Nueve años después, confirmaron las sentencias por el homicidio de Candela Sol Rodríguez
LA NACION
Casi nueve años pasaron para que, al fin, haya sentencias firmes por el crimen de Candela Sol Rodríguez. El Tribunal de Casación penal bonaerense confirmó las tres primeras sentencias dictadas por el secuestro y asesinato de la chica de 11 años, ocurrido en agosto de 2011 en Villa Tesei, partido de Hurlingham.
La Sala IV del máximo tribunal penal bonaerense, integrada por los camaristas Ricardo Maidana, Ricardo Borinsky y Fernando Mancini, confirmó el fallo condenatorio para los tres imputados que en 2017 habían sido juzgados por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3 de Morón.
En el caso de Hugo Elbio Bermúdez, de 63 años, y Leonardo Daniel Jara, de 43, ratificaron sus penas de prisión perpetua como coautores del delito de "privación ilegal de la libertad coactiva seguida de muerte".
Hicieron lo mismo con los cuatro años de cárcel como "partícipe secundario" del hecho para Gabriel Fabián Gómez, de 49. Pero en este caso no hubo unanimidad: el juez Borinsky sostuvo, en disidencia, que no había certeza para declararlo culpable del hecho.
"Son dos degenerados menos para joderles la vida a varias familias. Estoy feliz de que después de tantos años se confirmó la perpetua", dijo a la agencia de noticias Télam Carola Labrador, la madre de la víctima, al enterarse del fallo de Casación.
"A partir de las circunstancias fácticas ciertas y objetivas emergentes de las probanzas valoradas por los juzgadores, conforme se reseñara, luce sólida y contundente la reconstrucción del evento delictivo del modo edificado en la sentencia, en particular en cuanto establece la intervención de los inculpados", señala el fallo de Casación, al que tuvo acceso Télam.
En otro párrafo, el juez Maidana afirma que a la "prueba indiciaria" se le dio "un valor certero y acabado" para "tener por verificada la responsabilidad de los acusados Bermúdez, Jara y Gómez en los hechos que damnificaran a Candela Sol Rodríguez".
Los elementos que en su momento el TOC N°3 de Morón ponderó para dictar las condenas en el juicio oral fueron las pruebas de ADN, que demostraron el cautiverio de la niña en la casa de la calle Kiernan 992, de Hurlingham, y que vincularon en el caso a Bermúdez, que también quedó implicado por la quema de evidencias en la casa de su expareja.
Además, peritajes de audio confirmaron que Jara fue el autor de un llamado con un mensaje referido a Carola Labrador, la madre de Candela, en el que dijeron: "Hasta que esa c… no devuelva la guita no la va a ver nunca más, que le pregunte al marido dónde dejó la guita".
En los fundamentos de aquella sentencia, del 20 de septiembre de 2017, los jueces del TOC N°3, Diego Bonanno, Raquel Lafourcade y Mariela Moralejo, sostuvieron que el móvil de la privación ilegal de la niña fue un "ajuste de cuentas contra el padre [de Candela], por algún ilícito que este cometiera". Se referían a Alfredo Rodríguez, que en el momento del secuestro de su hija cumplía condena por piratería del asfalto.
Fueron nueve años de lucha. Cuando la encontré tirada a mi hija en el descampado, le prometí que iba a hacer Justicia. Por eso hoy lloro de alegría
Segunda etapa
Por el crimen de Candela habrá un segundo juicio, en el que serán juzgados como "partícipes necesarios" del homicidio el narcotraficante Miguel Ángel "Mameluco" Villalba, de 56 años, actualmente condenado a 27 años de cárcel por una serie de causas por narcotráfico en la villa 9 de Julio, de San Martín; el expolicía bonaerense Sergio Chazarreta, de 52; el informante policial Héctor "Topo" Moreyra, de 50, y el carpintero Néstor Altamirano, de 59.
Para el fiscal de Morón Mario Ferrario, Villalba lideró la organización criminal que cometió el secuestro y crimen de Candela.
Estaba previsto que el debate fuera este año, pero por la pandemia del Covid–19 se hará recién en 2021.
Con respecto al móvil del crimen, para la fiscalía se combinaron dos cuestiones: una, que Villalba se quiso vengar del padre de la niña, Alfredo Rodríguez, porque creyó que él había "dateado" a la Policía Federal para que lo detuvieran, 13 días antes de la desaparición de la niña.
Y la otra fue que la organización criminal habría buscado ajustar cuentas con el padre de la víctima –que, como se dijo, en ese momento estaba detenido por piratería del asfalto– por una deuda económica.
Además, tres importantes oficiales superiores de la policía bonaerense –los exjefes de la fuerza Hugo Matzkin y Juan Carlos Paggi, y el exjefe de Investigaciones Roberto Castronuovo– fueron indagados el año pasado por "encubrimiento agravado" en el caso Candela. Aunque luego fueron sobreseídos, la Fiscalía General de Morón apeló.
Estoy feliz porque después de tantos años se confirmó la perpetua para estos degenerados
Candela fue vista con vida por última vez el 22 de agosto de 2011 en Villa Tesei, cuando esperaba a unas amigas para ir a la reunión del grupo de scouts al que pertenecía.
El 28, la tía de la niña recibió una llamada extorsiva atribuida a Jara. Finalmente, el 31 de agosto de 2011 el cuerpo de la víctima apareció en una bolsa, al costado de la colectora de la Autopista del Oeste, a unas 30 cuadras de su casa.
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