Patrullajes aéreos: las fuerzas federales incorporaron tres helicópteros
La Gendarmería y la Prefectura reforzarán los patrullajes aéreos con helicópteros Augusta Bell 206 B1 que fueron entregados el viernes por el Ministerio de Defensa. Se trata de tres unidades que fueron adquiridas al Cuerpo de Carabineros de Italia y que fueron puestas en servicio luego de un trabajo en la Fábrica Argentina de Aviones (Fadea).
Son helicópteros livianos que las fuerzas de seguridad utilizarán para las tareas de vigilancia de frontera, golpes de mano en pistas ilegales y apoyo a la comunidad, especialmente en el sur. Los gendarmes utilizaban hasta el momento solo los Eurocopter AS 350, con dos bases fuera de la sede de la aviación de la Gendarmería ubicada en Campo de Mayo.
Uno de esos dos núcleos operativos utiliza el aeródromo de General Mosconi, a pocos kilómetros de la ciudad salteña de Tartagal y que permite a los gendarmes el patrullaje aéreo en zonas conflictivas de la frontera norte, como en las cercanas localidades salteñas de Salvador Mazza y Aguas Blancas. En esa área el objetivo primario es el relevamiento de posibles pistas clandestinas y la vigilancia del ingreso de vehículos y personas por pasos fronterizos no habilitados.
Hace 20 años, esa zona de General Mosconi, cuya economía se sustenta con la explotación de hidrocarburos, tenía otra realidad para la Gendarmería. Allí ocurrieron las más importantes confrontaciones con piqueteros, como la refriega que dejó más de 20 gendarmes heridos de bala en junio de 2001. La situación hoy es diferente y General Mosconi representa un puesto de avanzada para el trabajo de los helicópteros de la Gendarmería, que se verán reforzados con la llegada de dos unidades Augusta Bell 206 B1.
En el norte los helicópteros de la Gendarmería también son utilizados para movimientos contra pistas clandestinas cuando se da la oportunidad -luego de trabajos de inteligencia y de una paciente espera en los alrededores- de atrapar alguna de las avionetas que transportan drogas. Una operación de esas características se registró en 2011 en Santiago del Estero, cuando el Eurocopter AS 350 buscó evitar el despegue de la aeronave y estaprovocó su caída al impactarlo.
Luego se sucedieron otros golpes de mano aerotransportados en pistas ilegales que tuvieron resultados positivos. Los Eurocopter AS 350, al igual que estos nuevos Augusta Bell 206 B1, pueden transportar al piloto, copiloto, un mecánico y dos tiradores en esos procedimientos antidrogas, un número de efectivos suficientes frente a la situación narco local.
Aquí no hay bandas con capacidad de fuego como las expuestas por los carteles brasileños -que operan en el lado paraguayo de la frontera- y mucho menos con el poderoso despliegue paramilitar exhibido por los grupos mexicanos. Frente a un operativo de las fuerzas federales, los narcos argentinos optan por entregar rápido sus armas y evitar el enfrentamiento. Saben que tendrán una pena máxima de cuatro años de prisión, con muchas chances de conseguir arrestos domiciliarios. Por eso los helicópteros livianos son útiles en esas misiones.
En el sur la situación operativa de los helicópteros de la Gendarmería es completamente diferente al trabajo realizado en el norte. El aeropuerto de Esquel es la base principal para los Eurocopter AS 350 y la misión prioritaria es el apoyo a la comunidad, especialmente en épocas de nevada, cuando varias localidades quedan aisladas por vía terrestre. Eso ocurre muchas veces en los alrededores de Río Mayo, por ejemplo, y los helicópteros de la Gendarmería son desplegados allí para dar asistencia médica y de alimentos en establecimientos rurales.
La Prefectura emplea para los rescates en alta mar helicópteros más pesados y de mayor autonomía, unos 300 kilómetros, como los Eurocopter 225 Super Puma, con base en Mar del Plata. Las últimas dos unidades habían sido incorporadas en febrero de 2016.
El viernes los prefectos recibieron un helicóptero Augusta Bell 206 B1 a partir del acuerdo entre los ministerios de Seguridad y de Defensa. Ese aparato sería utilizado en la vigilancia de la Hidrovía, una de las responsabilidades de la Prefectura.
"Trabajamos en conjunto y coordinadamente para dar mayores respuestas a la sociedad argentina" afirmó el ministro de Defensa, Agustín Rossi, al encabezar junto al jefe del Gabinete, Santiago Cafiero, la entrega de las aeronaves al Ministerio de Seguridad.
En esa misma línea se manifestó la ministra de Seguridad, Sabina Frederic: "Destacamos la coordinación que logramos hacer con el Ministerio de Defensa en este y en otros temas. Creemos y apostamos al trabajo interministerial. La utilización de estos recursos, de éstos helicópteros multipropósito sirven, además, para reforzar la seguridad en todo el territorio nacional".
Rossi, por su parte, destacó también el trabajo de puesta en servicio de estas unidades: "La tarea que se está haciendo en Fadea es enorme, de mucha eficiencia y profesionalismo". Otros aparatos similares entraron en servicio en los últimos años en el Comando de Aviación del Ejército.
Los helicópteros Agusta Bell 206 B1 llegaron en 2018 luego de concretarse el acuerdo con Italia, convenio que había empezado a tomar forma con conversaciones iniciadas en 2010. La operación se firmó en 2013, durante la primera gestión de Rossi como ministro de Defensa, a un costo de algo más de dos millones de euros y la entrega de tres aviones G222 que el Ejército tenía fuera de servicio a cambio de una veintena de helicópteros que debían ser reparados en Fadea.
Temas
Otras noticias de Fuerzas de Seguridad
- 1
El homicidio de Nora Dalmasso: quién es Roberto Barzola, el nuevo sospechoso en la mira de la Justicia
- 2
Complicidad y descontrol. Detuvieron a diez policías en Rosario por robos y allanamientos ilegales
- 3
“Pizza para Juan”: para hacer inteligencia de las casas que iban a robar en San Isidro, una banda usaba falsos deliverys
- 4
Recapturaron a dos de los 17 presos que se escaparon de una alcaldía de la Policía de la Ciudad