Un caso sin precedentes. Condenaron a la “mula” que viajó desde Barcelona con éxtasis líquido en botellas que simulaban tener vino
En un juicio abreviado, el sospechoso recibió una pena de prisión de tres años en suspenso; su “colaboración” en el expediente permitió avanzar en la investigación
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LA NACIONGabriel Di Nicola
Fue un caso sin precedentes en la historia narcocriminal argentina. El 20 de agosto de 2022, en el equipaje de un pasajero que regresaba a la Argentina desde Barcelona, España, personal de la Aduana descubrió éxtasis líquido. La droga sintética estaba en tres botellas de vidrio que simulaban tener vino. La “mula”, en un juicio abreviado, fue condenada a la pena de tres años de prisión en suspenso.
La pena fue impuesta por el Tribunal Oral en lo Penal Económico (TOPE) N° 1 tras homologar un acuerdo de juicio abreviado alcanzado entre el Ministerio Público Fiscal y la defensa del imputado.
Según surge de la sentencia, a la que tuvo acceso LA NACION, Rodrigo E. U., de 36 años, prestó “colaboración” para poder avanzar en la investigación. Dicha circunstancia posibilitó que el sospechoso alcanzara una reducción de la pena.
“Ha podido verificarse que el reconocimiento del hecho y de la responsabilidad efectuado por el imputado ha sido prestado sin vicios que afecten su voluntad y en completo conocimiento de sus consecuencias”, sostuvo el juez Zabala en la sentencia.
El líquido secuestrado en el aeropuerto internacional de Ezeiza equivalía a casi cuatro kilos de éxtasis, según el expediente judicial.
“El ingreso de Rodrigo E. U. en el territorio del nacional por el aeropuerto internacional de Ezeiza en el vuelo IB 2601 de la empresa Level desde Barcelona, España, llevando en su equipaje la sustancia estupefaciente acondicionada, permiten afirmar con certeza que el nombrado obró con conocimiento del alcance de su conducta e igualmente resolvió llevarla adelante, disponiendo lo necesario, en lo que hace a su intervención, para el ingreso al territorio nacional de la sustancia estupefaciente, con miras a su posterior comercialización, lo que se vio frustrado por circunstancias ajenas a su voluntad, lo que lleva a estimar que se encuentra conformado el aspecto subjetivo requerido para la configuración del delito que se le enrostra, todo lo cual fuera así reconocido por el imputado”, se explicó en el fallo donde se condenó al sospechoso.
La investigación
La investigación comenzó el 20 de agosto pasado, cuando, en un control hecho por personal de la Dirección General de Aduanas, en el equipaje de un ciudadano argentino que regresaba de Barcelona descubrieron casi ocho kilos de éxtasis líquido, oculto en tres botellas de vidrio que simulaban tener vino.
Desde la Dirección General de Aduanas explicaron: “Personal de la Sección Unidad de Apoyo Operativo Metropolitana, procedió a efectuar una revisión exhaustiva de las botellas de vidrios halladas en la valija. Como se observó la adulteración de los corchos, se procedió a realizar a un análisis del líquido y se determinó que era éxtasis.
El sospechoso, que dijo ser electricista, y estaba vestido con una remera de la exitosa serie La Casa de Papel, había salido de la Argentina el 9 de agosto pasado.
Según conocedores del mercado de drogas sintéticas, cada pastilla de éxtasis, en el momento en que fue detenido el sospechoso, tenía un valor de entre 3500 y 4000 pesos. Con un kilo de MDMA –sustancia de sabor amargo, de propiedades estimulantes y desinhibitorias, que produce cambios en la percepción sensorial– se pueden fabricar entre 2000 y 25000 pastillas.
La “mula” condenada había recibido órdenes e indicaciones de los pasos que debía seguir y a quién tenía que ver en España para regresar al país con el valioso cargamento. Todas las indicaciones quedaron registradas en mensajes de WhatsApp, información clave para avanzar en la investigación.
Casi cuatro meses después del decomiso del cargamento, investigadores judiciales y policiales identificaron a un sospechoso que sería quien le habrían dado esas órdenes a la “mula” detenida en Ezeiza. Es decir, un eslabón superior en el organigrama de la banda.
En diciembre pasado, cuando el país estaba pendiente del partido por las semifinales del Mundial Qatar 2022, por orden del juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky, y tras un pedio del fiscal Emilio Guerberoff, detectives de la División Operaciones Federales de la Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal (PFA) hicieron una serie de procedimientos en Berazategui.
Finalmente, el supuesto eslabón superior de la banda fue procesado por el juez Aguinsky, resolución confirmada por la Cámara de Apelaciones en lo Penal Económico.
“No nos quedamos con la detención de la ‘mula’. Intentamos avanzar sobre los eslabones superiores. A partir del análisis de los mensajes de WhatsApp logramos avanzar sobre las personas que le daban las órdenes al electricista que había viajado a España”, dijo una fuente judicial.
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