Enterate cómo es la vida de este animal histórico
Hace unos 400 años, en las aguas gélidas de Groenlandia, una hembra de tiburón boreal veía la luz, y todavía hoy merodea por esos mares.
Para tener una idea, este ejemplar de Somniosus microcephalus nació en la misma época en la que morían Miguel de Cervantes y William Shakespeare, las coronas de Escocia e Inglaterra se unían y empezaba la Guerra de los Treinta Años.
Esto la hace, según un reciente estudio, el vertebrado más longevo que haya existido en la Tierra.
Para determinar la edad de este tiburón de Groenlandia, los expertos de la Universidad de Copenhague utilizaron la técnica de datación por radiocarbono.
Y este no es el único dato asombroso -o al menos curioso- que encontraron.
1. La edad sexual
En el estudio publicado en la revista Science, los expertos estudiaron las edades de 28 animales, y estimaron que la edad de una estas criaturas era de unos cuatro siglos.
"Nos sospechábamos que estábamos lidiando con un animal muy inusual", le dijo a la BBC Julius Nielsen, biólogo marino y jefe de la investigación.
"Pero creo que todos los que estuvieron involucrados en esta investigación se sorprendieron al saber que estos tiburones eran tan viejos", agregó.
Estos tiburones crecen un centímetro al año y alcanzan la madurez sexual a los 150 años.
Los expertos creen que estos animales solo pueden alcanzar la madurez sexual cuando miden 4 metros de largo, lo que quiere decir que -al ritmo que crecen- deben esperar un siglo y medio para aparearse.
Es decir, que el ejemplar de la foto empezaba a reproducirse en la época que el astrónomo Thomas Wright publicaba su "Teoría original o nueva hipótesis del Universo" en la que sugería que la Vía Láctea era un sistema de estrellas en forma de disco y el Sistema Solar estaba en el centro de ella.
2. Lentos nadadores de cuerpo blando (muy blando)
Los tiburones de Groenlandia son unas bestias inmensas que pueden alcanzar una longitud de 6 metros de largo.
Se encuentran, nadando muy lentamente en las aguas del norte del océano Atlántico, y del glacial Ártico, cerca de Groenlandia e Islandia (de allí su nombre).
Con este lento ritmo de vida, y una tasa de crecimiento bastante relajada, siempre se pensó que estas criaturas podían vivir muchos años.
Pero hasta ahora no había sido posible determinar su edad.
Algunas de estas especies de tiburón, como el blanco, tienen un tejido calcificado que puede usarse para saber cuánto tiempo llevan de vida.
"Pero el de Groenlandia es un animal muy, muy blando", señaló Nielsen.
"No tiene partes duras en el cuerpo donde se puedan depositar capas de crecimiento, así que se pensaba que la edad no se podía investigar".
3. El ojo del tiburón
Sin embargo, el equipo encontró una forma ingeniosa de determinar la edad.
"El lente del ojo del tiburón está compuesto de un material especializado que contiene proteínas metabólicamente inerte", contó el experto.
Esto significa que una vez sintetizadas en el cuerpo, estas proteínas no se renuevan más, lo que permitió a los expertos utilizar la técnica de datación por radiocarbono.
Y fue con esta técnica que determinaron que la hembra más grande, de 5 metros, era también la más longeva.
Debido a que la datación por carbono no produce fechas exactas, se cree que pudo haber nacido entre el 1501 y el 1744, pero su fecha más probable es a principios del siglo XVII.
Tras sobrevivir a siglos de guerras, revoluciones y transformaciones en el mundo, la mayoría de los 28 tiburones estudiados murieron tras ser atrapados por redes de pesca.
OTROS DATOS CURIOSOS
- Debido a su extrema longevidad, los tiburones de Groenlandia todavía deben estar recuperándose de la pesca intensiva a la que fueron sometidos antes de la Segunda Guerra Mundial.
- Estas criaturas no son las más longevas que haya en el mundo animal, pues el oro a los más viejos se lo lleva una almeja llamada Ming que llegó a cumplir 507 años.
- Y si hablamos de humanos, el título del hombre más longevo se lo lleva la francesa Jeanne Louise Calment, quien vivió 122 años y murió en 1997.