Aún no se sabe qué causó la explosión en Monte Grande
Los vecinos exigieron una rápida respuesta del intendente y la libertad de un joven
Ya transcurrieron más de 48 horas desde la explosión misteriosa en la localidad bonaerense de Monte Grande, que cobró la vida de una mujer y dejó nueve heridos, y aún se desconoce el origen del estallido. Las autoridades mantienen su postura de que se trató de un escape de gas, pero no se conocieron los resultados de los peritajes oficiales.
Además, anoche, los vecinos realizaron una protesta para pedir la libertad del joven detenido por falso testimonio y reafirmaron su versión de que un cuerpo extraño caído del cielo fue el que provocó el desastre.
El intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, volvió a presentarse ayer en el lugar del siniestro, informó que "los peritos siguen avanzando con las investigaciones" y que sigue siendo fuerte "la versión del escape de gas", pero aclaró que las diligencias preliminares "están sujetas a los análisis de laboratorio del material que se retiró" el día de la explosión.
Gray agregó que "se está analizando la posibilidad de una falla en torres de alta tensión" que pasan sobre las viviendas afectadas. "Queremos basarnos en principios científicos, así que se están trabajando distintas hipótesis", aclaró.
Además, relató que la municipalidad dispuso un operativo con psicólogos para atender a los vecinos que sufrieron el impacto y aseguró que ya comenzaron las tareas de reparación en los domicilios damnificados. Ayer por la tarde, empleados de Desarrollo Social pusieron una mesa de ayuda en la puerta del comedor El Zaizar, para comenzar a realizar un inventario de los arreglos que habrá que hacer en las casas y comercios afectados, con la participación de los vecinos.
Al recibir el alta de la clínica Esperanza donde su mujer e hijo permanecen en observación, el dueño de una de las viviendas que quedó reducida a escombros tras la explosión negó que una garrafa que estaba en su casa hubiera sido la causa de la tragedia.
"Encontraron las tres garrafas intactas y las piezas del horno en su lugar", señalo Fabián Orlando. "No sé qué pasó, pero sé que hay gente que sabe esto, y quiero que se sepa la verdad", dijo.
Los vecinos del barrio 9 de Abril se mostraban indignados ayer ante lo que consideran una falta de respuesta por parte de la municipalidad de Esteban Echeverría. Según ellos, no se hará cargo de todos los daños provocados por la explosión. Además, criticaban a los medios que insinuaron que algunos vecinos habían tomado alcohol antes de acostarse y que, por eso, hablaban de la caída de cuerpos celestes como posible causa de la explosión. A las 19 de ayer, realizaron una marcha en rechazo por la falta de auxilio y en apoyo del joven que se encuentra detenido por falso testimonio, tras repartir una foto de lo que afirmó que había sido un meteorito.
"Ya pasaron más de 30 horas y aún no pusieron los vidrios", se lamentó Marcela Constante, que reside en la calle Los Andes, a pocos metros de donde se produjo la fuerte explosión. "Vinieron asistentes sociales para tomar datos. Me querían dar un colchón y un bolsón con mercadería, pero tenemos para comer. ¡Necesitamos que nos arreglen la casa!", dijo.
Gladys Carruso relataba las rajaduras en las paredes de su hogar, situada en Garreador 287. "Un horno pizzero no me levanta la casa", dijo molesta, respecto de la principal hipótesis en estudio.
"Los vecinos de al lado me prestaron materiales, ya que están construyendo una casa y mi hijo me puso una nueva ventana", comentó Nilda Garro, propietaria de una vivienda en Los Andes 250, quien contó a La Nacion cómo la ventana del frente de su domicilio fue arrancada de cuajo con la explosión.
En tanto, la mayoría de los habitantes del barrio insiste en que vieron "una bola azul caer del cielo" antes del estallido registrado en el cruce de las calles Los Andes y Luis Vernet. Otros vecinos contaron que se halló un fragmento de metal en la zona. Un empleado de Telefónica, que colaboraba en las tareas de remoción, lo descubrió debajo de un poste incendiado y anunció que pensaba llevarlo a un laboratorio.
En voz alta
RENEE AGUIRRE
vecino
"No había olor a gas, había un olor a azufre y el cielo tenía un color raro. Después de la explosión quedó una columna de humo espesa. Queremos saber la verdad o, si no saben, que lo digan."
GLADYS CARRUSO
Vecina
"Nos dijeron que sólo se van a hacer cargo de los vidrios, nada más. Si llega a llover se me moja todo. Que no prometan cosas para después no cumplir porque eso es jugar con la gente."