Una ciudad golpeada con cuatro ejecuciones con sello narco y uno de los primeros enfrentamientos entre policías y sicarios

En una ciudad donde las balas resuelven de manera cotidiana enfrentamientos callejeros debería ser algo habitual un tiroteo entre policías y sicarios. Sin embargo, es una rareza. No es habitual en Rosario que los uniformados intercepten a un tirador. Menos aún que el encuentro fortuito termine en un intercambio de disparos. Pasó en mayo pasado, cuando un agente fue herido de diez disparos de ametralladora. Luego, los “soldaditos” narco se movieron por un lado y las patrullas, por otro. Hasta el cruce de ayer. La información oficial estableció que un móvil policial intentó identificar a un joven que se movilizaba en una moto. Todo derivó en un tiroteo y la muerte del presunto sicario. Fue la quinta muerte violenta en 24 horas. Los otros cuatro casos fueron, por las características de los homicidios, ejecuciones.

Se eleva así a 241 la cifra de homicidios en el distrito judicial Rosario, donde la violencia urbana está tan arraigada que directamente se creó una fiscalía especializada en balaceras. Nada igual hay en otros distritos.

El singular enfrentamiento entre policías y un supuesto tirador tuvo lugar ayer en la esquina de Cafferata y Rueda, del barrio rosarino San Francisquito, donde policías a bordo de una patrulla vieron a un joven que se trasladaba con una mujer en una motocicleta sin patente, por lo que intentaron que detuviera la marcha para identificarlo, según consignó Télam.

Voceros de la Justicia detallaron que frente a esta situación, el motociclista aceleró y escapó por Rueda hasta llegar a la esquina de Lavalle. Allí la mujer que lo acompañaba se bajó de la Honda CG Titan 150cc, mientras que su compañero reanudó la marcha para huir de los uniformados. Al llegar a Lima y Gálvez, el motociclista perdió el control del rodado y cayó, momento en que fue alcanzado por los agentes.

De acuerdo a las fuentes, en ese momento el sospechoso desenfundó un arma y disparó contra los policías, que repelieron la agresión. El joven resultó herido de bala e intentó evadirse por un pasillo situado sobre Gálvez que desemboca en el boulevard 27 de febrero, pero no lo logró y finalmente fue detenido. Debido a las lesiones que presentaba, el sospechoso fue trasladado en un patrullero al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca), donde horas más tarde murió, dijeron las fuentes. El equipo médico confirmó que el joven de 23 años, identificado como Maximiliano Agustín Barrionuevo, murió por dos disparos en el pecho y uno en una pierna.

Poco después se conoció la muerte de otro joven de 23 años. En ese caso había sido baleado el pasado lunes, cuando la víctima, identificada como Alejandro Hinojosa, estaba junto con un amigo y una amiga en Domingo Polichiso al 300. Mientras conversaban, alrededor de las 19.30, en la calle fueron baleados por dos tiradores que se movilizaban en una moto por el barrio Sarmiento. Hinojosa recibió varios disparos. Uno en la cabeza resultó finalmente mortal pese al esfuerzo de los médicos. Sus acompañantes se recuperaron de las heridas sufridas en las piernas.

Anteanoche se notificó también el asesinato de una mujer de 62 años en el barrio Villa Manuelita, en la zona sur de Rosario. Alrededor de las 20, Josefa Estela Retamozo tomaba mate con su esposo cuando fue alcanzada por, al menos, dos disparos efectuado por tiradores que se escaparon en un automóvil.

En tanto, en la madrugada de hoy fue encontrado el cuerpo de un joven de 26 años en Villa Gobernador Gálvez. El cadáver de Pablo Matías Olivieri presentaba varios impactos de bala y fue hallado junto a su motocicleta Honda. Al revisar sus pertenencias, la policía detectó que portaba una pistola calibre 45 y $30.000.

Un día antes había sido asesinado un hombre de 12 balazos en el pasillo de un barrio de la periferia de Rosario. El hallazgo del cuerpo fue registrado por efectivos a bordo de una patrulla del Comando Radioeléctrico que acudieron al lugar alertados por un llamado de vecinos al 911, consignaron a Télam los voceros consultados. La víctima, identificada como Mario Alejandro Martínez, de 37 años, fue encontrado poco después de las 23.30 tirado sobre la calle Carranza al 800, en un pasillo entre los pasajes Derqui y Güemes, de la zona noroeste de Rosario. Según la pesquisa, los peritos forenses de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) detectaron que el cuerpo presentaba 12 heridas de arma de fuego.

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