Tiene 19 años. Detienen al hijo del intendente de Baradero acusado del crimen de un empresario en agosto
Al encontrar el cuerpo el empresario porcino, el mismo tenía un impacto de bala en la espalda, las manos atadas y la cabeza cubierta
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LA NACIONJosé María Costa
El mediodía en el partido bonaerense de Baradero se vio convulsionado luego de que fuese detenido el hijo del intendente tras ser acusado de ser una de las cuatro personas que participó del crimen de un empresario rural en agosto pasado.
Por disposición la fiscal María del Valle Viviani, titular de la UFI N° 7 de San Pedro, fue apresado Felipe Sanzio, de 19 años e hijo de Esteban “Tito” Sanzio. Para la funcionaria judicial, el joven formó parte del grupo de personas que cometió el crimen de Gustavo Desimone el 30 de agosto pasado.
Las detenciones fueron llevadas a cabo en las últimas horas por personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) Zárate-Campana, por pedido de la fiscal. El crimen fue cometido el penúltimo día agosto pasado, cuando la víctima fue asaltada por delincuentes en su vivienda del barrio Colonia Suiza, a metros de la ruta provincial 41, en Baradero, en el norte de la provincia de Buenos Aires. Los delincuentes se movilizaban en un auto marca Volkswagen, modelo Bora que también fue secuestrado hoy.
Cuando fue descubierto el crimen, el cuerpo del empresario dentro de su vivienda tenía un impacto de bala en la espalda, las manos atadas y la cabeza cubierta. Además, en el lugar faltaba una importante suma de dinero.
Además del hijo del mandatario peronista, fueron arrestados otros dos jóvenes: Matías Brey y Constantino Fernández. En tanto, el cuarto acusado ya se encontraba detenido en Zárate, pero por otra causa y fue identificado como Ramiro Rey Vaccarezza.
De acuerdo a los voceros, dos de los sospechosos fueron detenidos en Baradero y otros dos en Zárate, donde Rey Vaccarezza ya estaba preso en una sede policial desde el 6 de septiembre por otro caso de robo.
Consultados por LA NACION, fuentes a cargo de la investigación explicaron que las tres detenciones se dieron porque “hubo muchos indicios que surgieron de una declaración testimonial y que se fueron corroborando todos los dichos de este testigo”.
La principal línea de investigación judicial se basa en que Fernández, que tiene una agencia de autos y motos en la zona, fue el entregador de Desimone y que los que efectuaron el robo y crimen fueron Sanzio, Brey y Rey Vaccarezza.
“El testigo contó que Fernández fue quien les dio el dato para cometer el hecho, haciendo referencia a que la víctima tenía dinero y mostrándoles desde su celular fotos del lugar en donde tenían que cometer el hecho. Además, les dijo que la víctima vivía solo y les mostró fotos del frente de la casa y de la de la persona que vivía allí y les indico cómo ingresar”, explicaron los investigadores.
“Luego refirió que pudo ver los dólares que fueron sustraídos a Desimone, los cuales estaban en poder de los detenidos dentro de una bolsa negra”, sumó el testigo, según pudo saber LA NACION.
Además de la detención, los efectivos secuestraron dinero en efectivo: pesos, dólares, reales y euros. También confiscaron teléfonos celulares, vestimentas a medio quemar, cartuchos de escopeta y otras municiones.
Tras la detención, los tres jóvenes son investigados como coautores de “robo agravado por el uso de arma de fuego y por ser cometido en poblado y en banda” y “homicidio criminis causa” -matar para que el robo quede impune- mientras que a Fernández se lo imputó como “partícipe necesario” del robo solamente.
Además, los pesquisas intentan determinar si un robo similar, pero ocurrido en San Antonio de Areco 15 días antes, también fue perpetrado por los jóvenes. “Los tres jóvenes están en una situación de consumo problemático de drogas”, explicaron a LA NACION fuentes judiciales.
“En el caso del robo de Areco, que fue anterior, se pudo corroborar que Sanzio utilizó una tarjeta robada a la víctima para cargar combustible en un auto familiar que es conocido por todos en la ciudad”, sumaron los investigadores.
Felipe Sanzio es el mayor de los cinco hijos que tiene Esteban “Tito” Sanzio, un dirigente metalúrgico que saltó a la política provincial y desembarcó en la intendencia de Baradero en 2019. El 22 de octubre pasado, el dirigente gremial fue reelecto en su cargo con más del 55% de los votos.
Tras la detención de su hijo, Sanzio emitió un comunicado en el que expresó: “Habiendo sido informado de la detención de mi hijo Felipe Oscar Sanzio. Solo puedo manifestar la perplejidad por la noticia”.
“Desconozco por completo las razones que generaron la diligencia judicial, pero tengo plena confianza en su inocencia”, suma el escueto texto dirigido a “La comunidad de Baradero” que cierra: “No puedo aportar más información por desconocer el contenido de las actuaciones judiciales”.
Por José María Costa
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