En San Isidro, alumnos del secundario convierten en leyes sus propios proyectos
Ya presentaron 60 iniciativas en el Concejo Deliberante y 20 fueron aprobadas, entre ellas una campaña de concientización sobre acoso callejero
A la hora de elegir el tema, Micaela y Candelaria no lo dudaron. Había que hacer algo contra el acoso callejero y esta era la oportunidad. Se reunieron, lo discutieron con sus compañeros del quinto año del colegio Santa Teresa del niño Jesús, redactaron un proyecto, lo presentaron en el Concejo Deliberante y lo defendieron tantas veces como hizo falta. Gracias a su iniciativa, hoy la campaña es una realidad y ellas pueden decir, orgullosas, que a los 17 años hicieron algo importante por su comunidad.
Son dos de las alumnas que el año pasado participaron de la iniciativa "Banca 25", que promueve el HCD de San Isidro. La idea es estimular a unos 1500 chicos de 23 escuelas secundarias públicas y privadas para que elaboren proyectos propios en función de sus intereses y preocupaciones. Un camino para acercarlos a la actividad democrática.
"Surgió la temática del acoso callejero porque todas tenemos experiencias propias, de amigas y de gente que conocemos", cuenta a LA NACION Micaela San Martín. Un silbido, un hombre que apoya en el colectivo, un acoso disfrazado de piropo... Situaciones violentas y muchas veces naturalizadas. Esos eran los fundamentos que llevaron a las chicas, y a todo su curso, a presentar la idea.
En el recinto
El proceso fue largo e incluyó debates dentro del aula, con otros chicos y finalmente en el recinto, frente a frente con los concejales. Costó, pero se logró. "No es un piropo, es violencia de género", reza el eslogan de la campaña que, de a poco, comienza a tomar forma en todo San Isidro.
Además de carteles en la vía pública con frases como "¿Creés que gritarle en la calle te hace más macho?" o "No le silbes, no es tu perro", también están contempladas charlas y debates públicos para introducir en la temática a toda todos los vecinos del partido.
"La iniciativa se trabaja en conjunto con el Consejo Escolar y tiene como finalidad promover la participación de los jóvenes. Queremos escucharlos. Es importante que se comprometan, pero también que aprendan a negociar y consensuar entre ellos", explica Carlos Castellano, presidente del HCD de San Isidro e impulsor del proyecto que ya va por su tercera edición.
Luego de una primera instancia, al interior de las aulas, los proyectos de ley llegan al Concejo y son tratados por los ediles, quienes más tarde piden que los propios chicos se acerquen y expongan sus fundamentos ante la comisión de Labor Parlamentaria.
"Ya pasaron más de 4500 chicos desde 2014. Hay 60 proyectos presentados y unos 20 ya aprobados, como por ejemplo la campaña de concientización sobre el acoso callejero, pero también hay buenas ideas sobre iluminación, semáforos y seguridad vial, entre otros", describe.