un empresario del rubro textil, de nombre Giuliano, dijo que pese a no ser un amigo cercano, asistió para recordar a Blaquier y acompañar a la familia y sus seres queridos en el “profundo dolor que deben estar atravesando”.
Una breve caminata entre tumbas de mármol equidistantes en el césped, atravesando los caminos de adoquines y árboles, desembocó en el terreno donde descansará en paz el hombre de 62 años.
Diógenes y María son amigos de toda la vida de los Blaquier. Sentados en unos de los bancos a las afueras de la misa, comentaron el difícil momento que significó perder a una “excelente persona como Andrés”. “Es increíble que esto haya ocurrido”, señaló María mientras negaba con la cabeza la situación.
Diógenes exigió justicia por el asesinato de Blaquier. “Es injusto lo que pasó, y nadie se hace responsable”, enfatizó.
“Qué doloroso tu abrazo” se oía al son de una guitarra en el lugar de sepultura. Allí se dispuso un pequeño toldo verde, para proteger el féretro.
Uno de los asistentes, con un casco de moto en la mano, comentó que fue un caso de “mala suerte”. “De 99 casos justo uno le tocó a él”, dijo el hombre, que se quejó del “mal manejo en materia de seguridad que tiene la Argentina”, y se mostró sin esperanzas de que con este caso cambie algo.
Eugenio, un amigo de la familia que se retiraba cabizbajo del sepelio con las manos en los bolsillos, dijo a LA NACION: “La Justicia y el Gobierno deberían actuar, porque es una tristeza enorme lo que ocurrió”.
La ceremonia terminó a las 17, pero los amigos y seres queridos se mantuvieron inamovibles alrededor de Magdalena y sus hijos.
El ingeniero agrónomo Ramiro Ruiz, padre de una chica de 19 años, compañera de facultad de la hija de Andrés, señaló que la muerte de su amigo podría no haber sido casual. “Esto parece zona liberada, por el tema de la concesión de las autopistas y los peajes; quizás su muerte se podría haber evitado”, aseguró
A su vez, resaltó que conoce a tres personas que sufrieron un hecho similar al de Blaquier. “A mi hermano le pegaron tres tiros y por suerte no sufrió el mismo destino, pero conozco a tres tipos que les pasó lo mismo en 20 días”, recordó.
El asesinato de Andrés Blaquier
Andrés Blaquier fue asesinado el sábado por la tarde de un disparo en el pecho, cuando le robaron la moto en la que andaba sobre el kilómetro 50 de la Panamericana. El empresario agropecuario se movilizaba con su esposa cuando fue abordado por los delincuentes.
El hecho ocurrió el sábado a las 18.54, cuando el matrimonio se desplazaba por el carril lento de la autopista, en sentido a Pilar, en una moto BMW GS 1200 negra. Unos cientos de metros antes de la salida a Derqui, en el kilómetro 50 de la Panamericana, una moto verde se les puso a la par. El rodado era conducido por Brisa de los Ángeles Villarreal, de 18 años, junto a Luciano Jesús González, alias Lucianito, también de 18 años y con antecedentes por robo calificado. Blaquier intentó evadirlos; aceleró, pero no le bastó. Los motochorros, entonces, lo sobrepasaron lo suficiente como para que el ladrón armado abriera fuego de nuevo; esta vez, a matar.
Un proyectil impactó en el pecho del ingeniero agrónomo, encargado del Negocio Agropecuario de la familia propietaria del histórico Ingenio Ledesma. Blaquier se desmoronó. Él quedó agonizante; su esposa, con un fuerte golpe que le provocó una fisura en la rótula.
En este contexto, una pareja que acompañaba a Blaquier lo asistió y pidió ayuda. El que disparó, en tanto, se subió a la BMW. En tándem, con la Benelli verde que manejaba su novia, escaparon en la dirección contraria. Llegaron hasta el kilómetro 39, poco antes de la salida a Manuel Alberti/Garín, donde el asaltante que pilotaba la poderosa moto perdió el control y cayó. Personal policial encontró el vehículo robado contra el guardarraíl, en el kilómetro 39 de Panamericana, mano a Capital, a la altura del shopping Tortugas Open Mall (TOM). Según dijeron testigos, el que iba en la moto de alta gama la dejó tirada, se subió a la Benelli verde y escaparon hacia la zona de Maquinista Savio.
Mientras, en el lugar del hecho, Blaquier, malherido, fue asistido y trasladado rápidamente en una ambulancia del SAME hasta el hospital Sanguinetti, de Pilar, donde murió poco después, como consecuencia de la herida de bala en el tórax. Fuentes de la familia aseguraron a LA NACION que Blaquier había hablado sobre la posibilidad de que le sustrajeran la moto y había asegurado que de ninguna manera se iba a resistir ante una amenaza de robo.
Personal de la Policía Vial Pilar y del Comando de Patrulla Pilar trabajaron en el lugar junto con Policía Científica, que efectuó los peritajes del hecho. La causa fue caratulada como “homicidio en ocasión de robo” por la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) Nº4 de Pilar, a cargo del fiscal Gonzalo Agüero, que en la tarde del domingo le tomó declaración indagatoria a Brisa Villarreal, que se negó a declarar. Tras ello, pidió al juez de Garantías de San Isidro Nicolás Ceballos que convirtiera en detención formal el arresto provisional de la joven, detenida el sábado a la noche en un departamento de la calle Haití al 4400, en la localidad de Lagomarsino.
González, el autor material de los disparos que terminaron con la vida de Blaquier, fue detenido esta madrugada. La policía bonaerense logró su detención también en una casa situada en Lagomarsino, en el límite de los partidos de Pilar y Escobar.
“Estaba en una vivienda cercana a la casa de su hermana. Había intentado cambiar su fisonomía. Se tiñó el cabello. Eligió un color oscuro, antes tenía una especie de platinado”, sostuvo un detective que participó de la detención de Lucianito.
En la detención de González intervino personal policial de las comisarías 5ª y 7ª, del Destacamento de Luis Lagomarsino, de la Estación de Policía Departamental Pilar, Guardia Urbana, Policía Local y de Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de San Isidro. La investigación está a cargo del fiscal Gonzalo Agüero, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 4 de Pilar.
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