Buenos Aires, el lugar con más casos de lepra en el país

La lepra, tal como se la conoce en la actualidad, nada tiene que ver con la descripción que se hiciera de esta enfermedad en diversos pasajes bíblicos, relatos de las Cruzadas o expediciones de la Edad Media. Los especialistas resaltan la importancia de derribar el mito que asocia a esta enfermedad con el contagio inmediato y el aislamiento.

El médico Jorge Tiscornia, del Hospital Ramos Mejía y coordinador de la campaña de prevención de la lepra que organiza la SAD en la primera semana de octubre afirma que "la lepra es de muy bajo contagio, es totalmente curable y el tratamiento es ambulatorio".

"El problema -continúa el especialista- es que muchos pacientes llegan con la enfermedad muy avanzada porque no tienen un diagnóstico temprano. Algunos no consultan por desconocimiento, pero también a veces pasan dos o tres años sin diagnóstico porque muchos médicos no toman en cuenta que la lepra aún existe", asegura Tiscornia.

Por este motivo, Cecilia Medina, supervisora del sector Leprología del área programática del hospital Sommer, destaca: "Es estratégica la capacitación del personal de salud, para que los tengan conocimiento de que la lepra sigue existiendo y así puedan reconocer los primeros síntomas de esta enfermedad y tratarla a tiempo".

Según estadísticas de la Sociedad Argentina de Leprología, en 2013, se registraron 550 casos de lepra en nuestro país, de los cuales 277 fueron considerados como nuevos casos. Buenos Aires –incluyendo el área de la provincia y la ciudad- concentra la mayor cantidad de casos, reuniendo a 121 pacientes, mientras que Formosa se ubica en segundo lugar con 91. Le siguen, Misiones, Chaco y Corrientes con 77, 64 y 49 personas registradas en tratamiento respectivamente y luego, el resto de los afectados se divide en Salta, Santiago del Estero, Santa Fe y otras provincias.

El número de infectados es aún mayor si se toma en cuenta que existe una tasa oculta del 30 por ciento, según afirman los especialistas de la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD).

Los especialistas resaltan que los síntomas más evidentes de la lepra son la aparición de manchas (máculas) en la piel con disminución o pérdida de la sensibilidad, del vello y/o de la transpiración. Esta enfermedad afecta preferentemente a la piel y a los nervios periféricos, y en ocasiones a las mucosas y órganos internos.

De esta manera mediante campañas como la que desarrolla en la primera semana de octubre desde hace 15 años la Sociedad Argentina de Dermatología (SAD), se intenta combatir a la lepra con el objetivo de hacerla desaparecer por completo del espectro de patologías que afectan a la población, con lo cual se transforma en un asunto de interés público.

La letra en la Argentina

La bacteria Mycobacteriumleprae fue descubierta en 1874 por el médico noruego Gerhard Hansen por lo que se la llama también bacilo de Hansen.

Es necesario tener en cuenta que aún en aquellas provincias argentinas en las que no se han detectado o informado sobre nuevos casos de lepra, ello no significa que la enfermedad no existe en esos territorios, ya que la tasa oculta de pacientes que contrajeron lepra es cercana al 30 %.

Otro dato relevante es que, según recuerdan los especialistas, "tiene que haber como mínimo un periodo de cinco años de incubación de la enfermedad".

En abril de 2012, durante un encuentro de profesionales médicos realizado en Tucumán, un comunicado del Ministerio de Salud de la Nación manifiesta que "en Argentina se diagnostican entre 350 y 400 casos de lepra al año. Se trata de una enfermedad que se caracteriza por ser una endemia de moderada magnitud y focalización en las regiones noreste, noroeste y en el centro del país. En el resto del territorio, el problema carece de significación estadística. Mientras tanto, a nivel mundial se diagnostican unos 230.000 nuevos caso anuales".

El mismo informe oficial señalaba también que la cartera nacional de salud tiene el objetivo de "lograr la erradicación de la lepra para 2016".

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