Este martes comenzaron los alegatos en el juicio que enfrenta Cristian Aldana por los cargos de abuso sexual gravemente ultrajante y corrupción de menores de siete mujeres. El músico contó con una defensora oficial porque hoy renunció el penalista Nicolás Grasso, que había asumido como su nuevo abogado hace pocas semanas.
En las primeras horas de la tarde, la querella de cinco de las siete denunciantes, a cargo de Sofía Lanzilotta y Esteban Galli del Programa de Asistencia y Patrocinio Jurídico a Víctimas de Delitos de la Defensoría General de la Nación, abrió la etapa de alegatos. Para este jueves a la mañana se espera el alegato de Gabriela Conder, abogada particular de una de las denunciantes; el viernes se prevé la presentación de la fiscalía, a cargo de Guillermo Pérez La Fuente con asesoramiento de la Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM); y por último la defensa de Aldana , que aún no se sabe si la ejercerá la defensora pública oficial o un abogado privado.
Pese a que se inició esta etapa clave, el juicio podría volver a trabarse ya que Aldana rechazaría otra vez la defensa oficial, aseguró Grasso a Rolling Stone, algo que ya había sucedido en este proceso luego de que el Tribunal Oral en lo Criminal N°25 despidiera a Rodolfo Patiño, el primer abogado del líder de El Otro Yo, por inconductas reiteradas. Tiene tiempo hasta el lunes por la mañana para nombrar un abogado nuevo.
El motivo de la renuncia de Grasso es un viaje a Europa previsto para el 8 de julio. Según declaró a Rolling Stone, cuando Grasso asumió el Tribunal le había dicho que el juicio estaba en instancia de alegatos. Pidió diez días para ponerse al día, pero cuando llegó a la primera audiencia Aldana recién comenzaba con su declaración indagatoria. "Es la principal herramienta probatoria de la defensa. De ahí surgen careos y nueva prueba; debe ser antes de los alegatos", comentó.
"Abandonar la defensa en esta instancia es una falta de ética y responsabilidad total del abogado, sobre todo porque él sabía que no iba a llegar a terminar el juicio con él", dijo Gabriela Conder, abogada querellante de una de las denunciantes. "Es una estrategia para dilatar el juicio, para pedir la nulidad por indefensa, cuando él mismo está forzando esa posición de indefensión con abogados que lo dejan, renuncian y no colaborando con la oficial que le otorga el Estado".
El juicio, que comenzó el 23 de mayo del año pasado, agrupa siete casos. En prisión preventiva desde el 23 de diciembre de 2016 en el Penal de Marcos Paz, Aldana se tomó dos audiencias completas para describir su historia de vida, su carrera musical y la relación de pareja con una de las denunciantes. Resta, de acuerdo al planteo de la defensa, que el imputado caracterice los otros seis casos. "Durante dos audiencias estuvo hablando de cosas que no tenían nada que ver con los hechos, como el color de pelo que usaba cuando fue a la colimba, cosas así", aseguró la querella.
El tribunal, integrado por los jueces Rodolfo Bustos Lambert, Ana Dieta de Herrero y Rodolfo Goerner, a fin de evitar las dilaciones en un juicio programado para durar cuatro meses, volvió a convocar a la defensora oficial Cecilia Durand, a la que Aldana, según trascendió, volverá a recusar. "Ella no hizo una defensa como correspondía", dijo el abogado renunciante Grasso.
Esto mismo es lo que le llama la atención a la querella, que si el abogado que asumió hace pocas semanas manifiesta una mala representación de la defensora oficial lo deje de nuevo a su merced. "Habla de una actitud de perversidad de parte de ellos, que claramente tenían todo planificado para dilatar", señaló Conder.