Negro Sombra, uno de los secuestradores más peligrosos, obtuvo la libertad condicional

Sergio Leiva, conocido en el mundo del hampa como Negro Sombra y señalado como uno de los secuestradores más peligrosos de la historia penal argentina, cumplía una pena única de 34 años de prisión. Lo condenaron por los raptos de Ernesto Rodríguez, padre del empresario Jorge "Corcho" Rodríguez, y de Mirta Fernández, una mujer a la que le amputaron un dedo y la violaron durante su cautiverio, cometidos entre 2003 y 2004. La sentencia expirará el 24 de abril de 2031. Pero como técnicamente cumplió las dos terceras partes de condena y tiene buena conducta en prisión, obtuvo la libertad condicional. Lo novedoso es que sus movimientos serán controlados por GPS a través de una tobillera electrónica que tiene prohibido sacarse.

Así lo informaron a LA NACION fuentes judiciales y del Servicio Penitenciario Federal (SPF). La decisión fue tomada por la jueza Silvina Mayorga, integrante del Tribunal Oral Federal (TOF) N° 1 de San Martín y que tienen la de controlar la ejecución de la pena en el caso del Negro Sombra.

La libertad condicional fue solicitada por el defensor ofical Alejandro Arguilea. "Leiva cumplió las dos terceras partes de la pena y los informes elevados por el SPF, por unanimidad, fueron favorables. En conducta tenía un 10 y en concepto la calificación fue buena", explicaron fuentes judiciales.

La idea de controlar al Negro Sombra por medio de una tobillera electrónica surgió desde el Ministerio Público Fiscal, representado por el fiscal federal Marcelo García Berro y de la jueza Mayorga.

"Seguramente esta decisión de que sea controlado por GPS con la tobillera electrónica será apelada por la defensa de Leiva. Pero se decidió el monitoreo por la peligrosidad de los hechos por los que fue condenado", afirmaron los voceros judiciales consultados.

Además del seguimiento satelital, el Negro Sombra deberá cumplir con varias obligaciones impuestas por la jueza Mayorga. Tiene prohibido salir del país, no puede acercarse a sus víctimas debe conseguir trabajo y no puede alejarse de su domicilio a una cierta distancia que dictamine la magistrada.

Leiva, de 50 años, fijó domicilio en el partido de Tigre, agregaron los informantes consultados. En 2007, el Negro Sombra estuvo sentado en el banquillo de los acusados en tres juicios oral y públicos. El primero terminó el 26 de abril. El TOF N° 1 lo condenó a la pena de 23 de cárcel por el rato de Fernández, que ahora tiene 49 años.

Los jueces Marta Milloc, Lucila Larrandart y Enrique Manson lo encontraron culpable del delito de secuestro gravemente agravado. os agravantes fueron haberse logrado el propósito de obtener rescate, por haber participado tres o más personas, por haber causado en la víctima lesiones graves y por haber cometido el delito con violencia e intimidación contra las personas mediante el empleo de armas fuego.

La víctima estuvo cautiva 27 días. fue secuestrada el 19 de agosto de 2003 en Don Torcuato y liberada en Puente Saavedra el 16 de septiembre de ese año. En esa ocasión, su familia pagó 430.000 pesos como rescate.

Cuando llevaba 19 días cautiva fue dormida con una droga mezclada en un té y cuando se despertó se dio cuenta de que le había amputado la primera falange del dedo meñique de la mano derecha. El dedo fue enviado a su familia junto a un video, donde se la veía mutilada sobre la cama.

Anteriormente, los secuestradores enviaron a la familia un cassette de audio con los gritos de la cautiva, mientras era torturada en un pie con un cable conectado a 220 voltios.

Otros de los secuestros por el que fue condenado fue el Ernesto Rodríguez, que fue liberado en San Andrés de Giles después de estar 43 días cautivo. El TOF N° 1 de San Martín le fijó una pena de 15 alos

Ese 2007 también fue condenado a 11 años y seis meses por el secuestro de Francisco Hahner que fue capturado cuando su madre, una ejecutiva de una empresa transnacional, lo llevaba en auto a una escuela de Talar de Pacheco.

Pena única

Si se toma en cuenta la sumatoria de las tres condenas, Leiva recién estaría en condiciones de salir de la cárcel en 2047. Pero en el sistema penal argentino no se aplica la simple adición, sino que los tribunales deben imponer una pena única. En el caso de Leiva fue de 34 años y vencerá el 24 de abril de 2031.

Durante sus años de detención, Leiva estuvo detenido en las cárceles de Ezeiza, Villa Devoto, Rawson, en la desaparecida cárcel de Caseros y en Senillosa (Neuquén), desde donde recuperó la libertad, según informaron fuentes del SPF.

En su defensa, Leiva negó ser el sospechoso que en las distintas grabaciones de las conversaciones telefónicas entre secuestradores y familiares de las víctimas aparecía mencionado como Negro Sombra.

En una audiencia de uno de los juicios que lo tuvo como acusado, Leiva explicó que nunca había estado en la villa San Pablo, de Don Torcuato, cuna de la mayoría de los integrantes de la banda a la que la policía denominó "Los Cortadedos". Dijo que a él lo conocían como Oma de Los Polvorines y no como Negro Sombra. Nadie le creyó.

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