San Isidro: una jueza rechazó excarcelar a un motochorro colombiano
La semana pasada, Harold Mora Sierra, un ciudadano colombiano, protagonizó junto con tres cómplices un ataque de la modalidad motochorro en Villa Martelli, en Vicente López. Pero a diferencia de lo que sucedió con su compatriota Jair Stevens Jurado Mora que fue liberado por un juzgado en lo criminal y correccional porteño después de firmar una probation y aceptar pagar 700 pesos como resarcimiento a la víctima del robo ocurrido en Caballito, Mora Sierra no fue excarcelado.
La decisión fue tomada por la jueza de Garantías de San Isidro Andrea Rodríguez Mentasty, según informaron a LA NACION fuentes judiciales. La magistrada argumentó, agregaron los informantes, que Mora Sierra no tenía arraigo en la Argentina para recibir el beneficio de la excarcelación.
"Durante el trámite de la causa, los funcionarios judiciales descubrieron que Mora Sierra tenía un pedido de averiguación de paradero por un hecho similar ocurrido en mayo pasado en jurisdicción de la ciudad de Buenos Aires", afirmaron las fuentes consultadas.
El ataque de motochorros por el que fue detenido Mora Sierra ocurrió el 23 de enero pasado, un día después del hecho por el que fue apresado su compatriota Jurado Mora. Según fuentes judiciales, el imputado integraba una banda de cuatro delincuentes que en dos motos intentaron sustraer las mochilas de ejecutivos de la empresa Arcos Dorados, firma que tiene la franquicia de McDonald's, cuando llegaban a una oficina de Villa Martelli.
"Los vigiladores de Arcos Dorados pudieron detener a Mora Sierra y después llamaron a la policía bonaerense. Sus cómplices pudieron escapar", agregaron los informantes.
La decisión de la jueza Rodríguez Mentasty fue apelada por la defensa del ciudadano colombiano y en el caso tomó intervención la Sala de Feria de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro, integrada por los jueces Celia Vázquez, Luis Cayuela y Leonardo Pitlevnik.
El tribunal de segunda instancia sostuvo que de otorgar la excarcelación se debía fijar una caución real para asegurar la permanencia en el país del imputado mientras se desarrolla el proceso, entre otras pautas, al considerar de que no tiene arraigo y que mintió cuando sostuvo que había llegado al país tres meses atrás.
"El imputado sostuvo que llegó hace tres meses, pero en mayo fue imputado en un causa similar por la que fue detenido en Villa Martelli", sostuvo una fuente del caso.
En las últimas horas, la jueza Rodríguez Mentasty fijó una fianza (caución real) de $15.000 y la obligación de que el imputado se presente una vez por semana en el juzgado.