“Último remedio”: la palabra del policía que baleó a Chano
En un escrito, el oficial Facundo Amendolara se defendió en la causa donde está imputado de lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego y por ser funcionario policial
- 4 minutos de lectura'
Facundo Amendolara, el oficial de la policía bonaerense que baleó e hirió de gravedad al cantante Santiago Moreno Charpentier, popularmente conocido como Chano, sostuvo que disparó como “último remedio para salvar su vida ante tan desaforado ataque”.
Amendolara, de 28 años, está imputado de lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego y por ser funcionario policial, delito que tiene prevista una de pena de entre 3 y 15 años de prisión.
Los hechos sucedieron hace un año, el domingo 25 de julio de 2021 a las 23, en la casa donde vivía Chano, en el barrio Parque La Verdad, de Capilla del Señor, en Exaltación de la Cruz.
Esa noche, Amendolara, Vanesa Flores y Mariano Giaccio, que prestaban servicio en la Estación de Policía Parada Robles concurrieron a la casa de Chano tras una llamada del personal de seguridad del barrio Parque La Verdad. En el lugar estaban Marina Charpentier, la madre del músico, y un médico psiquiatra de la empresa de medicina prepaga OSDE. El cantante sufría un “cuadro psicótico” con “excitación psicomotriz” por probable consumo de sustancias psicoactivas.
LA NACION tuvo acceso al escrito que Amendolara, representado por el abogado Fernando Soto, le entregó al fiscal Alejandro Irigoyen, a cargo del expediente, para que sea tenido en cuenta como su declaración indagatoria.
“El doctor Gonzalo Caliguri [el psiquiatra de OSDE] nos contó que vio cómo Chano amenazaba con matar a su madre con el cuchillo que tenía en la mano, abalanzándose contra ella, mientras la insultaba y la echaba de su casa”, recordó el policía en su declaración indagatoria.
Amendolara sostuvo que, ante el cuadro de salud de Chano, Caliguri dispuso la internación inmediata de Chano y que, para poder hacer el traslado, necesitaba la colaboración de los uniformados.
Los policías, según el imputado, trataron de convencer a Chano para que se subiera a alguna de las tres ambulancias que habían arribado al lugar. Pero, se vieron obligados a ingresar en el jardín del inmueble porque la madre, del músico, entró en la casa sin su autorización.
Según el imputado, en ese momento, Chano salió y se paró en la tarima de cemento del hall de ingreso. “Tenía puesta una campera y la mano derecha la tenía dentro del bolsillo. Con la mano izquierda nos hacía señas para que nos fuéramos”, recordó Amendolara.
Chano, según se desprende de la declaración indagatoria, se enfureció cuando escuchó a su madre decirle: ´Calmate, tenemos ya un lugar en el Otamendi”. Fue en ese momento, dijo Amendolara, que el músico sacó un cuchillo entre sus ropas y amenazó con matar a todos.
El imputado sostuvo que Chano, primero, comenzó a correr a su compañero con el cuchillo en la mano. “Pero, poco antes de llegar a la puerta de salida giró su cabeza y me vio. Yo había quedado alejado y solo, entre el cantero con las plantas quemadas y el ligustro perimetral, por lo que no podía acceder a la salida. Cuando me vio, vino corriendo hacia mí, empuñando en alto la cuchilla mientras me gritaba, totalmente alterado, ´Te voy a matar, te voy a matar´. Comencé a retroceder rápidamente sin sacarle la mirada mientras desenfundaba mi arma reglamentaria y le gritaba ´¡Tira el cuchillo!, ¡Tira el cuchillo!´, cuidando no caerme mientras corría hacia atrás, porque estaba todo embarrado por las lluvias de los días anteriores y porque no podía ver bien, ya que no había luz en el jardín”, agregó.
Amendolara sostuvo que el músico se le acercaba cada vez más. “Cuando estuvo aproximadamente a un metro y medio de distancia, ya a punto de alcanzarme con la cuchilla, le disparé como último remedio para salvar mi integridad física, para salvar mi propia vida, ante tan desaforado ataque. Chano recibió el disparo en la zona del abdomen, cayó hacia adelante sobre el pasto, con el cuchillo en la mano, mientras seguía gritando que me iba a matar. Lo miré a Giaccio y le dije: “¡No tuve otra, Jefe!” ¡No tuve otra!”, afirmó en el escrito el imputado.
Antes de recordar los hechos, Amendolara hizo un relato de su vida y de su carrera en la policía bonaerense. Recordó tener un legajo intachable y enumeró las distinciones y los reconocimientos que le dieron sus superiores.
“Todas las pruebas demuestran que Chano estaba totalmente fuera de sí, que atacó al oficial Amendolara y casi lo mata. Cuando disparó [el policía] lo hizo para defenderse y porque no tuvo más remedio. El juez no lo sobreseyó porque dijo que faltaba indagarlo y como hace un año no lo llaman, hicimos una presentación que tiene la misma validez que la indagatoria, formulando su declaración. Estamos volviendo a requerir su inmediato sobreseimiento”, sostuvo a LA NACION Soto tras presentar un escrito.
Otras noticias de Santiago "Chano" Moreno Charpentier
Más leídas de Seguridad
Tragedia familiar. Un padre y su hija murieron tras caer a un arroyo en medio de una pelea
Drama en Mendoza. Murió un hombre que fue baleado por su madre anciana porque “no podía cuidarlo más”
40 segundos de horror. El violento ataque a cuchillazos de un hombre a una mujer en una pizzería de Núñez
Tiroteo en Villa Lugano. Un policía de la Ciudad recibió un balazo en el cuello mientras perseguía a un sospechoso