"Si yo era condenado, era hombre muerto", dijo el médico que mató al ladrón
El médico Lino Villar Cataldo, que esta tarde fue declarado no culpable de homicidio en un juicio por jurados en San Martín rompió el silencio en forma exclusiva esta tarde en el programa Café de la tarde, por LN+. Dijo que con él "se hizo justicia como corresponde", apoyó el juicio por jurados como la forma de acceder a un juicio justo para "los inocentes como yo" y aseguró que "si era condenado, yo era hombre muerto".
En una extensa charla con el panel de Café de la tarde, Villar Cataldo se refirió a sus sensaciones en las diversas etapas del juicio, habló también de su futuro y de las amenazas que sufrió su familia. El médico culminó declarado inocente en un juicio por jurados que se desarrolló durante esta semana, en el que se dirimía su culpabilidad por el asesinato a tiros de Ricardo "Nunu" Krabler, un delincuente que intentó robarle el auto en el mes de abril de 2016.
En el diálogo, el médico contó sus sensaciones al finalizar el juicio: "Termina hoy el juicio pero la carga que yo sigo siento es muy difícil sobrellevar. Fueron tres años de sufrimiento impresionante y creo que mi vida no va a volver a ser la misma que antes", sentenció.
A continuación, Cataldo defendió su inocencia: "Lo único que hice fue defenderme y salvar mi vida, pero hay otra persona que murió, entonces yo como médico que me dedico a salvar vidas, las cosas en la vida han cambiado, para mí y para mi familia".
El juicio por jurados
En relación a lo que piensa de la metodología del juicio por jurados, que fue la que finalmente determinó su inocencia, el médico declaró: "Tenía más confianza en este tipo de juicios porque la justicia ordinaria no actuaba como tenía que ser, había un ensañamiento hacia mi persona".
A continuación, expresó una frase contundente: "Las personas inocentes como yo tienen que pedir el juicio por jurados, porque la gente humilde sabe lo que un inocente como yo sufre".
La decisión de los jueces "fue realmente extraordinario",para el doctor. "Sentí que era no solo algo bueno hacia mi persona sino hacia la sociedad, para que los jueces ordinarios obren con criterio y de acuerdo a lo que piensa la ciudadanía. La gente está cansada y temerosa de todo este estado de inseguridad que vivimos".
Las amenazas
Cuando los periodistas del panel le preguntaron al facultativo sobre si se sentía tranquilo, Cataldo respondió: "No estoy tranquilo. Habrán visto el reportaje a la mamá del fallecido y que dijo: 'No tenemos nada que ver si lo matan al doctor, o algún familiar o hijo del doctor'. Sigue amenazando a pesar de todo. Sé que mi vida no va a estar tranquila de acá en adelante".
A pesar de esto, el recientemente declarado no culpable, dijo que no pensaba mudarse a otra localidad. "Yo sufrí a los 14 años el primer destierro y es lo peor que le puede pasar a una persona. Tengo mis pacientes acá, mi hospital está en Buenos Aires. Voy a seguir trabajando para devolverles a mis pacientes todo el cariño que me dieron. Es muy difícil abandonar el hogar -dijo-. Ahora tengo 64 años, seguir corriendo no es nada fácil".
"Voy a solicitar con mi letrado seguir con custodia porque está muy peligroso", sentenció, en relación a las amenazas recibidas, que, según él, también fueron dirigidas a sus hijos.
En la cárcel era "hombre muerto"
En el momento de agradecer a los que lo estuvieron con él en este momento, Cataldo se refirió a sus cuatro hijos, su esposa, sus dos nietos y sus dos hermanos. Pero mantuvo un párrafo aparte para su abogado Diego Szpiegel. Dijo que a dicho letrado "le debo la libertad y le debo la vida", porque "yo condenado era un hombre muerto".
"Soy una persona de 64 años, con tres stent, con diabetes, hipertensión, anticoagulado. En prisión iba a ser insoportable, iba a vivir muy poco tiempo. Y se me pasó por la cabeza terminar en prisión, hasta último momento uno no sabe lo que puede pasar", agregó.
El futuro
"Salvar mi vida es algo lógico y natural. El ser humano se defiende siempre ante un ataque y si corriera peligro la vida de mis hijos sí los defendería", dijo el médico cuando le preguntaron acerca de si volvería a hacer lo mismo en un futuro.
A continuación, señaló que continuará portando armas: "La tenencia está permitida por la Constitución Nacional y la legislación de Argentina. No estoy cometiendo ningún delito, porque soy usuario legítimo".
A pesar de eso, Catado señaló que nunca volvió a empuñar un arma después de ese hecho.
Finalmente, cuando le preguntaron sobre cómo iba a descansar por la noche, el médico dijo: "No me va a ser fácil dormir esta noche, la adrenalina que tengo en este momento no creo que me deje descansar bien. Igual, voy a estar con la sensación de que lo que yo tanto deseaba era que se haga justicia y se hizo justicia, como corresponde".
LA NACION
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