Qué se sabe del caso de Lucas Escalante, el joven que desapareció cuando fue a festejar un triunfo de la selección
Tenía 26 años, era amante de los autos y acudió con un amigo, cuyo cuerpo fue hallado poco después, a una casaquinta con la promesa de nafta gratis; ¿cuántos detenidos hay por este crimen sin resolver?
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LA NACION
Los últimos días tuvieron algunas novedades en la investigación que busca determinar el paradero de Lucas Escalante: el joven que desapareció junto a un amigo (cuyo cuerpo fue hallado semicalcinado) hace cuatro meses en Florencio Varela. Los familiares acusan a la Policía Bonaerense de encubrir a los responsables por las vinculaciones que hay entre esta fuerza y los sospechosos del crimen.
¿Quién es Lucas Escalante?
Al momento de su desaparición, Escalante tenía 26 años y vivía con sus padres, Marcela e Hilario, en Florencio Varela. Trabajaba en el negocio familiar, una constructora que levantó varios edificios en esa zona y en Berazategui. Tenía dos hermanas, Lorena y Romina, quienes completan el núcleo familiar que hoy encabeza las marchas por su aparición. Al hablar de él, lo describen como un joven “inocentón”, que “se daba con todos”.
En sus redes sociales, podía apreciarse que su máxima pasión eran los autos. De hecho, buena parte de sus publicaciones —que se remontan atrás en el tiempo— lo mostraban junto a vehículos de alta gama. En una de ellas, está de cuclillas junto a un BMW azul, el auto que condujo ese 9 de diciembre en el que se lo vio por última vez.
¿Qué se sabe hasta ahora de la desaparición de Lucas Escalante?
Aquella noche, la Argentina había derrotado a Países Bajos por los cuartos de final de la Copa del Mundo. Luego de ver la victoria por penales, Escalante le mandó un mensaje a un amigo, Lautaro Morello, de 18 años, y salieron juntos a festejar. Lo había conocido durante una relación que tuvo con su prima, y los unía el gusto por los rodados: Morello iba al colegio de noche y, durante el día, limpiaba autos con una hidro lavadora que le había alquilado a un vecino.
La invitación de Escalante a su amigo incluía una parada previa dentro de Florencio Varela para conseguir combustible gratis: “¿Te quedás ahí?”, le preguntó cuando Morello le contó que estaba en su casa del barrio El Bosque, y añadió: “Me iba a quedar en casa, ¿viste? Pero hay un chabón que me da nafta. La tengo que ir a buscar hasta [el barrio] el Alpino, un poquito más lejos. Pero bueno... la nafta gratis sirve”. Estos audios de WhatsApp hoy son parte central de la investigación.
Detrás de esta promesa había un posible negocio. Según reconstruyeron las fuentes policiales, Escalante podría haber participado en la venta de vales de combustible gratuitos que la Policía Bonaerense recibe para mantener los patrulleros. El combustible le era suministrado por Cristian y Maximiliano Centurión, hijo y sobrino respectivamente del comisario mayor bonaerense Francisco “Coco” Centurión, en cuya casaquinta Escalante y Morello estacionaron esa noche.
Tal como le había contado el joven que hoy está desaparecido a su amigo, los Centurión lo habían contactado por Instagram para ofrecerle los vales de combustible. “El pibe me dijo: ‘Solamente con vos hacemos esto’. Listo, me re sirve”, le había comentado Escalante, poco antes de pasarlo a buscar la noche que desaparecieron.
Otra de las hipótesis que barajan los investigadores es que el combustible era un señuelo para atraer al joven y poder robarle el BMW azul con el que se había fotografiado. “Cualquiera le podía entrar solo con hablar de autos. Quizás le dijeron: ‘Ahora nos debés tanta plata de los vales, tenés que hacer esto por nosotros’. Eso quizás causó una pelea... no sé”, intentó reconstruir su hermana Lorena al conversar con LA NACION.
Los hechos que pudieron ser probados durante la investigación es que pasadas las diez de la noche el BMW azul en el que viajaban Escalante y Morello estacionó en la casaquinta de los Centurión, en el barrio semirural La Capilla, y esa fue la última vez que se supo de ellos. Al día siguiente, mientras sus familiares comenzaban los reclamos para pedir por su aparición, encontraron el automóvil incendiado al costado de la ruta provincial 53.
La semana siguiente, el 15 de diciembre de 2022, cerca de las 21.30, hallaron el cuerpo semicalcinado de Morello, a la vera del tramo en construcción de la autopista del Buen Ayre, en Guernica, partido de Presidente Perón. Las fuentes policiales especulan que era “secundario” en la situación que le costó la vida, ya que no conocía a los sospechosos del crimen.
Ofrecen una recompensa a quien brinde información sobre el paradero de Lucas Escalante
Desde entonces, nada se sabe del paradero de Escalante y el Programa Nacional de Recompensas fija una suma de $5.000.000 para quienes puedan aportar información que ayude a esclarecer qué pasó con el joven, cuya familia realiza marchas periódicamente para pedir por su aparición.
¿Cuántos detenidos hay por el caso de Lucas Escalante?
Tanto Cristian como Maximiliano Centurión fueron detenidos con prisión preventiva poco después del hecho, por haber sido las últimas personas que vieron a los jóvenes con vida.
Además, la filmación de una cámara de seguridad en una estación de servicio de Florencio Varela muestra a Cristian Centurión cerca de las 0.30 del 10 de diciembre cargando nafta en un bidón blanco. La sospecha policial es que este pudo haber sido utilizado para incinerar el auto de Lucas y el cadáver de Lautaro.
El primer mes de la investigación estuvo a cargo de la Policía Bonaerense, de la que las familias de las víctima recelaban por las vinculaciones con los sospechosos. Es que, además de ser el hijo de un comisario mayor de esa fuerza, Cristian Centurión, de 24 años, acudía a la escuela policial Juan Vucetich para poder integrarse a sus filas.
El presunto encubrimiento del crimen motivó las detenciones de dos integrantes de la Policía Bonaerense: el efectivo Ramiro Yair Forchinito y el comisario Sergio Argañaraz. Ambos se desempeñaban en Florencio Varela y se los acusa de no haberle tomado la denuncia a las familias de las víctimas en el día siguiente a su desaparición para encubrir a los Centurión.
Si bien todavía no fue formalmente acusado en el expediente, el comisario mayor Francisco Centurión es parte central en la investigación. Hace algunas semanas, se le secuestró el automóvil oficial que le asignó la fuerza de seguridad provincial en busca de rastros biológicos de las víctimas de este hecho.
Mientras tanto, Escalante sigue desaparecido, en una búsqueda que desde el 15 de enero está a cargo de la Policía Federal.
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