Narcotráfico: sicarios brasileños planificaban el asesinato de un juez argentino
"Dale hermano. Tenemos que solucionar ese problema antes que crezca. Y no tiene que saber nadie. Lo mejor es esperarlo cuando va a trabajar". Ese mensaje fue parte de una serie de chats de WhatsApp entre un preso alojado en el Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza, acusado de homicidios y narcotráfico, y una persona de su confianza, que fue detenida en un control de la Gendarmería Nacional en Misiones el 26 de mayo pasado cuando circulaba en un automóvil que había sido robado en la ciudad de Esquel.
El "problema" al que hacían referencia, según sospechan fuentes de la investigación, era el juez Fernando Verón, del fuero penal de Misiones, y la idea de "esperarlo cuando va a trabajar" tenía como finalidad ejecutarlo con sicarios que, presumiblemente, iban a llegar a la Argentina desde Brasil.
El mensaje fue enviado entre el 10 y el 13 de marzo. En esos días hubo otros más específicos sobre el plan criminal: "Pedí a Brasil. Tres pistolas metra"; "hace un seguimiento estos días cuando sale a trabajar. Lo mandamos hasta un semáforo y chau" , y "loco Andi habló con vos el tema de Verón. Ese hijo de mil...".
El hallazgo de los mensajes no solo habría puesto al descubierto el plan para asesinar al juez Verón, sino también confirmaría la existencia de vínculos de delincuentes argentinos con poderosas organizaciones criminales brasileñas como el Primer Comando Capital (PCC) o la denominada Bala na Cara, bandas que pretenden arraigarse en Misiones para tener un dominio total de la Triple Frontera.
Fuentes de la investigación sostuvieron a LA NACIÓN que el plan criminal ideado para matar al juez Verón, que ahora tiene custodia permanente de la Policía de Misiones, quedó trunco por el cierre de las fronteras y los controles en las rutas que se dispusieron para evitar la propagación del Covid-19.
Allegados al juez Verón, que asumió en 2008, explicaron a LA NACIÓN que el magistrado "tiene miedo, pero el miedo justo y necesario para tomar las medidas de prevención adecuadas". Agregaron que se sorprendió por el plan criminal. "Su vida ya no es normal, va de su casa al juzgado con custodia. Es la primera vez que Verón es amenazado", agregaron sus colaboradores.
Por pedido del juez de Misiones Marcelo Cardozo su colega Federico Villena, a cargo del Juzgado Federal N° 1 de Lomas de Zamora, ordenó allanar el pabellón K del Módulo de Ingreso del Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza, donde está alojado Néstor Fabián Rojas, supuesto ideólogo detrás del plan criminal para atentar contra Verón y conocido por los alias de "el Sicario" o "el Negro".
Verón tuvo a su cargo una causa por un doble homicidio donde indagó a Rojas. Además, según informó el diario El Territorio, espera el juicio oral por otra causa en la que se investiga el asesinato de un narco.
El operativo, encabezado por personal de la Gendarmería Nacional, comenzó el viernes pasado a las 19 y terminó a las 4 del día siguiente. Se analiza ahora la documentación encontrada en el penal.
La primera pista
Además del alojamiento de Rojas fueron allanadas otras cuatro celdas del mismo pabellón donde están alojados cuatro ciudadanos brasileños que habían sido detenidos por la Gendarmería en Misiones el 14 de septiembre de 2019 en el kilómetro 785 de la ruta nacional 14 durante un control vehicular. Viajaban en una Honda HR-V.
Todo lo que sucedió ese día llamó la atención de los gendarmes. Los cuatro brasileños estaban sin ningún tipo de documentación y sin dinero. Cuando los uniformados revisaron el vehículo descubrieron debajo de un asiento siete pistolas. Eran cinco Trabzon calibre .380; una Smith & Wesson calibre .40 y una Taurus 9 mm. También hallaron indumentaria de la Policía Federal Argentina (PFA): cuatro conjuntos de gorra, chomba y campera, 19 precintos plásticos y dos silenciadores para pistola.
"Se comenzó a investigar para tratar de determinar que hacían en Misiones. No hay dudas de que estaban para concretar un plan criminal. A partir de una fotografía que había en un teléfono celular se descubrió que ya habían estado en Posadas y se habían alojado en un complejo de cabañas turísticas. En ese lugar eran visitados por un ciudadano argentino", recordó una fuente de la investigación.
Era un misterio la relación de ese ciudadano argentino con los cuatro brasileños hasta que el 26 de mayo pasado la Gendarmería detuvo a los dos ocupantes de un Nissan Sentra que había sido robado en Esquel. Uno de ellos eran Luis Baden, el contacto del otro grupo criminal.
"Fue una coincidencia que llamó la atención. Baden estaba acompañado por un ciudadano paraguayo que había ingresado ilegalmente en nuestro país. En el auto secuestramos una pistola Glock nueve milímetros", dijo un investigador del caso. La Justicia ordenó un allanamiento en la casa de Baden donde fueron detenidos sus dos cuñados, uno de ellos soldado voluntario del Ejército, y se secuestró un fusil de asalto norteamericano y otras armas.
"La sospecha es que Rojas era una especie de coordinador en la Argentina de los grupos criminales brasileños. Por eso nos llamó mucho la atención que lo hayan mandado al mismo pabellón donde están alojados los cuatro brasileños detenidos en Misiones", dijo un detective del caso. Otra fuente que participó de las investigaciones en Misiones sobre Rojas, de 43 años, sostuvo que "según la Policía Nacional de Paraguay este delincuente es importante contrabandista de marihuana".
Si bien en un primer momento se pensó que los cuatro ciudadanos brasileños eran integrantes del PCC ahora los investigadores suponen que, en realidad, formaban parte de Bala na Cara.
Temas
Otras noticias de Narcotráfico
- 1
La desesperada reacción de un hombre al que le querían robar el auto con su hija en el interior
- 2
Jonatan Leiva: El policía que evitó que una mujer se arrojara al vacío desde el puente de una autopista
- 3
“Nos aseguramos de que las cárceles no sean escuelas del crimen”, dijo Patricia Bullrich al inaugurar un penal federal
- 4
Operativo de la Gendarmería: cayó una banda narcocriminal que operaba en la villa 1-11-14