Apostilllas

Los Chalchaleros llegaron a la Antártida en compañía de periodistas y de la gente de Máxima, la AFJP que los auspicia. En el escenario, después de los agradecimientos, Juan Carlos Saravia comentó: "Tuvimos que esperar 50 años para que alguien nos auspiciara. Cuando me enteré de quiénes se trataba, reflexioné: ¿Tan gagá estaré que ya me andan queriendo jubilar?"

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Es bien conocida en el ambiente folklórico la afición por el truco de Polo Román y de Pancho Figueroa. La pareja se dio el gusto de ganar todos los buenos que jugaron contra los muchachos de la base:"Lo único que nos faltaba era ganar en la Antártida", se jactaron de su suerte después de la serie de triunfos Polo y Pancho. Lo que nadie sabe es que, el día anterior, antes de salir de Río Gallegos, el dúo sufrió un revés ante dos descendientes de "gringos" en el Club Inglés local.

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En la noche del miércoles, cuando faltaba poco para la comida en el casino de la base, hubo decepción cuando un chalchalero y un periodista se enteraron de que el vacío estaría acompañado por soda y jugo de naranja. Rápidamente sus caras se transformaron y un oficial les explicó que en Marambio sólo se puede tomar alcohol los sábados.

Inmediatamente ambos se dirigieron a un comodoro y le insinuaron:"Parece que si no aparece algún copetín Ôlos Chalcha´ no cantan." La autoridad respondió con energía y decretó: "¡Hoy es sábado!".

Al rato los dos sedientos estaban bebiendo whisky importado. Bastante alegre, uno de ellos comentó satisfecho: "Mirá que está rico eh...". El otro respondió: "Es porque lo estamos tomando con hielos eternos".

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