Quieren la "máxima pena" por el homicidio de Berardi
Los padres de Matías, que fue asesinado por sus captores, quieren que los acusados queden presos de por vida
"La única manera de poder rehacer nuestras vidas es que estas personas queden presas de por vida o que tengan la pena máxima que existe en la Argentina", fue el deseo de María Inés Daveiro antes de que se iniciara el juicio por el secuestro y asesinato de su hijo Matías Berardi, ocurrido en septiembre de 2010.
Mientras que Juan Pablo Berardi, el padre del adolescente, lamentó: "No lo vamos a superar".
La primera jornada del juicio contra los 11 imputados por el secuestro seguido de muerte de Matías Berardi comenzó a las 11.30 de ayer en el Tribunal Oral Federal (TOF) N° 3 de San Martín, situado en Pueyrredón 3734 de esa ciudad.
Los acusados guardan una estrecha relación familiar. A Richard Fabián Souto, de 45 años, se le atribuye ser el autor material del crimen y el dueño del galpón donde Matías estuvo en cautiverio al lado de su herrería, y a su concuñado, Néstor Facundo "Chino" Maidana, de 24, se lo acusa de haber secuestrado al chico, realizar llamadas extorsivas a la madre y trasladarlo al lugar donde estuvo en cautiverio.
A la esposa de Souto, Ana Cristina Moyano, de 40 años, su hija Jennifer Stefanía Souto, de 21, otra hija de 17 cuya identidad se reserva por ser menor y su cuñada Celeste Mónica Moyano, de 29, se las acusa de ser coautoras por vigilar a Berardi mientras estaba en cautiverio y gritar que era un ladrón cuando se soltó e intentó una huida.
También están acusados por coautoría Federico Esteban Maidana, de 29 años, hermano del "Chino"; Elías Emanuel Vivas; Damián Sack –quien tenía el VW Gol Negro que participó del asalto al camión blindado en Garín en el que murieron dos policías–; Gabriel Raúl "Larry" Figueroa, y Gonzalo Hernán Álvarez.
Unos cincuenta allegados a la familia Berardi ingresaron a la sala, mientras que del lado de los acusados sólo lo hicieron unos diez. Aunque desde temprano, varios estuvieron en la puerta del tribunal para recibir a los imputados.
Durante la audiencia se leyeron el requerimiento de la querella y el del fiscal federal de Campana Orlando, Jorge Bosca, que fueron coincidentes entre sí. Luego se leyeron tres requerimientos de la fiscalía sobre otros dos imputados en la misma causa y luego sobre tres de los acusados –Souto, Ana Cristina y Néstor Facundo Maidana–, a quienes se les atribuye un secuestro a un chico de 16 años, un mes antes que el de Matías Berardi, pero en el que debieron liberar a la víctima sin percibir un rescate.
El juicio seguirá mañana con la declaración de los padres de Berardi como testigos.
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