¿Por qué Guillermo Cóppola fue a la cárcel en 1996?
LA NACION
Guillermo Coppola atraviesa un gran momento personal y profesional, pero esto no le impidió en las últimas horas revivir una de las páginas más dolorosas de su vida: su paso por el penal de Dolores, donde ahora están detenidos los 10 rugbiers acusados de matar a Fernando Báez Sosa en Villa Gesell.
El delito que lo llevó 97 días a prisión -67 de los cuales pasó en Dolores- fue tal vez el caso más comentado de 1996: su detención por el hallazgo de una bolsa con 40 gramos de cocaína en un jarrón del departamento que ocupaba en el 10° piso del edificio situado en avenida del Libertador 3540.
El 9 de octubre de ese año, el juez federal Hernán Bernasconi ordenó allanar el domicilio de Coppola bajo la sospecha de que lideraba una banda narco. En el marco de la causa, también fueron detenidos Héctor "Yayo" Cozza, Tomás Simonelli, Claudio Coppola y Alberto "El Conejo" Tarantini.
Los días de Coppola en prisión fueron duros. "Sabía bien que la de Dolores era una cárcel peligrosa. Con paredes de 45 grados, tétrica, fría -dijo en diálogo con LA NACION-. La primera noche llamé a mi hermano para decirle que no iba a poder soportar esa vida. Lo peor fue que me acosté en un colchón lleno de chinches y al otro día estaba lleno de picaduras y toda la piel llena con sarpullido".
Ni siquiera Diego Armando Maradona, su cliente estrella, pudo acompañarlo en este periplo. "Diego, el 31 de diciembre de 1996, me vino a ver a la noche y le dijo al jefe del Penal. '¿Si le pego a usted, me mete preso y puedo pasar la noche con mi amigo?’", recordó "Guillote" años atrás, entre lágrimas.
El 15 de enero de 1997 recuperó la libertad cuando el juez federal Carlos Liporaci declaró la falta de mérito para procesar o sobreseerlo por los dos delitos en los que la Sala II de la Cámara Federal porteña lo investigaba.
Coppola apuntó por ese entonces contra el juez Bernasconi y aseguró que no lo investigó solo a él. "En el expediente estaban nombrados Diego Maradona, Marcelo Tinelli y Luis Miguel, un delirio. Para mí, paró porque con lo mío revolucionó los medios y dijo 'llegué", agrega.
En 2002, Bernasconi fue condenado a nueve años y medio de prisión por un tribunal de la ciudad de Buenos Aires, que lo halló culpable de los delitos de falsedad ideológica, adulteración de documento público y asociación ilícita en perjuicio de "ricos y famosos". En la sala de audiencias estaban presentes Maradona, Tarantini y Coppola.
El caso Coppola ocupó a dieciocho jueces, produjo ocho detenidos que fueron alojados durante 519 días y se efectuaron innumerables traslados de funcionarios judiciales, policiales y de apresados. En total, demandó al Estado un costo aproximado de casi US$150.000.
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