Cien años de libros, historia y desafíos
La ciudad de Buenos Aires debe a sus librerías y editoriales buena parte de su patrimonio cultural y su desarrollo económico. Una reconocida tradición de editores y libreros convive y da sustento a diversas formas de innovación, que en el terreno de los contenidos editoriales asegura un alto estándar de calidad, reconocido internacionalmente, y una oferta particularmente diversa.
Cuando esa tradición empezaba a forjarse en la Argentina, nació El Ateneo, pionera de la edición y comercialización de libros, tanto en nuestro país como en la región. Su desarrollo contribuiría luego con la difusión de nuestros autores en el mundo e incluso con la postulación de Buenos Aires como una de las capitales del "boom de la literatura latinoamericana" en los años sesenta.
Con el paso de los años, diversos avatares económicos y políticos terminaron por reconfigurar al sector editorial en nuestro país y no estuvo al margen de estas transformaciones la librería y editorial que celebra cien años. Así, El Ateneo llega hoy a nuestros días, en que el grueso del mercado aparece representado por pequeñas y medianas editoriales, convertida en lo que comúnmente se llama una gran empresa, a la que no le son ajenas las lógicas y desafíos de cualquier gran negocio, aún de base creativa.
El Ateneo ha logrado hacerse, para orgullo de los argentinos, de un lugar de preeminencia entre las librerías más destacadas del mundo, señalados sus espacios de venta como ejemplos de innovación y conservación del patrimonio arquitectónico y cultural. Y sigue ofreciendo, desde su sello, contenidos editoriales de excelencia para muchísimos lectores.
Merece un párrafo aparte la experiencia de trabajo desarrollada desde el Ministerio de Desarrollo Económico con El Ateneo, en la que siempre hemos encontrado buena recepción y acompañamiento, para todas las iniciativas que repercutieran en la promoción de las pequeñas y medianas editoriales del sector así como en el desarrollo, formativo y comercial, de la plaza librera.
Por su historia, que la instala como un ícono de nuestra industria editorial y de nuestra destacada plaza librera, agente cultural y a la vez actor destacado del mercado, celebramos estos primeros cien años de El Ateneo y le deseamos lo mejor para el futuro.